España ha caído dos puestos en el ranking mundial de competitividad, hasta el 34 del mundo, según el Índice de Competitividad Global, un informe del Foro Económico Mundial que este año clasifica a 138 países según su capacidad para competir en el mercado global. Concretamente baja en competitividad por empleo, entorno macroeconómico e innovación.
El informe estudia doce grandes variables que incluyen la calidad de las instituciones públicas y las infraestructuras, la educación de la población, la madurez tecnológica o la innovación, además de considerar otras laborales y financieras. La variable que más lastra a España es el entorno macroeconómico. El país se ubica en la posición 122 mundial. En el capítulo de infraestructuras, en cambio, ocupa el puesto 12 por su buena puntuación en construcción en el ámbito del transporte y en la capacidad de las aerolíneas que operan en sus aeropuertos. Como indicadores específicos el informe puntúa los países en 114 aspectos. Ahí, España consigue el mejor registro en esperanza de vida, la cuarta más alta de los Estados analizados.
Los diez países más competitivos son, por noveno año consecutivo, Suiza, seguida de EE UU, que sube una posición desplazando a Singapur al tercer puesto. Holanda y Alemania se mantienen en el cuarto y quinto puesto, respectivamente, por delante de Hong Kong, que mejora hasta tres posiciones.
Suecia baja un puesto hasta el séptimo lugar, al igual que el Reino Unido y Japón, los dos siguientes en el ranking, mientras que Finlandia se mantiene en el décimo puesto. Por su parte, y si bien continúan rezagados, los países latinoamericanos mejoran posiciones en su conjunto.
