Este síndrome se caracteriza por una lenta y progresiva atrofia facial unilateral (más frecuente en el lado izquierdo) que afecta a los tejidos blandos; principalmente, al tejido celular subcutáneo, piel, tejido conectivo, cartílago, músculo, hueso, etc. Las causas son desconocidas, por lo que han surgido diversas teorías por parte de los investigadores en cuanto a su origen.
Introducción
Este síndrome fue descrito en 1825 por Caleb Hillier Parry y, posteriormente, fue desarrollado por Moritz Heinrich Romberg y Eduard Heinrich Henoch en 1846. Pero el término «atrofia hemifacial progresiva» por el cual hoy día conocemos a este síndrome se debió a Albert Eulemburg en 1871 (1-3).
El Síndrome de Parry Romberg es una enfermedad rara, degenerativa, de evolución lenta y progresiva. Su inicio es insidioso en la primera o segunda década de la vida. Suele afectar más a las mujeres que a los hombres, aunque hay controversia entre diferentes autores. La prevalencia es de 1/700.000 (4). Su evolución es progresiva en el tiempo; posteriormente se estabiliza, aunque no se recupera la atrofia existente.
Este síndrome se caracteriza por una lenta y progresiva atrofia facial unilateral (más frecuente en el lado izquierdo) que afecta a los tejidos blandos; principalmente, al tejido celular subcutáneo, piel, tejido conectivo, cartílago, músculo, hueso, etc.
Palabras clave: síndrome de Parry Romberg.