A lo largo de tu práctica clínica como ortodoncista, y muy especialmente, en las primeras etapas de tu carrera profesional, te enfrentarás ante situaciones que te generen incertidumbre, especialmente, en el ámbito legal. Por ejemplo, cuáles son los pasos que debes dar si, por ejemplo, un paciente decide concluir su tratamiento de ortodoncia antes de la finalización del mismo. Para aclarar dudas, hablamos con el Dr. Rafael Gallardo Galdón, miembro de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Ortodoncia (SEdO), y reconocido profesional de la Ortodoncia a nivel nacional.
— Si un paciente solicita la retirada del tratamiento de ortodoncia, ¿cuáles son los pasos que debe seguir el profesional ante esta situación?
Este tipo de circunstancias se dan con cierta frecuencia en las clínicas de ortodoncia. Algunas veces se deben a razones de movilidad (por ejemplo, pacientes que se desplazan de su lugar de residencia) y, otras, por la decisión personal del paciente de cambiar de profesional.
En ese caso, el profesional que está realizando el tratamiento de ortodoncia debe estar en completa disposición de facilitar, al compañero que inicie o siga el tratamiento, toda la información clínica necesaria para el correcto seguimiento del caso. Aunque, evidentemente, puede discrepar en algún matiz en la línea de tratamiento o coincidir plenamente con el planteamiento inicial.
El consentimiento informado no solo es conveniente, sino que es necesario. Y su firma es obligatoria por ley para todos los profesionales sanitarios que van a realizar un acto médico o quirúrgico
— ¿Qué cuestiones legales debe tener en cuenta el profesional cuando un paciente hace este tipo de solicitud?
Es necesario distinguir entre el primer profesional, a quien el paciente solicita la finalización de su tratamiento, y el segundo, el ortodoncista.
En cuanto al primero, cualquier relación paciente-profesional (ya sea en el ámbito odontológico, ortodóncico o de la medicina en general) viene establecido por una relación contractual que se enmarca en los contratos por prestación de servicios, no en los contratos por finalización de obra o resultado.
De esta forma, en cuanto el paciente transmite su deseo expreso o voluntad de abandonar el tratamiento, la relación profesional queda extinguida. Es conveniente, por tanto, que se deje plasmado por escrito, con fecha y firma de ambas partes, el expreso deseo del paciente de solicitar el alta voluntaria de ese tratamiento de ortodoncia.
Por último, el alta voluntaria en el tratamiento debe ir acompañada, si así lo requiere el caso, de los consejos y advertencias sobre los riesgos a los que el paciente puede verse sometido en el caso de no continuar el tratamiento de ortodoncia y de abandonarlo en ese preciso momento, no habiendo plazos legalmente estipulados para llevar a cabo la petición del paciente.
Respecto al segundo profesional (si el paciente ha decidido recurrir a otro ortodoncista), debe recabar la información del tratamiento que le sea de utilidad por parte del profesional inicial. Es muy importante que tome registros, tanto clínicos como radiológicos, del estado del caso a partir del momento en el que él se hace cargo ya que, desde entonces, serán de su responsabilidad los beneficios o perjuicios que se generen en el estado de salud bucodental del paciente en lo referente al tratamiento de ortodoncia.
Por tanto, es absolutamente necesario tomar registros clínicos y radiológicos que permitan monitorizar y objetivar cuál es el estado de salud del paciente una vez que el segundo profesional se hace cargo de él.
— ¿Es necesaria la firma del consentimiento informado?
El consentimiento informado no solo es conveniente, sino que es necesario. Y su firma es obligatoria por ley para todos los profesionales sanitarios que van a realizar un acto médico o quirúrgico.
En dicho consentimiento se recogerá la información sobre el procedimiento, el proceso de diagnóstico, el proceso terapéutico al que será sometido el paciente, y cuáles son los beneficios y posibles riesgos a los que se enfrenta.
— ¿Qué consecuencias tiene para un paciente el hecho de retirar los brackets antes de tiempo?
El hecho de retirar los brackets o la aparatología ortodóncica puede reportar el no haber alcanzado los objetivos previstos al inicio del tratamiento. Pero no solo eso, sino que, al no conseguir un buen resultado o equilibrio oclusal, puede que la estabilidad de los resultados se vea cuestionada y que sea mucho más fácil que se produzca una recaída.
De ahí la importancia, en el caso de cesión del tratamiento de manera unilateral por hastío del paciente (y no por cambio de profesional), de plasmar por escrito las posibles consecuencias de dicho abandono.