Introducción
La aplicación de la tecnología láser en Implantología es reciente. En estos últimos años, con el desarrollo de los láseres de diodo, su uso se está extendiendo; pero estos no se pueden aplicar en todas las fases del tratamiento con implantes.
Los láser de Er:Yag tienen un rango de aplicación más amplio, ya que, aparte de su aplicación sobre tejidos blandos, también pueden ser empleados para el tratamiento del tejido óseo y, en los últimos tiempos, se está desarrollando su aplicación en el tratamiento de la periimplantitis con el fin de conseguir la descontaminación de la superficie implantaria.
Diferentes autores (1), han definido cuáles son las características ideales del láser para ser usado en Implantología:
– Mínimo riesgo de daño a los tejidos periimplantarios: el Láser Er:Yag libera mínima cantidad de calor y su corte no tiene efecto térmico.
– No debe modificar la estructura de superficie del implante: como veremos más adelante, con los settings adecuados, el láser Er:Yag no daña la superficie de titanio.
– Buena capacidad de desinfección de las superficies implantarias: en caso de periimplantitis, el láser Er:Yag está demostrando una muy buena efectividad en descontaminación.
Por todo ello, se considera que el láser Er:Yag puede ser utilizado en Implantología.