En el estudio han colaborado científicos de Reino Unido, Suiza y China
Una investigación desarrollada en la Universidad de Plymouth (Reino Unido) sugiere que los anestésicos locales comúnmente utilizados en las consultas dentales pueden afectar a la proliferación de las células de los dientes de los
niños porque interfieren con la función de las mitocondrias, provocando la muerte celular.
Una investigación elaborada en la Escuela de Medicina y Odontología Península de la Universidad de Plymouth (Reino Unido), dirigida por el doctor Bing Hu e integrada por científicos de China y Suiza, apunta que el uso de anestesia local en niños puede afectar al crecimiento de las células dentales, influyendo en su correcto desarrollo.
El estudio, que se ha publicado en la revista Cell Death Discovery, se ha realizado mediante el uso de dientes de cerdo y células de la pulpa dentaria humana y se ha basado en los anestésicos locales más comúnmente utilizados en las clínicas dentales de Reino Unido, Suiza y China.
Según el equipo de investigación, el tratamiento dental implica un uso más frecuente de anestesia local que cualquier otra área clínica. Y, aunque se ha establecido la dosis máxima de varios anestésicos locales, sus efectos secundarios en los tejidos dentales no se habían investigado hasta la fecha.
El estudio detectó que la mayor duración de la exposición a altas concentraciones de anestésico local fue más dañina porque interfiere con la función de las mitocondrias, provocando un mecanismo de muerte celular denominado autofagia.
Autofagia
Aunque el estudio ha identificado un potencial efecto nocivo de los anestésicos locales en el desarrollo de los dientes, el equipo de investigadores destaca que se necesitan más investigaciones antes de que haya datos suficientes para cambiar las guías clínicas. Según el director de la investigación, el doctor Bing Hu, «nuestro trabajo ha demostrado evidencia de que la anestesia local puede afectar al desarrollo de los dientes de los niños en los niveles celulares y moleculares, pero tenemos que llevar a cabo más estudios clínicos y no deseamos que nuestros hallazgos alarmen a los padres innecesariamente. Lo que pretendemos, con el tiempo, es mejorar las directrices clínicas a través de nuestra investigación para minimizar las dosis de anestésicos locales».
Por otro lado, los investigadores han lanzado un mensaje de tranquilidad a los padres para que no abandonen el tratamiento odontológico de sus hijos. «Nuestros resultados subrayan la necesidad de que los padres ayuden a sus hijos a mantener una dieta sana y una buena higiene oral, así como visitar regularmente al dentista», concluye el doctor Bing Hu.