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TurkeyTeeth, la peligrosa moda que ya afecta a varios pacientes españoles

A comienzos del mes de septiembre, el Consejo General de Dentistas alertaba sobre una peligrosa tendencia que se estaba extendiendo en Reino Unido: TurkeyTeeth. Apenas 15 días después, la entidad colegial informa sobre los primeros casos de pacientes españoles afectados por esta moda.

El Dr. Ferrán Llansana, dentista, ha comunicado que en su clínica ya ha atendido a seis pacientes españoles de entre 30 y 35 años que, tras volver de Turquía, intentan arreglar los daños que les han causado. Cuatro de ellos fueron de manera organizada desde Mallorca con un representante que les ponía en contacto con la clínica turca. Tal y como declara el Dr. Llansana, “actualmente, acabamos de tratar a un paciente porque se le cayó una corona y presentaba una lesión apical aguda en dos dientes que requirieron una endodoncia, además de un ajuste oclusal complejo y de la rehabilitación de las 20 restauraciones”.

Este tipo de tratamientos cuentan con un alto índice de fracaso por “la ausencia de una planificación exhaustiva. Una buena planificación permite obtener el mejor resultado estético con el menor tallado del diente”, destaca Llansana. De hecho, asegura que las preparaciones dentales que les hicieron a estos pacientes en Turquía eran más parecidas a las que se realizan para colocar coronas inclusivas (fundas) que para carillas mínimamente invasivas.

El Dr. Llansana añade que en todos los casos provenientes de Turquía se constata la falta de trabajo con instrumentos de magnificación e incluso de microscopio, además de no invertir el tiempo necesario en realizar un correcto mock up que garantice el volumen final de la restauración. “He observado que se realizaron procesos más estándar y no lo adecuado en estos casos: planificar el volumen final de la restauración y después reducir apenas 0,2 o 0,3 milímetros de diente o incluso descartando aquellos casos que previamente precisen de tratamientos complementarios, como puede ser la ortodoncia”, detalla el Dr. Llansana.

El tallado tan agresivo de los dientes que les han practicado a estos pacientes en Turquía favorecerá a largo plazo una afectación periodontal. Ahora padecen periodontitis apicales agudas que requirieron endodoncia en algunas de las restauraciones; pero también presentaban molestias en la masticación por falta de equilibrio oclusal, además del disgusto estético. Además, en pocos meses, dada la adhesión realizada en la dentina y los dudosos protocolos adhesivos, los descementados de las restauraciones cerámicas podrían ir en aumento.

Daños irreversibles ocasionados por esta peligrosa moda

Los daños ocasionados por tratamientos de carillas mal ejecutados son irreversibles y condicionarán de por vida la supervivencia de los dientes. “Mi consejo para los ciudadanos es que deben ponerse en manos de dentistas que le puedan garantizar los resultados estéticos que buscan, dedicándoles el tiempo que se merecen. De esta forma, el resultado estético y funcional será bueno. Hay que aclarar que no siempre las carillas son la solución a corto plazo, sino el proceso final de la solución al problema. Por ejemplo, algunos pacientes que tengan mala mordida o apiñamientos severos deben llevar previamente ortodoncia”, subraya el Dr. Llansana.

Por su parte, el presidente del Consejo General de Dentistas, el Dr. Óscar Castro Reino, hace un llamamiento a todos los dentistas que trabajan en España “para que notifiquen a los Colegios Oficiales de Odontólogos todos los casos de pacientes que hayan recibido un tratamiento fallido en Turquía y que, a su vez, los Colegios trasladen esa información al Consejo para así poder tomar las medidas legales oportunas”.

Por último, el Dr. Castro insiste en que “no todas las clínicas dentales turcas realizan malos tratamientos. Como en todas partes, existen dentistas muy cualificados que trabajan con gran profesionalidad. El problema está en aquellas clínicas en las que la persona es tratada como un número más y no como un paciente único”.

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