Investigadores de la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), Estados Unidos, han probado en ratas una membrana capaz de crear este tejido, lo que sería eficaz para tratar la periodontitis y evitar así la pérdida de dientes y huesos.
Para uno de los métodos que se utilizan en la actualidad contra las infecciones de las encías, como la regeneración tisular guiada, es necesario el uso de una membrana que se coloca quirúrgicamente entre la encía dañada y el diente. De este modo, además de impedir la expansión de la infección, es útil para suministrar fármacos, como antibióticos. Sin embargo, estas membranas no consiguen regenerar directamente el tejido de las encías. Además, en las no biodegradables se necesitan múltiples cirugías para eliminarlas después de que se hayan liberado los medicamentos, lo que compromete el proceso de curación.
«Dadas las desventajas actuales de la regeneración tisular guiada, vimos la necesidad de desarrollar una nueva clase de membranas que tengan propiedades de regeneración tisular y ósea junto con un recubrimiento flexible que pueda adherirse a una variedad de superficies biológicas», dice el Dr. Alireza Moshaverinia. coautor principal del estudio y profesor asistente de prótesis en la Escuela de Odontología de UCLA. «También hemos descubierto una manera de prolongar la línea de tiempo de administración de medicamentos, que es clave para la curación efectiva de las heridas».
Estos investigadores se han centrado en una molécula sintética a gran escala comúnmente utilizada en aplicaciones biomédicas y que está aprobada por la Agencia Norteamericana del Medicamento (FDA, en sus siglas en inglés).
Debido a que la superficie de este polímero no es adecuada para la adhesión celular en el tratamiento periodontal, los investigadores introdujeron un recubrimiento de polidopamina, un polímero que tiene propiedades adhesivas, puede adherirse a superficies en condiciones húmedas y acelera la regeneración ósea al promover la mineralización de la hidroxiapatita, mineral que forma el esmalte y el hueso.
«Al crear un micro patrón en la superficie de la membrana, ahora podemos localizar la adhesión celular y manipular la estructura de la misma», explica otro de los coautores principales, Paul Weiss. Asimismo, añade que pudieron «imitar la compleja estructura del tejido periodontal y, cuando se colocó, nuestra membrana complementa la función biológica correcta en cada lado».
Después de identificar una combinación óptima para su nueva membrana, los investigadores utilizaron el electrospinning, un método que fusiona dos sustancias, para unir el polímero con el recubrimiento de polidopamina. Al mismo tiempo, para mejorar las características estructurales y superficiales de la nueva membrana, utilizaron plantillas de malla metálica, junto al electrospinning, con el fin de crear diferentes patrones, o micro patrones, similares a la superficie de una gasa.