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Escáner intraoral, herramienta clave en la detección precoz del desgaste dentario

El Dr. Marià Santamaria Moreno, Máster en Odontología Integrada por la Universitat de Barcelona y profesor asociado en la Universitat de Barcelona, explica, a través de su artículo científico, los beneficios del escáner intraoral y cómo puede ayudar en la detección precoz del desgaste dental.

Resumen

El desgaste dental es una patología común que afecta a personas de todas las edades y puede tener un impacto significativo en la salud bucal y la calidad de vida. La detección temprana del desgaste dental es fundamental para implementar intervenciones preventivas y terapéuticas efectivas. En este artículo, se presenta una revisión de la literatura científica actual sobre la importancia del escáner intraoral en la detección precoz del desgaste dental. Se destacan los beneficios de esta tecnología en comparación con los métodos tradicionales, como el examen clínico, fotografías y modelos de yeso convencionales. Además, se discuten las aplicaciones clínicas del escáner intraoral en la evaluación y el seguimiento del desgaste dental, así como su contribución a la mejora de la atención odontológica preventiva.

Introducción

Figura 1: Paciente de 70 años con un desgaste dental fisiológico, se puede esperar una reducción promedio en la longitud de la corona de 1,01 mm para los incisivos centrales superiores y de 1,46mm para los incisivos centrales mandibulares.

El desgaste dental es un hallazgo muy común en la población en general. La mayoría de estos pacientes presentan un desgaste fisiológico normal (Fig. 1), que se espera con el proceso de envejecimiento, pero una pequeña proporción de pacientes experimenta un 

desgaste dental patológico más extenso(1), pudiendo ser de una magnitud tan extensa que puede comprometer el correcto funcionamiento del aparato estomatognático (Fig. 2), llegando a requerir la intervención en múltiples dientes con una reorganización del sistema oclusal con técnicas directas o indirectas, las cuales pueden suponer un elevado coste económico para el paciente (Fig. 3).

Figura 2: Paciente con un desgaste dental severo que compromete el correcto funcionamiento del aparato estomatognático.

Tradicionalmente, la detección del desgaste dental se ha basado en el examen clínico, el uso de modelos de yeso y las fotografías convencionales (Fig.3), pero estas técnicas pueden tener limitaciones en la detección temprana y precisa de lesiones incipientes. En contraste, el escáner intraoral se ha convertido en una herramienta muy valiosa en la Odontología moderna debido a su capacidad para proporcionar imágenes tridimensionales detalladas de la cavidad oral y poder compararlas en pequeños periodos de tiempo. En este artículo, se discutirá en detalle la importancia del escáner intraoral en la detección precoz del desgaste dental y su papel en la mejora de la atención odontológica preventiva.

Figura 3: Paciente de la figura 2 después de rehabilitar el esquema oclusal mediante prótesis fija.

Se espera un grado de desgaste dental fisiológico a lo largo de la vida (15 micras cada 6 meses) y el aumento de la edad es un factor de riesgo para una mayor gravedad del desgaste dental. Una revisión sistemática encontró que el 17% de las personas de 70 años presentaban desgaste dental severo en comparación con el 3% de las personas de 20 años(2). Se puede esperar una reducción promedio en la longitud de la corona de 1,01 mm para los incisivos centrales superiores y de 1,46 mm para los incisivos centrales mandibulares a una edad promedio de 70 años(3).  En Europa, diferentes estudios reportan que aproximadamente un tercio de la población presenta un desgaste dental moderado y el 3% un desgaste severo(4,5). Por lo general, los hombres presentan una mayor incidencia que las mujeres(5).

Etiología

La etiología del desgaste dental es un tema complejo y multifactorial que involucra una interacción entre diversos factores biológicos, conductuales y ambientales. Lo que nos permite clasificar el desgaste dental en 3 categorías, en función de su etiología.

Figura 4: Paciente con desgaste dental severo provocado por el ácido intrínseco fruto de una hernia de hiato.

Erosión: La erosión es generalmente parte de un proceso multifactorial, ya que un ataque ácido suaviza el esmalte y la dentina, lo que hace que las capas superficiales del diente sean susceptibles de eliminación mediante procesos mecánicos, como el desgaste y la abrasión. El ácido intrínseco es la principal causa de desgaste erosivo, la evidencia sugiere que el ácido gástrico puede estar relacionado con un desgaste dental más severo en comparación con los ácidos dietéticos(6) (Fig 4).

Figura 5: Erosión dental generalizada donde se pueden apreciar en algunos dientes la pulpa dental debido a la abrasión severa.

