Del 12 al 14 de octubre, Valencia acogerá la 52 edición del Congreso SEPES, un evento, en palabras de su presidente, el Dr. Vicente Farga, «para conocer las diferentes posibilidades de trabajo con distintas herramientas digitales», de la mano de un «gran plantel de profesionales espléndidos de Norteamérica, Japón, Europa y de los mejores que hay en España». Una cita, en definitiva, para aprender y estar al día en el desarrollo de la profesión.
Bajo el lema «Ya somos digitales, y ahora, ¿qué?», el Congreso SEPES Valencia 2023 pondrá especial atención a los cambios que la tecnología ha provocado en la profesión, intentando responder a cuestiones como: ¿abandonamos lo analógico?, ¿conseguimos lo suficiente digitalmente? o ¿sirve todo lo que se va desarrollando? En este sentido, ¿cómo se ayudará a los congresistas a solucionar estas dudas que les asaltan? ¿Hasta qué grado los profesionales están «perdidos o desorientados» ante esta revolución digital?
—En los últimos 4 o 5 años se ha introducido de manera continuada la tecnología digital en nuestras clínicas y parece que es obligatorio el uso de un flujo exclusivamente digital que permita realizar todos y cada uno de los pasos de nuestro trabajo por esa vía.
Tengo escáner digital desde 1998 y desde entonces hasta ahora han pasado por mis manos varios de ellos, de varias marcas y en sucesivas actualizaciones, intentando buscar las mejores opciones para realizar nuestro trabajo y creo que nada de todo esto invalida muchas de las fases analógicas del mismo, puesto que algunas propuestas de la industria, aún no están suficientemente desarrolladas en algunos supuestos y en otros son absolutamente prescindibles.
Tenemos que encontrar el equilibrio en el uso de las herramientas digitales y las analógicas teniendo en cuenta que no son más que herramientas, que nos deben ayudar a conseguir nuestros objetivos profesionales.
Por otra parte, es imposible seguir en estos momentos un nivel de inversión tal y como demandan las nuevas propuestas y posibilidades para estar totalmente actualizado en todo momento.
Pretendemos en este congreso que los congresistas puedan conocer diferentes posibilidades de trabajo con diferentes herramientas digitales y con distintas posibilidades de flujo digital para que ellos mismos puedan tomar la decisión más adecuada a sus posibilidades de inversión y necesidades de tratamiento para con sus pacientes.
El problema, como vemos, es que ahora mismo es más fácil desorientarse y cada vez será más complicado saber elegir qué es lo que nos conviene. Es importante centrarse en qué tipo de soluciones queremos desarrollar cada uno de nosotros y a qué nos queremos dedicar y, dentro de la misma clínica, tener varios profesionales que desarrollen, cada uno, un tipo diferente de soluciones para los pacientes.
—El enfoque del programa será multidisciplinar, ¿qué temas de un modo más concreto se abordarán y quiénes serán los encargados de compartir sus conocimientos y experiencia con los asistentes?
—Tenemos la fortuna de pertenecer a la sociedad científica más avanzada tecnológicamente de España, puesto que todas las herramientas digitales están básicamente dirigidas a realizar, de una u otra manera, productos protésicos, ya sean restauraciones, guías quirúrgicas implantológicas, guías para endodoncia, férulas o placas de descarga, alineadores ortodóncicos, dispositivos de avance mandibular (DAM), etc.
Evidentemente, dentro del congreso se van a tratar muchos y diferentes temas relacionados con la oclusión y la función dental; la apnea del sueño; los tallados dentales y las restauraciones; los distintos tipos de prótesis, sobre implantes y sobre dientes; la cirugía guiada de los implantes y los problemas de éstos a lo largo del tiempo; las diferentes técnicas quirúrgicas; la gestión de la clínica; y novedades digitales como la superposición de las distintas capas (dientes, mandíbula, piel y cara) para el mejor estudio de la armonía dento-facial. Para ello, contamos con un gran plantel de profesionales espléndidos de Norteamérica, Japón, Europa y de los mejores que hay en España.
—También habrá talleres a cargo de reconocidos expertos. ¿Qué aprenderán los congresistas y qué podrán poner en práctica en sus consultas?
—Espero que, al día siguiente de finalizar, nuestros colegas asistentes ya puedan poner en marcha gran cantidad de lo aprendido durante el congreso. Los talleres son muy importantes porque no solo ves una ponencia, sino que ves al detalle cómo poder realizar todos los pasos de un proceso.
—Además de la zona de exposición comercial, como novedad en esta edición, los asistentes podrán disfrutar de un encuentro «after work» o un «lunch simposio» donde se podrá acceder a una presentación de productos de una forma dinámica. ¿Por qué han apostado por esta iniciativa? ¿Qué podrá ofrecer a los asistentes?
—Me pareció una muy buena idea que la industria se pudiera relacionar mucho más cercanamente con sus clientes invitados y de una manera más dinámica e interaccionando mejor con todos ellos de una forma relajada y tranquila al acabar las sesiones del día, con alguna bebida en la mano y manteniendo una conversación mucho más fluida y centrada con los intereses de los profesionales.
Al mismo tiempo, pensamos que el mismo concepto era aplicable en el tiempo de la comida, con lo que aprovechamos más horas de trabajo intracongreso para todas las empresas, marcas y laboratorios en su relación con los dentistas.
—Por último, ¿qué les diría a los profesionales del sector -clínicos y técnicos- para que no se pierdan este 52 Congreso de SEPES?
—Es el número 52 de SEPES, una Sociedad que tiene cincuenta y cuatro años de historia. Nos gusta pensar que las nuevas generaciones y también los compañeros con muchos años de experiencia desean aprender y estar al día en el desarrollo de su profesión.
Sabemos que hoy día hay mucha oferta en cuanto a cursos y formación y que los calendarios sufren por la falta de huecos, pero hace más de treinta años que pertenezco a esta Sociedad y nunca me he arrepentido de ello. A todos los compañeros les diría que encuentren el tiempo para acudir a SEPES Valencia 23. No se arrepentirán.