La figura del líder es esencial para el éxito de una clínica, ya que es la persona encargada de guiar y organizar al equipo dental para alcanzar los objetivos. Y estamos hablando de liderar, no de ordenar o mandar: no solo se trata de tener autoridad, sino la capacidad de motivar y dirigir al equipo hacia una misma meta.
Para ello es necesario contar con un líder que tenga las habilidades y herramientas necesarias para ser un buen líder de negocios, que conozca las tareas y funciones de la gestión de la clínica dental y que pueda ser una referencia para el personal de la clínica.
Entonces, ¿qué características debe tener un líder odontológico?
Debe dejar de lado el anticuado concepto de jefe
Saber liderar un equipo sin usar como recurso la autoridad implica tener seguridad, ser una persona empática con el equipo y saber transmitir la motivación y pasión por el trabajo. Y para lograr esto, nada mejor que ser un ejemplo a seguir, trabajando tan duro como se espera del equipo de profesionales a tu cargo para así lograr los objetivos de la clínica.
De hecho, esto es algo muy a tener en cuenta por la persona que ejerce (o quiere ejercer) el liderazgo, pues es una manera de ganarse el respeto del personal dental.
También hay que saber realizar una buena gestión que como líder, te permita estar disponible para el equipo, planificar eventos para fortalecer la unión de las personas que trabajan en la clínica, dedicar tiempo a cada una de ellas, etc. Porque liderar también es acompañar.
Ser capaz de determinar unos objetivos en la clínica
Para ser un líder efectivo, es crucial establecer una visión clara y objetivos a largo plazo para la clínica dental. Si no se hace este ejercicio, es fácil caer en la simple administración de tareas diarias sin un impulso para mejorar y crecer.
- Las metas de la clínica dental se deben establecer no solo en términos de rentabilidad, sino también identificando los sub-objetivos necesarios para alcanzarlas.
- Además, es importante tener una visión global para poder hacer un análisis objetivo y saber cuáles son los puntos fuertes y débiles de la clínica.
- Con esta visión global, se puede llevar a cabo una buena planificación estratégica y gestión de los recursos.
- Y sobre todo, no hay que olvidar involucrar a todo el equipo y hacer que se sientan motivados.
Cuando sabemos hacia dónde vamos y que merece la pena, es más fácil que los problemas e inconvenientes del día a día se pongan en perspectiva. Esto hará que el equipo esté motivado y los vea como obstáculos a superar, no como motivo de abandono y frustración.
La importancia del buen líder en la clínica dental
Valorar el trabajo bien hecho
La falta de reconocimiento es una de las principales preocupaciones en el lugar de trabajo. Un buen líder sabe reconocer y premiar el buen trabajo de su equipo. Además, al hacerlo saber a los demás, estarás reforzando su motivación y compromiso para seguir mejorando.
Apostar por el trabajo en equipo
Un liderazgo efectivo necesita un equipo sólido a su lado, por lo que este punto es una reconfirmación de lo dicho en el anterior: la motivación y el trabajo en equipo son clave para ser un líder efectivo en una clínica dental.
Es fundamental que como líder sepas inspirar y motivar al equipo, haciéndolos sentir parte de la clínica – porque lo son – y no simplemente trabajadores a sueldo.
Para lograrlo, es importante compartir con ellos la visión de la clínica, ejercer una influencia positiva y apoyarles en su trabajo del día a día gracias a una buena gestión y optimización de los recursos que hagan su trabajo como equipo fácil.
Si bien en una clínica dental cada profesional tiene sus pacientes en función de su especialidad o de sus horarios, habrá veces que un paciente tenga que pasar a otro odontólogo porque sea necesario un tratamiento específico, porque por motivos de trabajo tenga que cambiar de día o turno de visitas, etc. Haz que este proceso sea fácil, desde la persona en recepción que debe gestionar los cambios del paciente hasta el profesional dental que necesita toda la información accesible y al día.
Y por la empatía
Nunca hay que perder de vista que el equipo de tu clínica dental está compuesto por personas, con sus propias opiniones y aspiraciones. En la medida que como líder puedas apoyarles y ayudarles a crecer y desarrollarse.
El resultado final será una victoria para ambas partes: avanzar en su camino profesional o dentro de la clínica les motivará a seguir trabajando y mejorando, lo que a su vez hará que la clínica dental alcance sus objetivos.
Debe saber delegar
No es recomendable involucrarse en exceso en el trabajo diario, es importante saber encontrar un equilibrio y permitir que tu equipo asuma responsabilidades y tome decisiones. Además, delegar no sólo fortalece la confianza y compromiso de los miembros del equipo, sino que también permite a la figura del líder enfocarse en las tareas que realmente son más prioritarias y solo él o ella puede llevar a cabo, para el éxito de la clínica dental.
Lo mejor que un líder puede hacer es proporcionar orientación y apoyo en los momentos necesarios, pero el resto del tiempo, dejar que el personal de la clínica dental sea autónomo. Por este motivo es esencial rodearse de profesionales con afán de superarse y pasión por su trabajo. Tu prioridad como líder es fortalecer sus habilidades.
Trabajar las dotes de comunicación
Para ser un buen líder en general, y por supuesto, un líder en la gestión de la clínica dental, es fundamental tener habilidades de comunicación efectivas, ser capaz de transmitir información y directrices de manera clara y concisa.
Sin olvidar que parte de la comunicación efectiva también se trata de saber escuchar y comprender a los demás, y brindar ayuda en base a esas conversaciones.
Esta comunicación bidireccional es crucial para el progreso y el éxito de la clínica.
Un líder se adapta a los nuevos tiempos
Para ser un buen líder, también es necesario estar abierto a aprender y mejorar constantemente, especialmente en el campo de la odontología. Es importante estar al tanto de las nuevas tecnologías y actualizaciones para poder mejorar la clínica dental en su conjunto y que sea competitiva. De lo contrario, puede que no se consiga cumplir los objetivos.
