En la actualidad, la caries dental es un problema común. Según un informe de la OMS, 2.300 millones de personas en todo el mundo padecen caries en dientes permanentes. Pero resulta que no somos los únicos: dos estudios de la Universidad de Otago muestran que la caries también es un problema para otros primates, así como para nuestros parientes y ancestros fósiles.
El Dr. Towle, anteriormente becario postdoctoral en la Facultad de Odontología de Otago, explica que, aunque las caries normalmente se consideran como una enfermedad moderna y exclusiva de los humanos -causada por nuestra dieta rica en alimentos azucarados procesados-, hay una creciente evidencia de que también es recurrente, al menos hasta cierto punto, en otros grupos de animales.
“Nuestra nueva investigación muestra que la caries también se da, incluso si es con una baja frecuencia, en primates salvajes. Aunque esto es muy variable entre los grupos y los dientes afectados también varían”, aclara.
En la investigación llevada a cabo en la Universidad de Otago, publicada en American Journal of Primatology y en South African Journal of Science, el Dr. Towle y su equipo analizaron más de 8.000 dientes humanos fósiles y de primates existentes y evaluaron la variación en los patrones de caries en relación con la dieta y el comportamiento.
“Esta investigación nos ayuda a comprender los cambios en la dieta y el comportamiento en la evolución humana, además de proporcionar información sobre comportamientos particulares en nuestros parientes primates vivos«.
En los resultados pudieron ver que el 3,3% de los dientes en primates vivos tenían caries y que esta incidencia es similar a la de la caries en humanos fósiles. Sin embargo, en las muestras humanas fósiles estudiadas, todas las caries estaban en los dientes posteriores, mientras que en la gran mayoría de los primates vivos, las caries estaban en los dientes frontales.
“Los fascinantes comportamientos alimentarios de animales como los chimpancés, que utilizan los dientes frontales para ayudarse a succionar el líquido azucarado de los higos, contribuyen a crear patrones de caries que rara vez se ven en los seres humanos”.
Otro aspecto interesante de esta investigación fue que las hembras de chimpancés presentaban más caries que los machos (9,3% y 1,8%, respectivamente), una diferencia entre sexos similar a la que a menudo es evidente en seres humanos.
El trabajo también reveló cuán similares son los patrones de descomposición entre los primates en cautiverio y los humanos, destacando que los primates a menudo no llevan a cabo comportamientos naturales específicos cuando viven en cautiverio.
“La caries ocurrió a lo largo de la evolución humana y no parece que cambiara mucho durante millones de años, en los que estaban afectados menos del 5% de los dientes. Fue con el inicio de la agricultura que este número aumentó rápidamente hasta que más del 20% de los dientes presentaban caries en algunas de las muestras estudiadas”.
El estudio es parte de un trabajo más amplio que el Dr. Towle y su equipo han llevado a cabo en los dientes de primates y ancestros humanos, bajo la tutela de la Dra. Carolina Loch, de la Facultad de Odontología de Otago y que arroja interesantes resultados.
“Espero que esta parte de la investigación ayude al público a comprender cómo los primates vivos tienen comportamientos de alimentación complejos y variados, y aun así comparten esta enfermedad común con nosotros”. Razón por la cual «la caries dental tiene el potencial de ofrecer una visión ecológica única de los grupos de primates extintos«, dice el Dr. Towle.