La erosión dental es un problema irreversible que puede provocar, entre otros, hipersensibilidad dental, problemas para comer, exposición de la pulpa y formación de abscesos. Incluso puede llegar a provocar la pérdida de dientes.
En este estudio, dirigido por Abla Arafa, PhD, de la Misr. Universidad Internacional en Egipto y cuyos resultados se han publicado en el Pediatric Dental Journal, se ha estudiado concretamente qué tipo de bebida azucarada provoca la mayor cantidad de erosión dental en los dientes de leche.
Metodología
Para llevar a cabo la investigación, un total de 52 molares temporales humanos se sometieron durante 28 días a una inmersión cíclica en cuatro soluciones diferentes:
- Saliva artificial.
- Leche con sabor a fresa.
- Jugo de naranja.
- Y Pepsi, como ejemplo de bebida carbonatada.
Usando un microscopio electrónico de barrido, los investigadores evaluaron – al inicio, a las 2 semanas y a las 4 semanas, – la microdureza de la superficie del esmalte y su topografía.
Resultados
- El refresco carbonatado y el jugo de naranja mostraron una alta potencialidad erosiva en la superficie del esmalte de los dientes de leche: a las cuatro semanas estaba mucho más erosionado que en los grupos de la bebida de fresa y de saliva artificial. Además, la Pepsi y el jugo de naranja presentaron también la acidez más alta tras los 28 días.
- Por otro lado, los grupos de bebida a base de leche y de la saliva artificial no mostraron ninguna diferencia de erosión entre ellos, lo cual fue sorprendente para los investigadores. Atribuyeron este hecho a factores como que los efectos de las proteínas de caseína inhiben la disolución y elevan el pH en la superficie del esmalte, lo que limita el ablandamiento de la estructura dental.
Sin embargo, debido al contenido de azúcar añadido, las bebidas lácteas saborizadas representan un mayor riesgo para las personas de desarrollar caries, por lo que igualmente no recomiendan su consumo frecuente
De hecho, otro estudio ha arrojado que incluso las bebidas sin azúcar también podrían erosionar el esmalte dental, a causa de sus ácidos.
Los autores del estudio concluyen que además del riesgo de erosión dental, el consumo frecuente de jugos azucarados y refrescos carbonatados puede aumentar el riesgo de caries dental, especialmente en los niños. Por lo que defienden que, «se debe desaconsejar encarecidamente el aumento del consumo de refrescos carbonatados por parte de niños y adolescentes«.
En esta línea, un estudio llevado a cabo por el Servicio de Odontobebé del Hospital HM Nens de Barcelona advierte que la caries de primera infancia severa ya se encuentra en uno de cada cuatro bebés, destacando como uno de los motivos el aumento de azúcar en la alimentación infantil.
Fuente: Abla Arafa, Sahab Salah Filfilan, Hoda A. Fansa.
Erosive effect of beverages on surface hardness and ultra-structure of deciduous teeth enamel, Pediatric Dental Journal, 2022, ISSN 0917-2394.
https://doi.org/10.1016/j.pdj.2022.08.001