Apostar por la Endodoncia, en un momento en el que esta disciplina odontológica parece vivir un auge imparable, y fomentar el tratamiento conservador bajo el lema «Salvar dientes: necesidad de una Endodoncia más innovadora, avanzada y segura», fue una de las principales conclusiones de un reciente encuentro de trabajo organizado por Gaceta Dental y patrocinado por Zarc4Endo. Expertos endodoncistas como los doctores Rafael Cisneros, José Aranguren y Marcela Salamanca, junto con Manuel Gómara, CEO de IPG Dental, y Agustín Sánchez, director general de Zarc4Endo, debatieron, entre otros asuntos, sobre el panorama formativo de dicha disciplina, el nivel de la Endodoncia en España o el rumbo de las líneas de investigación más pujantes de la materia.
Si en algo coincidieron los profesionales que acudieron a este encuentro de trabajo, por encima de todo, es en denominar a la Endodoncia como una disciplina de la Odontología apasionante y en la importancia de salvar dientes.
Para hablar de cómo conseguirlo, tanto desde el punto de vista de la práctica clínica como de la formación y de la empresa, así como de la progresión que ha experimentado la Endodoncia, Gaceta Dental reunió en Madrid, con el patrocinio de Zarc4Endo, a destacados endodoncistas entre los que se encontraban los doctores Rafael Cisneros, José Aranguren y Marcela Salamanca, que estuvieron acompañados por Agustín Sánchez, director general de Zarc4Endo y Manuel Gómara, CEO de IPG Dental.
«FALTAN MÁS DOCENTES ENDODONCISTAS EN LAS UNIVERSIDADES», DR. JOSÉ ARANGUREN
Cambio de paradigma
La Endodoncia es, en opinión de todos ellos, una de las disciplinas de la Odontología que más ha avanzado a lo largo de la historia. Si echamos la vista atrás, hace unos años se vivió el «boom» de la Implantología y de una Odontología, por tanto, más invasiva en la que se realizaba un mayor número de intervenciones quirúrgicas.
En la actualidad, y gracias en buena medida a la labor de sociedades científicas como la Asociación Española de Endodoncia (AEDE) y de los endodoncistas exclusivos, fundamentalmente, va calando con más fuerza dentro de la profesión la importancia de mantener los dientes naturales. Pero, ¿en qué momento se encuentra la Endodoncia?
El Dr. José Aranguren lo tiene claro al afirmar que «la Endodoncia ha cambiado mucho. Hace un par de décadas, los implantes estaban en auge y se pensaba que eran la solución a todo. Ahora estamos volviendo a una fase, más que de regresión, de progresión, de volver otra vez a la Endodoncia y a mantener dientes, ya que el implante es una buena solución cuando no hay otra alternativa, pero que no hay nada como nuestros propios dientes. La Endodoncia se ha puesto de moda. Estamos viviendo un auge muy positivo, se realizan muchas endodoncias porque la gente valora sus propios dientes. Además, ahora la tecnología nos permite hacer una Endodoncia mucho más vanguardista, menos invasiva, más dirigida a cuidar el diente y que dure el mayor tiempo posible. Y es que un buen profesional se apoya en tres grandes pilares básicos: la experiencia, la formación y la tecnología».
En este sentido, y refiriéndose al tercer pilar, el Dr. Rafael Cisneros asegura que, efectivamente, «el implante es la mejor solución cuando falta el diente, pero, en este momento, con la tecnología existente, con lo que se conoce, lo que se enseña y lo que se aprende, uno tiene posibilidades de salvar el diente en muchas circunstancias. Si podemos salvar el diente, que se comporta de una forma que no tiene competencia en la prótesis, tenemos que intentar conservarlo. La Endodoncia está viviendo un renacer que no recordaba haber visto en todos los años que llevo dedicándome a ella».
De la intervención a la conservación
De la misma opinión se muestra la Dra. Marcela Salamanca, para quien «en la Endodoncia se ha producido un cambio bastante grande en los tres últimos años en lo que se refiere a la tecnología y los avances que hemos podido aprovechar gracias a ella: el CBCT, la imagen en tres dimensiones… Hoy en día ya contamos con todas las herramientas para poder intentar siempre dar otra oportunidad más al diente. Extraer el diente es el último recurso. El implante es una buena solución cuando se necesita realmente, pero siempre hay que intentar salvarlo porque el ligamento periodontal, que es el aliado fundamental del diente y del hueso, si se pierde, un implante nunca lo va a poder reemplazar. Se está viendo cómo los implantes han ido fracasando, en estos últimos años. Y es que, si los pacientes no mantienen una buena higiene o tienen malos hábitos, no va a durar toda la vida».
Sobre el paciente, el Dr. Aranguren añade que «el perfil ideal es el que quiere conservar el diente. El que está comprometido y entiende cómo es la Endodoncia, el que quiere invertir en ella. No existe una estadística al respecto, pero posiblemente la mayoría, o muchos de los dientes que se quitan en el día a día se podrían mantener. Es verdad que cuando un diente está partido o periodontalmente está muy mal no tiene solución, pero salvo en estos casos, los dientes pueden ser mantenidos con tratamientos de Endodoncia. La Endodoncia cuenta con un abanico de procedimientos impresionante. Desde la cirugía apical, el retratamiento, el tratamiento de conductos, reimplante intencional, autotrasplante, tratamiento del ápice inmaduro, tratamiento de la pulpa vital… La Endodoncia ha evolucionado tanto que tiene una batería de procedimientos que hace que tengamos mucha gama de posibilidades para salvar dientes. Y eso se consigue con los avances en el conocimiento y con la tecnología».
