Resultados a los 8 años de carga
Introducción
Las rehabilitaciones implantológicas en los sectores posteriores mandibulares siguen constituyendo un reto importante para cirujanos e implantólogos. La presencia del nervio dentario inferior y su distancia en el plano vertical a la zona crestal limitan, en muchas ocasiones, las posibilidades de rehabilitación de numerosos pacientes.
Los avances en el campo implantológico han permitido el desarrollo de técnicas alternativas que han venido a subsanar estas situaciones deficitarias, destacando los injertos óseos tipo «onlay vertical», la distracción ósea vertical, los implantes cortos y las técnicas de movilización del nervio dentario inferior (1, 2).
En relación a esta última, y a modo de memoria histórica, se debe recordar a Charles Alling (3) como el primero en publicar, en 1977, la técnica para la reposición o lateralización del nervio dentario inferior. Asimismo, pero diez años más tarde, fueron Jensen y Nock (4) quienes presentaron el primer artículo que implicaba esta técnica con la colocación de implantes osteointegrados.