Analizar la tendencia del consumo para la clínica es muy importante ya que representa el verdadero indicador de la salud del sector dental.
El consumo de materiales dentales está directamente relacionado con el número de pacientes que acuden a la clínica, que, a su vez, influyen en los ingresos del sector. También los consumos de laboratorio están directamente relacionados con la evolución en la tendencia de pacientes, aunque vivan dinámicas propias –un mayor crecimiento en valor– que se explican en la progresiva transformación del negocio de productos de servicio y del incremento del peso de los materiales para CAD-CAM.
Conviene no olvidar que los ingresos de la clínica dental inciden notoriamente en la confianza del dentista, una confianza que lleva a creer y apostar en mayor medida por el futuro e invertir en tecnologías y renovaciones.
Para medir las tendencias de mercado, Key-Stone ha desarrollado un «Panel de Sell-out» o, lo que es lo mismo, un sistema de recogida de los datos de ventas de un grupo de distribuidores y fabricantes que representan más del 70% de las ventas totales en España. Gracias a este sistema podemos analizar algunas tendencias trismestrales muy interesantes registradas tras el cierre de 2015.
El gráfico muestra dos modalidades distintas de medición de las tendencias de mercado: la línea azul indica la tendencia trimestral (con una base anual), mientras la línea roja tiene como base fija el cierre de 2015, y de hecho, mide la cantidad absoluta de valor añadido respecto al punto de partida del análisis.
Como todos sabemos, el mercado dental español está afectado de manera evidente por la feria Expodental, que se celebra generalmente en el primer trimestre de los años pares, si bien es cierto que el impacto del evento recae mayoritariamente en la venta del instrumental y no en el material de consumo.
El crecimiento que se pone de manifiesto en el primer trimestre de 2016 podría entonces hallarse influido por acciones promocionales que normalmente se verifican en ocasión de Expodental. No obstante, la tendencia también ha sido positiva en todos los demás trimestres de aquel año y el mercado ha continuado creciendo hasta finales de marzo de 2017, momento en el que el valor total del consumo con base anual era un 13% superior respecto al punto de partida, o lo que es lo mismo, 2015.
Lo que se revela a partir del pésimo mes de abril de 2017 es un verdadero freno en el crecimiento. Aunque en este caso se pensó en que se tratase de una ralentización coyuntural debido a las festividades de pascua, en realidad no hemos vuelto a tener una verdadera recuperación de las ventas a lo largo de todo 2017. Tampoco los datos de octubre y noviembre resultan positivos.
La parte positiva es que podemos considerar que el valor total de los consumos se mantiene en cualquier caso en un 13% que los de 2015, pero se trata de un sistema que tiende al crecimiento perenne, con márgenes que se van comprimiendo. Por todo ello, podemos hablar de un 2017 no exactamente negativo, pero sí estancado, desde la esperanza de un 2018 de posterior crecimiento y prosperidad.