La Unión Interprofesional de la Comunidad de Madrid (UICM), a través de su Comisión de Sanidad, ha presentado, en el Día Europeo contra las Agresiones a Profesionales Sanitarios, una radiografía del incremento en los últimos cuatro años de las agresiones a los profesionales sanitarios colegiados en la Comunidad de Madrid.
Marisol Ucha, presidenta del Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de la I Región, responsable de la Comisión de Sanidad y vocal de la Junta Directiva de UICM, ha sido la encargada de presentar una campaña de sensibilización para combatir las agresiones.
Junto a ella también han estado presentes: Mar Rocha, portavoz y tesorera del Ilustre Colegio Oficial de Enfermería de Madrid; Rafael Ortega Gómez, vocal de Médicos de Atención Primaria del Ilustre Colegio Oficial de Médicos de Madrid; Óscar López, vicepresidente 1º del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid; y Timanfaya Hernández, vicedecana del Colegio Oficial de la Psicología de Madrid.
Las agresiones verbales, mayores que las físicas
Según ha explicado Marisol Ucha, «las agresiones verbales y físicas hacia los profesionales sanitarios han aumentado un 58% en los últimos cuatro años. Por este motivo, consideramos que se trata de una cuestión de especial relevancia e interés cultural tanto para los colegios profesionales que conforman la UICM, como para los sanitarios y la ciudadanía. En el caso de la Odontología, las agresiones se sitúan en un 58%, siendo verbales la mayoría de estas».
En este sentido, ha detallado Marisol Ucha, «para contribuir a la visibilización de dicha problemática y a la sensibilización social frente a la misma, hemos puesto en marcha, a través de las redes sociales, una campaña de sensibilización para la sociedad madrileña, para hacerles reflexionar sobre la necesidad de cuidar y respetar a los profesionales que dedican su día a día a cuidarles».
Por su parte, Rafael Ortega ha explicado que, en el caso de los médicos, «de los 51.197 colegiados, 70 denunciaron agresiones en el año 2023 y muchas de ellas no van a más porque se manejan directamente». Además, ha destacado que «el ámbito principal de las agresiones es la Atención Primaria. En Madrid tenemos un promedio de 1,37 médicos agredidos por mil en el año 2023, siendo la media nacional de 2,52. Además, las agresiones se producen más en mujeres. En cuanto a las causas, la mayoría tienen que ver con discrepancias en la asistencia clínica, con el criterio o enfoque; con el tratamiento; y, en muchos casos, con los problemas de salud mental».
Una afirmación a la que se suma Timanfaya Hernández, quien ha añadido: «Casi todas las agresiones vienen dadas, de alguna forma, por los tiempos de espera o los tipos de asistencia. Asimismo, todo lo que tiene que ver con situaciones en las que existen patologías mentales, supone un mayor riesgo de vulnerabilidad a la hora de ser víctima de una agresión. No obstante, creo que debemos focalizar no solamente en lo que es la patología mental, sino en lo que conocemos más comúnmente como los desajustes emocionales que se producen en distintas situaciones que pudieran ser estresantes».
La importancia de denunciar
En Enfermería, Mar Rocha ha comentado que «se trata de una situación bastante grave. No solo en lo numérico, sino por las consecuencias que tienen las lesiones. Las agresiones a las enfermeras, en número, parecen no ser una cifra muy escandalosa, pero sí tienen esa consecuencia no solo para la propia profesional que está ejerciendo su puesto de trabajo, sino para su entorno sanitario. Si a mí me pegan como enfermera, mi compañera, desde luego, no va a ir a trabajar con la misma alegría y va a abrir la puerta al siguiente paciente con la misma sensación de seguridad».
Así, ha especificado, que «ocho de cada diez enfermeras a lo largo de su vida laboral han sido o van a ser agredidas, y solo el 11% lo denuncian. De hecho, los datos del Observatorio de Agresiones del Consejo General de Enfermería, de 2021 al 2022, creció en un 58,38% de las denuncias recibidas».
Debido a esta problemática, la portavoz y tesorera del Ilustre Colegio Oficial de Enfermería de Madrid ha explicado que «se debe informar de lo que está ocurriendo a profesionales y a usuarios. Y hay que sensibilizarlos a todos: a los profesionales, para que denuncien; y a los ciudadanos, para que tomen conciencia». La portavoz del Colegio ha reclamado, asimismo, mayor respeto y confianza para que las enfermeras puedan continuar trabajando para la ciudadanía, así como a las Administraciones, mayores recursos para los profesionales del ámbito.
Por último, en el ámbito de la Farmacia, Óscar López ha manifestado que «el año pasado se registraron unos 74 sucesos. La mayoría de las agresiones que se producen son verbales, como consecuencia de la negativa de dispensar un medicamento cuando este no está recetado. Esto supone una lucha, además, de explicarle a esa persona que está demandando un medicamento que puede suponer un problema para su salud y que nosotros, lo que simplemente queremos, es que haya habido una prescripción facultativa».
Para concluir, los representantes de los distintos Colegios sanitarios han puesto de manifiesto la importación de trasladar un mensaje de «tolerancia cero» frente a las agresiones, destacando que el problema que significan las agresiones a sanitarios, afecta de manera sustancial al profesional, por ende a la actividad sanitaria, repercutiendo ello en la ciudadanía y, por tanto, a la propia sanidad, que es uno de los pilares básicos de nuestra sociedad del bienestar, por lo que resulta primordial la sensibilización social de cara a la prevención de las mismas.
