Marcel Martín pone a disposición de los lectores de GACETA DENTAL su conocimiento y experiencia para resolver las dudas y problemas que se presentan en la práctica diaria. Pueden hacernos llegar sus consultas por e-mail a: redaccion@gacetadental.com, indicando «para el consultorio de fotografía digital». Las cuestiones serán atendidas lo antes posible, por orden de recepción.
Tengo una cámara Panasonic Lumix GH2 y me gustaría empezar a darle uso para fotografía dental. Sé que necesito un objetivo macro y un flash anular, pero no sé cuál será el más adecuado. ¿Es preferible que sea todo de Panasonic o puedo comprar el macro y el flash anular Olympus o de otra marca? ¿Qué me recomendaría?
Tiene una muy buena cámara, de las de última generación. De momento, Panasonic no tiene objetivos macro ni flashes anulares, lo que no es ningún problema, ya que puede adaptar todos los objetivos de Leica y de Olympus que son, además, los mejores para fotografía médica. Le recomiendo el de Olympus de 60 mm, que es el adecuado para el formato de sensor que lleva su cámara. El objetivo que fabrica Leica es de 45 mm, pero no es el adecuado porque debería hacer las fotografías demasiado cerca del paciente. En cuanto al flash, podría adaptar el original de Olympus o el de la marca Dörr, pensado para Olympus y Panasonic.
Tengo una Olympus SH-60. Me gusta utilizar las opciones de la cámara, pero a veces las fotografías no me salen muy nítidas. Lo mismo me ocurre si dejo puesta la cámara en paisaje y retrato y, a su vez, en automático. He leído que hay que fijar primero con una leve presión la imagen y luego presionar a fondo. Muchas veces, cuando quiero sacar alguna foto de una actividad o si la gente no está totalmente quieta, salen fuera de foco. Cuando quiero usar la función de deporte o la de fotografías rápidas, tampoco logro que queden fijos los objetos o las personas. Por el contrario, en las de paisaje nocturno y personas sí quedan bien. ¿A qué puede deberse?, ¿es solo un problema del pulso del operador? No logro la velocidad de apertura y cierre del obturador como en una réflex convencional. Por ejemplo, usar la cámara digital para hacer fotos de niños, que es difícil que estén quietos, es una tarea complicada.
En primer lugar, debe comprobar que no haya una huella dactilar en la óptica del objetivo, lo que provoca que las fotografías pierdan mucha nitidez. Es algo frecuente y que normalmente no miramos. En segundo lugar, debe tener en cuenta que la cámara a la que se refiere es una compacta a la que no podemos graduar, ni diafragma ni velocidades, por lo que la cámara decide lo que regula, dependiendo de la luz que recibe el sensor.
Cuando usted presiona el botón disparador no es para fijar la imagen, sino que, en ese momento, lo que la cámara hace es auto-enfocar (graduar la distancia a la que va a hacer la foto) y medir la luz para que la cámara coloque el diafragma y la velocidad que crea oportuno. Cuando ya lo ha entendido (un segundo aproximadamente), podemos acabar de apretar el botón disparador.
Si tenemos mucha luz, normalmente hará una velocidad de obturación rápida, pero si tenemos poca luz debemos ir con mucho cuidado y sujetar muy bien la cámara fijando nuestro pulso, porque posiblemente nos va a hacer una velocidad lenta y puede quedar movida. Lo que vamos a fotografiar debe estar lo más quieto posible, porque si no, correremos el mismo peligro.
En cuanto a la función de escenas, es normal que si hace fotografías en posición nocturna más retrato le queden bien porque, por defecto, se dispara el flash, que es lo que congela la imagen y hace que no quede movida. En este caso, si no tenemos bien sujeta la cámara, lo que podría pasar es que aparezca movido el fondo.
Para poder realizar el tipo de fotografía que me comenta, le recomiendo que adquiera una cámara con la que pueda trabajar de forma manual o con prioridad a la apertura o a la velocidad.