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Consejos para una buena presentación oral

A lo largo de todo recorrido profesional como odontólogos, es más que probable que llegue un momento en el que haya que hacer una presentación oral ante compañeros de estudio, un tribunal, el equipo de la clínica o el dueño de la misma.

Dependiendo del caso, vamos a ver unas pautas sobre la manera más óptima de hablar y exponer ante una audiencia, grande o pequeña.

Prepara la presentación

Conoce a tu público

Es importante tener en cuenta a quién te diriges al hablar en público, ya que no es lo mismo hablar ante tus compañeros de clase que frente a un auditorio, una junta directiva o compañeros de laboratorio, por ampliar las situaciones mencionadas anteriormente.

Adaptarte a tu audiencia implica, por un lado, adaptar el nivel de tu presentación – si son o no temas que tu audiencia domina -, además de usar un lenguaje adecuado y definir bien los puntos a tratar.

Céntrate en los datos relevantes

Si hablamos de presentaciones científicas o estudios de investigación, lo más normal es que incluya términos de estadística, fórmulas o expresiones que es importante transmitir de forma se puedan entender.

Por ejemplo, si estás haciendo una presentación oral de carácter divulgativo, resalta más que los números en sí, su importancia respecto a cómo afectan en un caso concreto que se encuentre cercano a la realidad de quien está escuchando. Una situación que aplique a la vida real, por ejemplo.

Haz de la presentación escrita tu aliada

Para acompañar a tu presentación oral, lo habitual es tener una presentación en slides que te apoye. Recuerda que es eso, un apoyo, no una distracción para el público. Usa un diseño limpio, que no esté recargado.

Lo ideal sería un punto por diapositiva, pero no pasa nada si son alguna más. Lo importante es que tengan un encabezado que deje claro de qué punto estás hablando.

En cada diapositiva utiliza listados, párrafos cortos, resalta con mayor tamaño o diferente color las palabras clave de lo que estás explicando.

Utiliza imágenes, gráficos, esquemas. infografías… No todo a la vez, sino lo que consideres necesario para transmitir mejor la información.

Reglas a tener en cuenta

En base a lo mencionado, existen dos reglas que puedes utilizar tanto en la presentación oral como la escrita:

  • La regla del 3-7: En principio, nuestra memoria de corto plazo solo retiene un máximo de 7 puntos, por lo que no trates más de siete temas destacados, expón solo los temas que sean realmente relevantes.
  • La regla del 10-20-30: La presentación en slides no debe tener más de 10 diapositivas – de ahí que lo ideal es un punto por diapositiva con alguna excepción; hay que usar un tamaño de letra que se lea bien. Y además. si es posible, la presentación oral no debe durar más de 20 minutos.

No son reglas que estén escritas en piedra, pero sí un punto de partida.

Cómo hacer presentaciones

Practica y memoriza

Incluso si conoces la materia de lo que vas a exponer al dedillo, practicar tu exposición oral te va a ayudar a no atascarse, no vacilar y por tanto, va a mostrar seguridad. Harás la presentación con un ritmo y una seguridad diferentes.

Sobre todo si aún no tienes mucha experiencia, practica tu presentación en voz alta, ya sea frente a un espejo o grabándote en tu móvil. Verte y oírte te hará darte cuenta de muchas cosas – gestos, pausas, etc – que de otra manera no vas a poder percibir. Pero quien te esté escuchando o viendo, sí.

Y si hay algo que no te gusta, lo podrás corregir antes de exponer.

La presentación oral al público

Llegados ya a la parte en que te debes enfrentar a tu auditorio o público, tenemos algunos consejos más:

Exprésate de forma clara y directa

Céntrate en explicar y desarrollar los conceptos que son necesarios de forma clara y concisa, no pierdas tiempo en los que no aportan. Debes mantener la atención de quien te escucha, las personas a las que te diriges deben poder seguir con facilidad el hilo de la presentación.

