El Juzgado de Instrucción nº3 de San Cristóbal de La Laguna ha condenado a un protésico con laboratorio en Taco, por un delito de intrusismo profesional.
La sentencia lo condena a cuatro meses de multa, con cuota diaria de 6 euros, y al abono de las costas procesales. En el juicio oral, el encausado prestó conformidad con los hechos relatados y la pena solicitada por el Ministerio Fiscal, por lo que la sentencia es firme.
El Colegio de Dentistas de Santa Cruz de Tenerife, que había contratado a un detective privado, denunció los hechos a la Guardia Civil. Tal como indica el juez en la resolución, “el protésico atendió en su laboratorio a una persona, acompañante del detective contratado, extrayendo la parte superior de la prótesis que llevaba, y examinándola. Tras informarle del presupuesto, llegó a tomar medidas de la boca y a comprobar el color de las piezas para realizar la prótesis, todo labores que sólo pueden realizar quienes posean el título oficial de dentista”.
El delito de intrusismo, tal como explica el fallo del juzgado de lo Penal nº9 de Santa Cruz de Tenerife, está previsto en el artículo 403.1º inciso primero del Código Penal. “El Colegio de Dentistas de Santa Cruz de Tenerife continúa con su labor de vigilancia e investigación de los casos de intrusismo profesional, no sólo para defender a los dentistas que sí cuentan con la titulación habilitante, sino para proteger la salud bucodental de los ciudadanos, ya que realizar estas acciones sin la titulación adecuada es un peligro para la salud del paciente”, indican desde la organización colegial.
Por todo ello, de nuevo, la entidad colegial de la provincia tinerfeña insiste en la “necesidad de agravar las penas de intrusismo, para que, de verdad, puedan tener un efecto disuasorio y no se ponga en riesgo la salud de los ciudadanos”.