Tras la jornada electoral celebrada el 8 de abril de 2025, la Facultad de Odontología de la Universidad Complutense de Madrid ha designado al Prof. David Herrera como Decano electo, convirtiéndose así en el 6º en la historia del Centro desde su creación en 1986, cuando tome posesión el día 29 de abril.
El Prof. Herrera, catedrático y hasta ahora Vicedecano de Clínicas e Infraestructuras, toma el relevo del Prof. Gonzalo Hernández Vallejo, a quien, tal y como destacó en su última entrevista con Gaceta Dental, «quiero agradecer que confiara en mí para asumir el cargo de vicedecano» en su momento.

Con una amplia trayectoria vinculada a la UCM, el Prof. David Herrera asume este nuevo cargo con una visión clara de continuidad, crecimiento y renovación dentro de la institución: «La Complutense ha marcado mi trayectoria. Me siento completamente Complutense. He estudiado aquí, he desarrollado toda mi carrera en esta gran universidad, que tiene aspectos muy positivos, pero también enfrenta desafíos. Su tamaño la hace difícil de gestionar y presenta ciertas limitaciones, aunque creo que su potencial es enorme y aún hay margen para seguir creciendo», nos contó desde su despacho en su querida Complutense el pasado mes de febrero.
Añadió, además, que «la Facultad de Odontología es la mejor posicionada dentro de la UCM y la mejor valorada en rankings, no solo en Odontología, sino en cualquier disciplina dentro de la universidad. No hay otra facultad o escuela universitaria en España que haya mantenido una posición tan alta durante tanto tiempo, alcanzando recientemente el puesto 14 a nivel mundial».
Principales desafíos a los que se enfrenta la formación universitaria en España
Y con una mirada puesta en el futuro de la profesión, el Prof. Herrera también señaló la necesidad de abordar con decisión los cambios estructurales que demanda la formación en Odontología: «La formación en Odontología está en un momento de cambio necesario. No solo por las nuevas leyes y regulaciones europeas, que exigen la adaptación de los planes de estudio, sino porque la propia evolución de la disciplina lo requiere. Es evidente que la Odontología de 2035 no será la misma que la de 2010, por lo que debemos reformular la enseñanza para adaptarnos a la realidad futura. Si queremos que los nuevos planes estén operativos en 2035, el cambio debe empezar ahora».
En el ámbito del posgrado, apostilló, los desafíos son distintos. «En el posgrado profesionalizante, el principal reto es el reconocimiento de las especialidades en Odontología, una cuestión pendiente en España desde hace años. Es una exigencia legal que el Gobierno debe abordar y, además, es una cuestión de dignidad profesional. Por otro lado, en los posgrados orientados a la investigación, el gran reto es hacer más atractiva la carrera académica. Esto no es solo un problema de la Odontología, sino un desafío a nivel nacional. Si no ofrecemos oportunidades competitivas, perderemos talento, los investigadores se irán a otros países y nos quedaremos sin docentes».