En estos momentos en los que la mascarilla ha dejado de ser obligatoria, un estudio liderado por la Fundación Lucha contra las Infecciones junto al Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa y la Gerencia Territorial Metropolitana Nord del Instituto Catalán de la Salud (ICS), con la colaboración de DENTAID Research Center, ha demostrado la actividad viricida en saliva de los enjuagues bucales con Cloruro de Cetilpiridinio (CPC) contra el SARS-CoV-2.
La investigación, publicada en el Journal of Dental Research, se ha realizado a partir de muestras de saliva de personas infectadas que fueron atendidas en centros de atención primaria, y confirma in vivo la capacidad del CPC para romper la membrana del virus. Algo que ya se había observado previamente en estudios in vitro, realizados por personal investigador de IrsiCaixa.
Es decir, gracias a este estudio se ha podido demostrar que el SARS-CoV-2 pierde su capacidad infecciosa, ya que al tener la membrana destruida no puede penetrar en las células. Por lo tanto, el uso de los enjuagues bucales con CPC al 0,07% podría ser una herramienta de prevención eficaz que añadir a otras estrategias preventivas, para así evitar la propagación de las diversas variantes del coronavirus.
“Que un colutorio con CPC sea capaz de reducir la capacidad de infección del SARS-CoV-2 en saliva es una muy buena noticia, ya que el uso de este enjuague bucal podría reducir la transmisión del virus entre personas”, celebra la Dra. Andrea Alemany, investigadora de la Fundación Lucha contra las Infecciones y primera autora del estudio.
Por su parte, la Dra. Núria Prat, directora de Atención Primaria de la Metropolitana Norte del ICS, destaca el papel de la atención primaria en investigaciones de este tipo: «el hecho de tener acceso directo a un gran volumen de población, así como el trabajo conjunto de profesionales de Medicina de Familia, Enfermería y Odontología de los centros de atención primaria ha permitido realizar el trabajo de campo necesario para llevar a cabo el estudio”.
Un reciente informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) pone el énfasis en el importante papel que juega la prevención y el cuidado de la cavidad bucal en una buena salud general, y la estrecha relación existente con las enfermedades cardiovasculares y la diabetes, entre otras. “Los resultados de este estudio nos permiten confirmar que la clara relación entre la cavidad bucal y la COVID-19 ya demostrada anteriormente, puede llevar también consigo una posible vía para evitar su diseminación”, concluye el Dr. Joan Gispert, director de I+D+i de DENTAID.
Metodología del estudio
Este estudio es el resultado de un ensayo clínico aleatorizado, doble ciego, paralelo y controlado con placebo, que se llevó a cabo en 19 centros de Atención Primaria de la Metropolitana Nord de Catalunya durante los meses de febrero a junio de 2021.
En él participaron 118 personas adultas con infección por SARS-CoV-2 asintomática o con síntomas leves de COVID-19, en quienes se analizó, mediante test ELISA, la cantidad de virus con capacidad infecciosa.
“Con este test, a diferencia de la PCR, podemos ver la capacidad del CPC para romper la membrana del virus, puesto que detecta las proteínas de la nucleocápside del SARS-CoV-2, que se encuentran en el interior del virus”, explica la Dra. Nuria Izquierdo-Useros, investigadora principal de IrsiCaixa y co-autora del artículo.
Los equipos de odontología de los centros colaboradores de atención primaria de la Metropolitana Nord (ICS) fueron los encargados de realizar los procedimientos del estudio, coordinados por el personal investigador de la Fundación Lucha contra las Infecciones.
Por otra parte, todas las muestras fueron analizadas en el departamento de Microbiología del Laboratorio Clínico de la Metropolitana Nord y en IrsiCaixa.