Para Agustín Sánchez, «el cambio de paradigma ha consistido en que probablemente en España nos hemos dado cuenta antes de los problemas que conlleva ese crecimiento desmesurado del uso del implante, con casos de periimplantitis al cabo de 10 o 12 años, que todavía no son bien manejables. Y, por otra parte, también influye que la población vive más tiempo. La esperanza de vida está en torno a los 85-90 años. Está cambiando la mentalidad. Somos más conscientes de la importancia de mantener lo natural. Y en el ámbito dental, la Endodoncia es una solución estupenda para conseguirlo».
«No es que estemos en contra del implante, ni mucho menos -aclara el Dr. Cisneros-. Éste ha ayudado mucho a conservar bocas, a que los pacientes estén más felices. De lo que estoy en contra es de colocar implante eliminando un diente cuando éste se podía mantener. Hay varios estudios, de más de un millón y medio de endodoncias realizadas, con un seguimiento de unos 5 a 9 años, que demuestran su efectividad. La Endodoncia es un tratamiento enormemente seguro que, en manos bien formadas, tiene un porcentaje de éxito increíble, del 97% según algunos estudios. Yo les decía a mis alumnos que si un dentista se durmiera en 1995 y se despertara en 2005 se quedaría impresionado de los cambios que se han producido en la Endodoncia. Ningún campo de la profesión ha cambiado tanto como éste. Desde el microscopio hasta la aplicación del ultrasonido, la aparición del MTA (agregado de trióxido mineral), la lima de níquel titanio… Tal cantidad de avances han convertido a la Endodoncia en una ciencia impresionante».
«LA ENDODONCIA QUIRÚRGICA ES UN ÁREA MUY IMPORTANTE A CONSIDERAR COMO LÍNEA DE INVESTIGACIÓN», DRA. MARCELA SALAMANCA
Luces y sobras en la formación
Entre los tres pilares citados anteriormente que han contribuido de forma considerable al auge de la Endodoncia se encuentra la formación. Y aquí son varios los interrogantes que se plantean. ¿Está bien representada la Endodoncia dentro de los programas de estudio universitario de Grado? ¿Cómo es la formación de postgrado?.
En opinión del Dr. Cisneros, «en este momento, los postgrados es España están muy bien representados. A partir del siglo XXI han aparecido muchos programas de Endodoncia, algunos de ellos incluso acreditados a nivel europeo. Respecto al Grado, el problema de la endodoncia es que hay que hacer muchas. Decía mi maestro Martínez Bernal que uno aprende a hacer la endodoncia y a manejarla cuando lleva quinientas. Lógicamente en un Grado uno no puede hacer esa cantidad, pero hay que dar una formación. No hay una cátedra de Endodoncia, no hay una asignatura de Endodoncia como debería de ser en una parcela tan importante de la Odontología. Y en cuanto a la formación continua, ahí hay de todo. Muchos son cursos cortos, una formación más liviana, más suave, y hay cursos buenos, regulares y cursos de los que no merece la pena ni hablar».
Muy contundente se muestra en este sentido el Dr. Aranguren al advertir de que, «tanto en España como a nivel mundial, en el pregrado la Odontología no está bien enseñada. España es el único país sin especialidades en Europa, aunque parece que ha habido algún avance en los últimos meses. Lo más importante de la especialidad es que el paciente sepa que existen los especialistas. Es una información vital para el ciudadano y para el especialista. La formación que se da en el Grado es muy básica y también depende mucho de las universidades. Hay algunas donde quien imparte la Endodoncia no es endodoncista, que me parece una auténtica aberración. Quien tiene que formar en Endodoncia ha de ser un endodoncista, una persona que se dedica en cuerpo y alma a esa parte de la Odontología, una de las más complicadas. Enseñar significa transmitir la pasión por la Endodoncia. Faltan más docentes endodoncistas en las universidades».
«LA ENDODONCIA ES UN TRATAMIENTO ENORMEMENTE SEGURO QUE, EN MANOS BIEN FORMADAS, TIENE UN PORCENTAJE DE ÉXITO INCREÍBLE», DR. RAFAEL CISNEROS
Desde la experiencia de haber iniciado su formación en Chile, la Dra. Salamanca asegura que «allí tuve un año solo exclusivo de Endodoncia durante mi formación de Grado. Sin embargo, la formación fue muy básica, me sirvió de base en el momento de hacer el Máster. Los cursos de formación son buenos para dar quizás un ‘empujoncito’ a la gente que quiere comprobar qué área de la Odontología es la que le gusta más, o bien para tratar de especializarse un poco más si acabaron el Máster. La Endodoncia es la medicina interna del diente, por lo que, en mi opinión, debería enseñarse desde el primer año».
En cuanto a la proyección de los endodoncistas españoles a nivel internacional, el Dr. Aranguren matiza que «tenemos un país con muy buenos profesionales en todos los ámbitos. Por supuesto, en Endodoncia, pero también en Periodoncia, en Implantología, en Estética… Tenemos la suerte de estar en un país que, sobre todo en los postgrados, forma muy bien a los profesionales. Podemos estar muy seguros de nuestra formación postgraduada, la graduada se puede mejorar en algunos aspectos y universidades».