Es un error pensar que los recién nacidos llegan al mundo sin dientes, ya que las coronas dentales, compuestas por 20 dientes primarios, están formadas por completo dentro de las encías.
Sin embargo, también es posible que un bebé nazca con dientes, aunque la probabilidad de que esto ocurra es de 1 cada 2000 nacimientos. Los dientes de leche (también conocidos como dientes primarios) empezarán a erupcionar cuando el niño llegue a la edad de 7 meses y concluirá a los 2 años y medio, aproximadamente.
La mandíbula de los niños se irá desarrollando para crear espacio para la erupción permanente. Esto no ocurrirá hasta los 6 años, momento en el que los dientes de leche se empezarán a caer. ¿Cómo podemos saber si los síntomas que tienen los niños corresponden a los de una erupción dentaria o si se trata de otra enfermedad?
¿Qué entendemos por erupción dentaria en niños?
La erupción dentaria en niños es un proceso en el que aparecen los dientes primarios o dientes de leche. Estos irán emergiendo a través de las encías. Debido a ello, puede provocar una serie de síntomas que suelen ser incómodos. Sin embargo, hay que tener en cuenta que se trata de síntomas temporales y que existen algunas medidas sencillas con las que pueden experimentar bastante alivio.
Estos síntomas pueden ser muy variables, además de cambiar dependiendo de cada niño. También tienen mucho que ver con el número de dientes que están erupcionando a la vez o con la edad del niño, entre otros factores. Los síntomas más comunes son:
Dolor en las encías
La zona de la encía donde el diente que va a emerger suele encontrarse dolorida e inflamada, algo que puede provocar que el niño se encuentre incómodo. Para aliviar este dolor y presión, es común que puedan morder objetos o frotarse las encías con los medios adecuados.
Fiebre leve
Otro de los síntomas más comunes de la erupción dentaria en niños es la aparición de fiebre leve. En este caso, la fiebre aparece debido a la inflamación que se experimenta en la encía y, por lo general, no suele ser un motivo de preocupación.
En casos extremos podrían llegar a producirse convulsiones febriles en niños, que se producen debido a que la temperatura del cuerpo aumenta y el cerebro da la respuesta de que el cuerpo del niño empiece a sacudirse. Esto podría ocurrir desde que los niños tienen 6 meses hasta los 5 años de vida y se calcula que afectan alrededor de un 5% de los niños españoles.
Irritabilidad
Debido al dolor y a la inflamación que experimentan en la zona de las encías, los bebés y los niños pequeños podrían encontrarse irritados. Como consecuencia de ello, estarán más inquietos, impacientes y llorarán más de lo normal.
Salivación excesiva
Otro síntoma que se puede apreciar con bastante claridad y puede demostrar que se trata de un proceso de erupción dentaria es la salivación excesiva. Durante el mismo, es normal que se incremente la producción de saliva, por lo que babearán más de lo habitual, especialmente los bebés.
Problemas para dormir
Todos los síntomas ya indicados provocarán que el bebé tenga problemas para conciliar el sueño. Esto está provocado, principalmente, por la incomodidad que sufren en las encías y en la boca en general.
Enrojecimiento en la zona de las encías
Un síntoma visual que podría indicar que el diente está a punto de emerger es la presencia de una zona enrojecida e hinchada en la encía. Esta inflamación está indicando que el diente hace presión desde abajo para poder liberarse.
Cambios en los hábitos alimenticios
El dolor y la incomodidad podrían provocar que los niños rechacen ciertos alimentos mientras dure este proceso.
Es importante recordar que no todos los niños experimentan estos síntomas durante la erupción dentaria, mientras que algunos tendrán más de uno.
¿Cómo aliviar los síntomas de la erupción dentaria en niños?
Para aliviar estos síntomas incómodos podemos probar con lo siguiente:
- Probar con algo frío: existen algunos productos de puericultura para bebé (juguetesde dentición) que se pueden introducir en el congelador para qué estén algo fríos y así los puedan morder y chupar para experimentar alivio.
- Médico: en el caso de que las molestias del niño sean más intensas, es recomendable llevarlo al médico para que evalúe la situación. Dependiendo del caso, puede que le recomiende un analgésico suave.
Hay que tener en cuenta que se trata de un proceso normal en el desarrollo de los dientes, por lo que todos los bebés tendrán que pasar por ahí.