Tratamientos
El segundo de los temas que se abordaron en el encuentro fue el de los tratamientos dentales. En concreto, los participantes respondieron a la pregunta de si actualmente se hacen sobretratamientos a los pacientes. «Yo no creo que haya un sobretratamiento de los pacientes, y si lo hay, no a nivel global ni de una manera consciente», apuntó el Dr. Trapote al respecto.
De una opinión contraria se manifestó el Dr. José Rábago. «Se está sobretratando a los pacientes, especialmente con implantes, pero no sólo los jóvenes odontólogos, en general, la gran mayoría. En el tema de los implantes somos dentistas depredadores, en lugar de ser dentistas conservadores o restauradores». Para el Dr. Sergio Trapote esto se debe a que muchas veces se ve como la vía más fácil y rentable. «Quizá porque el planteamiento del joven no es estudiar cuál es el mejor resultado para este paciente, sino que va a ir a lo sencillo. Además, es fácil pensar que el tratamiento más rápido, más fácil y económicamente más favorable para el profesional es quitar ese diente y poner implantes».
De izda. a dcha., Paola Beltri, Rafael Cisceros y Sergio Trapote en un momento del desayuno. |
Rafael Cisneros explicó que muchos pacientes van a la consulta pidiendo implantes porque «lo han leído o se lo han contado», aunque puso en el punto de mira a los fabricantes. «Éstos nos han enseñado que los implantes son una salida fantástica, con una vida increíble, que solucionan problemas y dejan el tema periodontal de lado». Pero el problema viene, a su juicio, por la vía de quién forma a ese profesional. «Me sorprende que gente mayor, que es la responsable de formar a un alumno joven, le esté enseñando eso. Si esto es así –asegura– estamos cayendo en el mercantilismo de la profesión, que viene por muchas cosas, entre ellas, las aseguradoras». «Antiguamente –explicó Cisneros–, un profesional sanitario era alguien diferente, pero en este momento los directivos, las aseguradoras, los políticos… consideran a un dentista como un proveedor más de esa cadena de formación».
Ante el debate surgido, José Rábago puntualizó: «No quiero que penséis que estoy diciendo que quien quita un diente y coloca un implante lo haga con mala intención. Los endodoncistas ahora están sobresaturados de trabajo porque hoy los pacientes no se quieren poner implantes por la crisis y, por ello, los dentistas están haciendo lo que deberían hacer: mantener el diente y reconstruirlo». Una forma de trabajar que es razón de ser en el caso de la Odontopediatría. «En nuestra especialidad el trabajo es mucho más conservador y preventivo», puntualizó Beltri.
Además de los implantes, se habló de los tratamientos ortodóncicos que parecen haber proliferado en los últimos años. «Ahora –apuntó Paola Beltri– se está haciendo más ortodoncia en adultos porque estos pacientes, probablemente, cuando eran niños no tuvieron la oportunidad de hacérsela. Además, en adultos es muy efectiva y muchas veces forma parte de un tratamiento que va más allá de colocar los dientes».
José Rábago añadió como razón a la proliferación de este tipo de tratamientos que las compañías han sabido prever lo que la gente quería y han ido adaptando sus productos. «¿Por qué salen, por ejemplo, los brackets transparentes? Porque la gran mayoría de los pacientes que hoy en día tratan los ortodoncistas son adultos y éstos no quieren que se les vea la herramienta con hierros. Creo que es un poco cuestión de modas: todos queremos ser más altos, más guapos y más rubios. Hoy en día el aspecto estético es fundamental».
Rafael Cisneros, aunque coincide en la afirmación de que estamos en un mundo de estética, apuntó a «una cierta tiranía de las casas comerciales». A lo que José Rábago, apostilló: «No creo que sea tiranía, es marketing». Pero no sólo hablamos de estética, dijo el Dr. Trapote: «Los que nos dedicamos a la profesión sabemos que los dientes bien colocados, además, van a sufrir menos patologías y quizás no somos capaces de trasladar al paciente que la ortodoncia no es sólo mover los dientes para tener una sonrisa más bonita».