Los científicos de Scripps Research y el Instituto Nacional de Investigación Dental y Craneofacial (EE.UU) han descubierto un tipo especial de célula que reside en las glándulas salivales y probablemente sea crucial para la salud bucal. Así lo publicaron en Cell Reports de abril de 2022.
Las glándulas salivales son muy importantes para la salud bucal porque la saliva que producen no solo facilita la deglución y digestión de alimentos, también contiene anticuerpos y otros elementos inmunológicos para proteger contra infecciones.
El nuevo tipo de célula descubierto en la glándula salival ha sido llamado «ionocito«,un tipo de célula evolutivamente antiguo, que en los tejidos locales mantiene el equilibrio entre los niveles de iones y las moléculas relacionadas y que en las glándulas salivales parece tener dos funciones:
- Mantener en la saliva concentraciones saludables de moléculas cargadas (iones) de potasio, calcio, cloro y otros electrolitos.
- Y, probablemente, ayudar en la reparación de las glándulas salivales en caso de sufrir una lesión, ya que los “ionocitos” secretan un factor de crecimiento clave (el FGF10).
Trabajando con células de ratones, el objetivo de los científicos era descubrir qué tipo de célula produce FGF10 en las glándulas salivales adultas. Y lo que pudieron ver fue que mientras las células mesenquimales llamadas fibroblastos producen FGF10 en ratones muy jóvenes, a partir de la segunda semana de vida, es un tipo de célula muy diferente, en concreto un tipo de célula epitelial que recubre los conductos salivales, la que se hace cargo de la producción.
La investigación demostró, gracias a marcadores moleculares de esta célula epitelial -productora de FGF10- que, efectivamente, era un ionocito.
Y si bien sus análisis iniciales se centraban en células de ratón, los investigadores encontraron evidencia de ionocitos de glándulas salivales muy similares en un atlas de proteínas de tejidos humanos, lo que abre posibilidades de tratamientos que hasta ahora no han sido posibles.
Así lo explica Helen Makarenkova, PhD, profesora asociada en el Departamento de Medicina Molecular de Scripps Research y coautora principal de la investigación: «Estas son células únicas y, gracias a su estudio, esperamos poder desarrollar mejores tratamientos para las muchas afecciones médicas que afectan a las glándulas salivales”. Como, por ejemplo, la radioterapia relacionada con el cáncer en la región de la cabeza y el cuello o los trastornos autoinmunes, que pueden provocar la falta de saliva o xerostomía.
Fuente: Scripps Research.