Si estás haciendo esta pregunta, seguro que ya sabes que los retenedores dentales son dispositivos que debes usar durante toda la vida tras llevar un aparato de ortodoncia, para así poder mantener la perfecta alineación de los dientes que tanto te ha costado conseguir.
Tal como explica la Clínica Garcelán, pueden ser de dos tipos, el fijo y el móvil. Normalmente es el retenedor móvil el que suele dejar de entrar o encajar, al ser el más susceptible de manipulación: lo quitamos y ponemos, a veces, sin pensar en las consecuencias o por puro cansancio o porque en un momento dado nos conviene no llevarlo… Puede haber mil causas. Y de todo ello hablamos a continuación, así como de las consecuencias y soluciones.
¿Qué hago si no me entran los retenedores?
Lo primero, algo que puede parecer obvio pero queremos dejar claro: a veces puedes tener la sensación de que el retenedor no encaja porque lo sientes flojo, no porque no entre.
En realidad, los retenedores dentales no van a provocar en los dientes ningún movimiento, solo a «sujetarlos» en su sitio, por lo que no deben hacer presión. Puede que por eso te dé la sensación de que está flojo, pero en realidad está bien. Pero por supuesto, si tienes alguna duda, lo mejor es acudir a tu dentista.
La otra opción, que es a la que realmente se refiere la pregunta, es más bien la contraria: el retenedor no encaja porque te queda apretado, ejerce demasiada presión. Esto se debe a que las piezas dentales o al menos alguna en concreto, se han movido. Lo que ha descolocado la alineación y ahora hace que el retenedor, que es específico para la posición alineada de la dentadura, ahora no encaje bien.
Ante esto, poco puedes hacer. Sobre todo si se ha movido un diente, aunque sea por milímetro. Debes ir a tu ortodoncista y que valore la situación.
Sí, la respuesta a tu pregunta no es la más alentadora, ya que en realidad no puedes hacer nada para solucionarlo. Pero sí puedes evitar que vuelva a pasar, y de eso hablamos en el siguiente punto.
Cómo evitar que los retenedores dejen de encajar
Tal como se ha mencionado en el punto anterior, si no te entran los retenedores dentales, lo mejor es acudir al dentista. Pero por nuestra parte, queremos darte también estos consejos para que no vuelva a pasar:
- Hay que hacer un correcto cuidado del retenedor.
- Solo debes quitártelo cuando sea estrictamente necesario. Si lo dejas quitado durante mucho tiempo, los dientes tienden a volver a su posición original – por eso es que el retenedor es para toda la vida, para evitar esto. Y si los dientes se mueven, el retenedor ya no entrará bien. O no entrará en absoluto.
- Pregunta a tu ortodoncista las mejores pautas de uso del retenedor. Es probable que después de pasado un tiempo, puedas empezar a quitártelo con más frecuencia, pero es importante que esta decisión no la tomes tú porque sí. Siempre déjate guiar profesionalmente.
- Y algo más a tener en cuenta: para asegurarte que los retenedores cumplen su función y toda va bien con ellos, antes de nada los tienes que haber adquirido con supervisión de tu dentista. Decimos esto que parece lógico porque cada vez son más los pacientes que llegan a las clínicas con problemas derivados de haber comprado sus alineadores transparentes en Internet, lo cual no es aconsejable.