Con una larga trayectoria profesional a sus espaldas, la Dra. Carmen Pomares ha sido premiada con el Mejor Vídeo Clínico Quirúrgico de Implantología por la Asociación Europea de Oseointegración. Un galardón que, sin duda, ve reconocido el esfuerzo, las horas de trabajo, el sacrificio y el afán de superar retos para llegar al objetivo marcado.
— Dra. Pomares, recientemente ha sido galardonada con el Mejor Vídeo Clínico Quirúrgico de Implantología por la Asociación Europea de Oseointegración. ¿Qué ha supuesto para usted este reconocimiento, tanto a nivel profesional como personal?
Pues a nivel profesional y personal ha sido como ver premiada toda una trayectoria; desde que estudié Medicina en Alicante, a cuando escogí Estomatología vía MIR en Oviedo, donde me formé también en Periodoncia como alumna interna y luego saqué Experto de Implantología en la Universidad Complutense de Madrid, persiguiendo desde ahí la formación en todas las técnicas más punteras allá donde se encontraran.
Todas las decisiones y dedicación te van encauzando a ramas cada vez más especializadas de la disciplina que eliges; en este caso, Periodoncia e Implantología. Todos los esfuerzos, las horas de trabajo, el sacrificio y el afán de superar retos para llegar al objetivo marcado te conducen hasta un momento concreto que, por fin, se ve reconocido y, además, a nivel internacional. Ha sido muy gratificante para mi equipo y para mí, ya que solo contábamos con recursos propios y una gran dosis de confianza e ilusión en el proyecto.
Lo que nos aguarda es apasionante y el que no esté preparado para esta revolución digital, pronto quedará desfasado
— La «Técnica Doble Factor» es, precisamente, la protagonista de dicho vídeo. ¿Cómo y por qué surgió la creación de esta técnica?
Desde 2005 que surgió la Cirugía Guiada aposté por ella y formé parte del grupo global de testeo y desarrollo, por lo que se convirtió en parte muy importante de mi labor clínica. Desde esa fecha no volví a abrir un maxilar para su rehabilitación implantológica (salvo que se precisara de regeneración) y me reportó un modo de trabajar mínimamente invasivo con unos resultados excelentes que publiqué en 2009 y 2010 en el European Journal Oral Implantology.
En 2018, como parte del primer grupo europeo en formarse, adquirí una de las tecnologías existentes para Cirugía Navegada y con su uso comprobé que, para edentulismo unitario y parcial funcionaba perfectamente, pero para edentulismo total no respondía a las necesidades clínicas que yo consideraba imprescindibles, así que decidí encontrar mi propia solución fusionando ambas técnicas para sacar lo mejor de ambas y sumar ventajas en beneficio de mis pacientes. De ahí surgió la Técnica del Doble Factor: un doble factor de verificación y seguridad en la colocación de implantes de modo guiado y monitorizado.
Lo desarrollé y creé un sistema de férulas compatibles para ambos softwares de guiada y navegada y lo patenté a final de 2019, así como también registré la propiedad intelectual del Protocolo del Doble Factor. Realizamos un estudio clínico y nos publicaron el primer artículo descriptivo de la técnica en 2020 en el Journal of Prosthetic Dentistry. Ahora estamos pendientes de que nos publiquen un segundo artículo con los exitosos resultados clínicos. Ha sido una apuesta muy importante.
— ¿En qué consiste exactamente y cuáles son las ventajas o novedades que ofrece en Implantología frente a otras técnicas?
La Técnica del Doble Factor nos permitirá usar los beneficios de la Cirugía Estática o Guiada como primer factor de comprobación y precisión para la colocación de implantes dentales, sumando los beneficios como segundo factor en exactitud de la Cirugía Dinámica o Navegada. El objetivo es evitar handicaps como la imprecisión de la mano alzada de la Navegada, el exceso de tiempo requerido de ésta para edentulismo total con la falta de certeza de la emergencia protésica o las limitaciones en la Guiada de no tener visión del hueso y espacio en tiempo real en 360º.
Para ello contaremos con unas férulas adaptadas y un protocolo que os invito a conocer en el vídeo que presentamos en la pasada EAO de Ginebra. Con el Doble Factor reduciremos el tiempo clínico a una hora aproximadamente entre diseño, calibración y ejecución con confort, estética y función. Ganaremos en precisión, rapidez y predictibilidad.
— Respecto a otros países, ¿cómo ve la situación española en cuanto a nivel de investigación y técnicas en Implantología?
Creo que podemos estar orgullosos del nivel de Implantología que desarrollamos y exportamos, con grandes ponentes y potencial investigador. Solo falta que las marcas se impliquen más en ayudar a los profesionales con afán investigador y colaboren en subvencionar estudios clínicos que revertirían en la calidad de productos y tratamientos y la posibilidad de reducir costes en ciertas maquinarias para hacerlas más asequibles y que así pudieran ser incorporadas a más consultas. A los jóvenes los animaría a continuar formándose y seguir su instinto para la innovación y hacer crecer aún más el sector con sello español.
— ¿Considera que ha habido cambios significativos en esta disciplina con el paso de los años o cree que todavía queda mucho por hacer?
Los últimos años hemos vivido muchos cambios con la carrera en el Flujo Digital: conseguir que todos los pasos y disciplinas estén apoyadas en software y soluciones digitales hacia el paciente virtual. Se trabaja en reconstrucción facial, al mismo tiempo que realizamos escaneado óseo para sumar diseño de sonrisa y tener toda la información procesada. Se están comenzando a usar hologramas combinados con Navegación Dinámica y protocolos de trabajo totalmente digitales y no sabemos hasta dónde podemos llegar con la Inteligencia Artificial y si acabaremos comprando espacios en el Metaverso para nuestros proyectos. Creo que lo que nos aguarda es apasionante y el que no esté preparado para esta revolución digital, pronto quedará desfasado.
A los jóvenes los animaría a continuar formándose y seguir su instinto para la innovación y hacer crecer aún más el sector con sello español
— ¿Algún reto o meta que tenga en mente?
Seguir aprendiendo para aplicar todas las novedades en nuestros tratamientos interdisciplinares, discriminando y adquiriendo lo necesario para ofrecer lo mejor en aras de la excelencia odontológica, lo que nos lleva inexorablemente a pensar en mejoras de biomateriales, productos, técnicas, tecnología y, sobre todo, trabajo en equipo. Ahora lo más inmediato es difundir técnicas como la del Doble Factor entre los compañeros que deseen conocerlas en nuestros programas de formación y seguir creciendo sumando avances.
