La Sociedad Española de Ortodoncia y Ortopedia Dentofacial (SEDO) se ha sumado a la celebración del Día Mundial de la Ortodoncia y ha recordado la importancia de realizar una primera revisión de Ortodoncia a los 6 años del niño y no más tarde de los 7, “puesto que durante la edad de crecimiento, el ortodoncista puede corregir y guiar el desarrollo del maxilar y la mandíbula, y esto puede mejorar sustancialmente la calidad de vida del menor e, incluso, evitarle una posible cirugía en la edad adulta”.
Tal y como recuerda el presidente de la SEDO, Juan Carlos Pérez Varela, “la ortodoncia no es sólo una cuestión estética, sino que redunda en la salud bucodental y, por ende, en la salud general”, con lo que atajar los posibles problemas en la infancia evitará enfermedades en el desarrollo de los niños.
Según se destaca en la última Encuesta de Salud Oral en España -realizada en 2020- el 9,7% de los niños de 12 años recibieron un tratamiento de ortodoncia. Una cifra que se eleva hasta el 12,6% en el caso de los adolescentes de 15 años. En adultos jóvenes, un 2% son portadores de ortodoncia.
La SEDO recomienda, pues, acudir periódicamente al dentista desde la infancia para detectar a tiempo posibles anomalías en la erupción de los dientes y corregirlas de una forma sencilla antes de que aparezcan problemas funcionales que puedan afectar a la boca.
“Si queremos garantizar una larga vida a nuestra dentadura, es fundamental trabajar en ese sentido”, subrayan desde la SEDO. Porque, según explican, “una maloclusión por un mal alineamiento de los dientes o por un encaje inadecuado entre el maxilar superior y la mandíbula, repercute negativamente en la salud”.
Para paliarlo, “la ortodoncia permite el alineamiento de los dientes y la normalización de la posición y el tamaño del maxilar y la mandíbula, favoreciendo que los dientes encajen bien entre ellos y procurando la completa masticación de la comida”. Como consecuencia de todo ello, “los dientes no se estropean y se mantienen saludables” porque, entre otras cosas, esa buena alineación permite una mejor higiene dental. Así se evita la proliferación de bacterias y la aparición de problemas en las encías, como gingivitis y enfermedad periodontal.
En este sentido, la SEDO recuerda que “la infección periodontal incrementa el riesgo de padecer enfermedad cardiovascular, y afecta a enfermedades respiratorias, perjudica el control de la glucemia en personas con diabetes y da lugar a complicaciones durante el embarazo, llegando a provocar partos prematuros”.
El Día Mundial de la Ortodoncia “debe servir también para recordar y subrayar que la salud de la boca afecta claramente a la salud general de los pacientes y a su bienestar, por lo que el tratamiento de ortodoncia proporciona grandes beneficios que van más allá de una bella sonrisa”, subraya Juan Carlos Pérez Varela.