Según una encuesta del COEM, casi la totalidad de los encuestados asegura haber aumentado y mantenido las medidas de protección en el centro de trabajo respecto a las asumidas durante la primera ola en primavera, consolidando la clínica dental como un entorno seguro.
El Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de la I Región (COEM) ha realizado una segunda encuesta entre sus más de 9.000 colegiados sobre la repercusión que la segunda ola de la pandemia de coronavirus (COVID-19) está teniendo en su profesión, tanto a nivel sanitario como económico.
El objetivo de esta encuesta, que se ha realizado de manera online y ha contado con una estimable participación de la colegiación, ha sido recabar toda la información necesaria sobre la situación real del colectivo para, por un lado, trasladársela a las autoridades gubernamentales, y por el otro, para que desde el COEM se puedan adoptar las medidas más necesarias para dentistas y pacientes.
Uno de los puntos más destacados de los datos obtenidos es el alto número de dentistas que se ha sometido a una prueba serológica a propia iniciativa. La mayor parte de estas pruebas se han realizado en la Fundación Jiménez Díaz (perteneciente al Grupo Quirónsalud) gracias al acuerdo que el COEM y su Fundación (FCOEM) han firmado con este grupo hospitalario y que ofrece a los colegiados un precio muy competitivo. Cerca de un 80% de los encuestados afirma haberse hecho una serología durante la pandemia para la detección de anticuerpos frente al coronavirus y de ellos, más de un 40% lo hizo en virtud del convenio antes mencionado.
Es reseñable asimismo la alta disponibilidad de los dentistas del COEM a realizar test rápidos de antígenos en sus clínicas, siendo más de un 86% de los encuestados los que se han mostrado favorables a esta acción.
A pesar de que la mitad de los encuestados considera que se ha reducido la afluencia de los pacientes durante el segundo Estado de Alarma decretado, cerca de un 60% considera que los pacientes no acuden con temor durante esta segunda ola y confían en la clínica como un entorno seguro. Además, más del 92% de los profesionales asegura haber aumentado y mantenido las medidas de protección en el centro de trabajo respecto a las asumidas durante la primera ola en primavera.