Lo mismo sucede con el lenguaje, hay que elegir bien las palabras, saber transmitir lo complejo, en caso de que el auditorio no tenga los mismos conocimientos que tú, de manera sencilla.

Es muy importante mantener un ritmo a la hora de dirigirte al público, entonar bien y vocalizar cuidadosamente. A veces, por querer decir muchas cosas, aceleramos la velocidad para ajustarnos al tiempo.

Es mejor decir menos – acuérdate, centrarse en lo que es realmente relevante – y exponer con calma.

Cuida tu lenguaje corporal

Hacemos muchos gestos de los que muchas veces no somos conscientes y que dicen más de nosotros de lo que pensamos. Mantén la postura correcta, no muevas demasiado las manos, no te las restriegues, no cruces los brazos, pero tampoco los dejes caídos a los lados como un peso muerto…

En definitiva, toma el control de tus gestos, que deben estar en consonancia con tu discurso o exposición.

El contacto visual es importante

Recuerda que estás hablando con un auditorio o un grupo de personas concreto. Mírales, explícales. Solo de esta manera lograrás establecer una conexión con la audiencia. Que se sientan parte de la exposición.

De esta manera, además, podrás ver sus reacciones a lo que estés exponiendo. Algunas personas te devolverán la mirada, asentirán con la cabeza, les verás estudiar tus datos en los slides con interés… Y todo esto también te ayudará a saber que vas por buen camino.

No te olvides del feedback

Puede que seas capaz de predecir algunas de las preguntas que puedan surgir. En ese caso, anticípalas y úsalas dentro de tu exposición.

Sin descuidar u olvidar darle a los asistentes la posibilidad de seguir preguntando cualquier otra duda que tengan. De hecho, es una buena idea propiciar, – siempre que esté permitido – la conversación posterior a la presentación oral, de forma controlada y bajo unos parámetros.

No te olvides de agradecer o alentar de alguna manera la participación. Alabando el hecho de que es una buena pregunta, pidiendo su opinión antes de dar tú la tuya, no solo les hace sentir valorados en su participación, también te compra a ti algunos momentos para armar mejor tu respuesta a su pregunta o feedback.

Consejos según el tipo de audiencia

Como se ha indicado al principio, el tipo de público o audiencia a quien te enfrentes a la hora de hacer una presentación oral puede ser muy distinto según el momento de tu carrera. Por eso dejamos unos apuntes extra respecto a lo que se ha ido explicando en los puntos anteriores.

Ante tus compañeros de clase

  • Asegúrate de que tu presentación se adapta a los objetivos del curso y al nivel de conocimiento de tus compañeros.
  • Utiliza ejemplos específicos y aplicables a la práctica dental.
  • Prepara posibles preguntas que tus compañeros puedan hacerte y ensaya tus respuestas.
  • Pide feedback constructivo para mejorar tu presentación y tus habilidades en general.

En una defensa de tesis o TFM

  • Asegúrate de que estás preparado para presentar tu trabajo de investigación de manera clara y concisa.
  • Utiliza lenguaje técnico cuando sea necesario, pero también explica los términos más complejos de manera sencilla.
  • Destaca los puntos fuertes de tu investigación y cómo contribuye a la comunidad científica y a la práctica odontológica.
  • Prepara posibles preguntas que puedan hacer los miembros del tribunal y ensaya tus respuestas.
  • Mantén la calma y la compostura ante cualquier crítica o pregunta difícil.

En una ponencia de un congreso

  • Investiga el público objetivo del congreso y adapta tu presentación a ellos.
  • Asegúrate de que tu presentación está en línea con el tema del congreso y de que aporta algo nuevo e interesante.
  • Prepara posibles preguntas que puedan hacer los asistentes y ensaya tus respuestas.
  • Utiliza imágenes y gráficos de alta calidad para apoyar tus argumentos.
  • Sé conciso y enfatiza los puntos clave de tu presentación.

Lo importante en cualquier caso, como puedes ver, es ir bien preparada/o, habiendo ensayado y memorizado la exposición, expresando solo lo más importante y conectando con la audiencia.

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