Revisión bibliográfica
Resumen
Al realizar la colocación de implantes, así como al ponerlos en función en un medio tan contaminado por bacterias como es la boca, la microbiología de ésta desarrolla un factor importante al facilitar los procesos infecciosos en los tejidos periimplantarios, influyendo de manera significativa en la tasa de éxito o de supervivencia a largo plazo de los implantes.
Múltiples factores se han estudiado sobre el fracaso de los implantes, el cual puede ocurrir desde la misma colocación de éstos. Podríamos resumir que las causas fundamentales son contaminación bacteriana, trauma quirúrgico, sobre todo por sobrecalentamiento en la preparación del lecho del implante, y la sobrecarga oclusal, asociada con la función en boca de los implantes, tras la fase rehabilitadora o prostodóncica, si bien esta última también desarrolla un componente infeccioso, por la aparición de bolsas periimplantarias.
La cirugía intraoral se clasifica como cirugía limpia-contaminada, ya que el campo quirúrgico se puede contaminar por diferentes causas que facilitan la entrada de bacterias, casi todas ellas derivadas de la propia instrumentación, así como la presencia de saliva en el campo quirúrgico o de la relación de la cirugía con zonas extraorales.
El objetivo de este artículo se limita a responder la pregunta sobre la influencia que tiene la colocación del implante en un medio tan contaminado por bacterias como es el medio oral, y su relación con el fracaso temprano del implante, ya que el medio oral representa un ambiente hostil y agresivo desde el punto de vista bacteriano, favorecedor de las infecciones.