En la dieta del paciente pueden estar presentes numerosas fuentes potenciales de ácidos extrínsecos. Las bebidas carbonatadas, el vino blanco, los cítricos y el vinagre, por nombrar algunos, son causas habituales de erosión. Estos alimentos y bebidas suelen tener un pH inferior al pH crítico 5,5 (esmalte) y al pH 6,7 (dentina), en los que estos pueden disolverse(7). Hay una serie de signos característicos de la erosión. La erosión temprana en el esmalte inicialmente causa pérdida del contorno de la superficie, lo que lleva a superficies lisas, pulidas o brillantes, de la superficie del esmalte. Una erosión más avanzada en la dentina produce defectos de ahuecamiento o lesiones diseminadas en las superficies oclusales y una pérdida progresiva de dentina, lo que puede provocar que el espacio pulpar se vuelva visible o incluso expuesto (Fig. 5). Algunos pacientes pueden notar sensibilidad aumentada en dichas zonas pudiendo llegar a presentar signos de inflamación pulpar.

Atrición: El desgaste es una de las principales causas del desgaste de los dientes. Es el resultado de la fricción entre dientes opuestos y frecuentemente se asocia con hábitos parafuncionales(8). El aplanamiento de las puntas de las cúspides caninas puede ser un signo temprano de parafunción, particularmente en pacientes jóvenes (Fig. 6).

Figura 6: Desgaste localizado en las cúspides de los caninos, signo característico inicial de la atrición dental.
Figura 7: Fase más avanzada de la atrición dental, mostrándose un desgaste generalizado en ambas arcadas.


Un desgaste más generalizado puede afectar las caras oclusales o incisales de todos los dientes, siendo más evidente en la zona anterior. El esmalte se aplana, exponiendo eventualmente la dentina, y los pacientes a menudo desarrollan facetas de desgaste oclusal coincidentes entre los arcos, que pueden ser más notorias en pacientes con una relación incisal de borde a borde, o pueden volverse evidentes cuando el paciente realiza movimientos de protrusión o excursión lateral. (Fig. 7)

Figura 8: Abfracciones en las superficies radiculares generalizadas acompañadas de retracción gingival.

Abrasión: La abrasión es causada por el desgaste de un objeto extraño, como un cepillo de dientes y pasta de dientes, y crea lesiones suaves cóncavas o en forma de V en la cara vestibular y cervical de los dientes. Los pacientes con recesión y exposición radicular tienen mayor riesgo de desarrollar abrasión, ya que son menos resistentes al desgaste que el esmalte(9) (Fig. 8).

Impacto en la calidad de vida del desgaste dental

Los pacientes que acuden a una consulta dental en busca de tratamiento por el desgaste de sus dientes lo hacen principalmente por las secuelas estéticas derivadas del mismo, en segundo lugar, por la hipersensibilidad dentinaria y, por último, por los problemas funcionales o dolor(10,11). (Fig 9-10)

Figura 9-10: Paciente adulto joven que acude a la consulta preocupada por el desgaste dental en los dientes anteriores del maxilar, afectando a la armonía de su sonrisa.
Figura 11: Paciente con trastorno de la alimentación que presenta un desgaste dental severo en las caras palatinas de los incisivos superiores.

El desgaste dental erosivo moderado o severo impacta negativamente en la calidad de vida, con asociaciones más fuertes encontradas en pacientes más jóvenes, mujeres y personas de un entorno socioeconómico más elevado(12). Varios estudios han demostrado que un desgaste dental más severo se asocia con un mayor impacto en la calidad de vida (13,14,15).El dentista o el equipo dental (higienistas, auxiliares, etc…) puede ser el primer profesional de la salud en sospechar que alguien está luchando contra un trastorno de la alimentación(16). Nuestro colectivo está en una posición ideal para detectar los primeros signos y animar al individuo a buscar apoyo y tratamiento si es necesario(17). (Fig. 11)

Sin embargo, los pacientes muchas veces desconocen que tienen dientes desgastados o los factores de riesgo asociados. Informar y educar a los pacientes sobre su salud bucal es una parte clave de la prevención, es aquí donde el uso del escáner intraoral nos ofrece una nueva herramienta de comunicación para concienciar a nuestros pacientes de la presencia de signos objetivos de un desgaste dental en fase inicial que nos puede ayudar a prevenir un desgaste futuro y minimizar las acciones terapéuticas derivadas de dicho desgaste. (Fig 12-13).

Figura 12-13: Paciente con un desgaste dental prematuro, mediante el escáner intraoral podemos comunicarnos (herramienta oclusograma) para hacer entender al paciente que tiene un problema de desgaste que puede requerir de un tratamiento muy importante si no llevamos a cabo una corrección en la relación entre arcadas mediante un tratamiento de ortodoncia.

Monitorización del desgaste dental: qué usar y cuándo usarlo

La prevalencia del desgaste dental erosivo está aumentando, especialmente en los grupos de edad más jóvenes(5). Tanto los odontólogos como los pacientes son cada vez más conscientes de este problema(18). Entre los dentistas empieza a existir un consenso por el que es necesario comenzar a detectar el desgaste dental con mayor frecuencia y monitorear activamente el desgaste dental erosivo, especialmente en el paciente joven(19).

