El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción nº4 de Santa Cruz de Tenerife ha condenado a una protésico dental por lleva a cabo funciones de un dentista en un centro protésico de la localidad de Realejos.
Según la sentencia, la acusada había realizado en mayo de 2022 “al menos en una ocasión, actuaciones que suponen la manipulación de la boca del paciente, tales como la toma de impresiones o medidas, instalación de prótesis y comprobación posterior del estado de las prótesis”.
La condena asciende a seis meses de multa con una cuota diaria de 10 euros y responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago, así como al pago de las costas procesales.
La acusada ha manifestado su conformidad con la pena solicitada, cuya sentencia es firme y no cabe recurso alguno contra la misma.