En el campo de la Odontología, la excelencia en los tratamientos y la protección de la salud bucal son prioridades indiscutibles. En este contexto, Ceramir® se erige como una opción de vanguardia, un cemento biocerámico que está transformando la forma en que los profesionales odontológicos abordan la cementación de coronas, puentes y otros dispositivos protésicos, además de minimizar el riesgo de infecciones.
El principal componente del polvo es el aluminato de calcio y del líquido, el agua. Cuando se mezclan estos componentes, se desencadenan reacciones químicas que dan como resultado un material biocompatible con propiedades únicas. Una vez que este material entra en contacto con la salvia se crea un proceso de hidroxiapatita, el cual sella los márgenes de manera efectiva contra las microinfiltraciones a largo plazo.
¿Por qué utilizar el cemento biocerámico de Ceramir®?
Los cementos biocerámicos son un gran aliado para los odontólogos en la búsqueda de resultados sobresalientes. Estos materiales no solo han revolucionado la manera en que los profesionales dentales abordan los procedimientos, sino que también, han transformado la experiencia de los pacientes, ofreciendo un nivel de seguridad y eficacia sin precedentes. Entre los principales beneficios que ofrece Ceramir® cabe destacar:
Facilidad de uso y eficiencia clínica
Ceramir® se distingue por su facilidad de aplicación. Requiere pocas etapas, lo que reduce el tiempo de trabajo y simplifica la colocación. La eliminación del exceso de cemento es un proceso sin complicaciones. Esto se traduce en un ahorro de tiempo considerable durante los procedimientos clínicos.
Experiencia del paciente
La comodidad y satisfacción del paciente son fundamentales en la Odontología moderna. Ceramir® cumple con creces esta expectativa. Los pacientes pasan menos tiempo en la consulta gracias a la eficiencia del proceso. Además, este cemento biocerámico es biocompatible y no irritante. La sensibilidad postoperatoria se minimiza, y lo más importante, se reduce el riesgo de caries secundarias gracias a la formación de hidroxiapatita en la superficie del cemento, lo que garantiza un sellado permanente.
Ahorro de tiempo y dinero
Ceramir® elimina la necesidad de utilizar material adicional o pretratamiento. Esto simplifica el proceso y, al mismo tiempo, reduce los costos operativos de la clínica dental. La eficiencia en la aplicación y el sellado permanente también disminuyen la necesidad de futuras intervenciones, lo que se traduce en un ahorro a largo plazo para los pacientes.
Propiedades únicas
Ceramir® es un cemento biocerámico permanente y radiopaco, lo que facilita el seguimiento y la evaluación de los procedimientos. Además, su composición libre de Bisfenol A, es una elección segura y saludable para pacientes y profesionales.
Ceramir® Crown & Bridge: la elección natural y biocompatible
Dentro de los productos de Ceramir® cabe destacar Crown & Bridge, el candidato ideal para el sellado definitivo de elementos protésicos. Compatible con una amplia gama de materiales protésicos de alta resistencia, como circonio y disilicato de litio, así como coronas y puentes de metal o porcelana, inlays y onlays en oro, y postes metálicos, de cerámica y de fibra, Ceramir® Crown & Bridge se destaca por su capacidad para integrarse con la estructura dental de forma permanente, lo que minimiza el riesgo de caries secundarias.
Este cemento biocerámico ofrece una excelente manejabilidad, con un generoso tiempo de trabajo y una fácil eliminación del exceso de cemento. Su formulación a base de aluminato de calcio y agua garantiza su hidrofilia, lo que lo hace especialmente adecuado para entornos húmedos en la cavidad oral.
Suministrado en cápsulas para mezclar y aplicar directamente, es la solución definitiva para la aplicación eficiente de este cemento biocerámico. A través del sistema QuikCap garantiza una dosificación precisa y una experiencia óptima para los dentistas.
En resumen, Ceramir® ha redefinido el sellado definitivo de elementos protésicos en Odontología. Su tecnología biocerámica única ofrece ventajas significativas para profesionales y pacientes, mejorando la eficiencia clínica y la experiencia del paciente mientras se minimiza el riesgo de complicaciones a largo plazo.