Uno de los principales factores de riesgo del desgaste dental son los ácidos introducidos en la dieta que junto al bruxismo pueden causar un grado de desgaste importante en poco tiempo(18). Otra condición muy importante en el paciente joven son los trastornos de la alimentación (bulimia, anorexia, …). Se estima que los trastornos alimentarios diagnosticados afectan al 8,4% de las mujeres y al 2,2% de los hombres, aunque los estudios de prevalencia puntual de los trastornos alimentarios pueden llegar al 19,4% para las mujeres y al 13,8% para los hombres(20). Además, existen muchas condiciones sistémicas relacionadas con un aumento en el desgaste dental, entre las que encontramos: reflujo gastroesofágico(21), asma(22), enfermedades mentales(23), xerostomía(24), obesidad(25), alcoholismo(26), apnea del sueño(27).  Muchas de estas condiciones son muy frecuentes entre la población joven, siendo la conjunción de más de uno de los factores citados como el causante multifactorial del desgaste dental prematuro.

Con los recientes avances tecnológicos, el seguimiento del desgaste dental se puede clasificar en monitorización cualitativa o cuantitativa. La monitorización cualitativa se produce cuando los datos del paciente al inicio y en un momento futuro se evalúan subjetivamente para detectar cambios significativos, a menudo con un simple resultado de sí o no. Sin embargo, cuando se utiliza una escala, como la presente en un índice clínico, ésta se vuelve semicuantitativa. La monitorización cuantitativa implica la medición del cambio en los datos del paciente con un resultado numérico de la progresión del desgaste.

Monitorización cualitativa

  1. Modelos de yeso: la comparación de modelos de yeso tomados en diferentes espacios de tiempo es un método válido para la monitorización del desgaste dental. La precisión de los modelos de yeso puede variar entre 11-67 micras(28). Siendo el tiempo mínimo para detectar desgastes de unos 2 años. Por otro lado, la comparación de modelos no puede determinar la presencia de lesiones que llegan a la dentina (medición cualitativa)(29). Dada esta información, los modelos de estudio suelen ser más una herramienta de educación del paciente que un método para monitorear el desgaste dentro de una ventana de diagnóstico factible(18).
  2. Índices clínicos: Los índices clínicos ofrecen una mayor precisión para valorar cambios, ya que se pueden observar ligeros cambios en la textura, la translucidez y el color. Existen diferentes índices utilizados en la literatura para valorar el desgaste dental: BEWE (Basic Erosive Wear Examination)(19), el Tooth Wear Evaluation System (30), Smith and Knight Index,… Existe el consenso en la literatura que son necesarios un mínimo de 18 meses para poder observar cambios detectables en el desgaste dental a nivel clínico con el uso de estos índices cualitativos. Como herramienta de detección práctica, identificar y registrar el desgaste con un índice clínico simple, como el BEWE, es una forma rápida y rentable de documentar el desgaste.
  3. Fotografías clínicas: Las fotografías clínicas también representan una buena opción, ya que ofrecen niveles de precisión y tiempos de diagnóstico similares a los índices clínicos, con la ventaja de que puedes discutir y comparar con el paciente a lo largo de los años. No hay estudios a largo plazo que evalúen este método de monitorización del desgaste dental (18).
  4. Escáner intraoral: El escáner intraoral de última generación nos permite evaluar la profundidad, la textura, el color y la translucidez de las superficies dentales. Marro et al., escanearon modelos de yeso de adolescentes tomados con un intervalo de diferencia de 24 meses. Observaron que la inspección visual de las exploraciones de los modelos es más sensible para diagnosticar la progresión del desgaste dental que la inspección visual de los modelos (31). El verdadero beneficio del escaneado intraoral radica en nuestra capacidad de utilizarlas para la medición cuantitativa de la progresión del desgaste, comentaremos esta capacidad en el siguiente bloque.

Monitorización cuantitativa

Hasta la aparición de los escáneres intraorales, la evaluación cuantitativa del desgaste dental se ha limitado al ámbito universitario. Esto ha implicado tomar modelos de estudio precisos, escanearlos con un perfilómetro y medir el cambio utilizando un software de comparación de superficies. Esta técnica nos ha permitido valorar cambios con un umbral de 15 micras (umbral de desgaste considerado fisiológico) en periodo de tiempo cortos (6-12 meses) (32) pero se ha visto relegada al uso en el ámbito universitario de investigación, ya que la tecnología y los programas que se utilizan son muy caros. 

Con la introducción del escáner intraoral en nuestras consultas se ha abierto una gran oportunidad para monitorizar de forma cuantitativa y cualitativa el desgaste dental. Los principales escáneres intraorales del mercado introducen herramientas de comparación entre diferentes archivos STL tomados del mismo individuo (imagen timelapse), pudiendo detectar cambios en pequeños periodos de tiempo (6 meses) con el umbral establecido de 25 micras de referencia. El uso de esta tecnología es fácil y rápida, obteniendo imágenes donde, por ejemplo, con una escala de colores se pueden mostrar visualmente las áreas donde se ha sufrido un desgaste, siendo una herramienta de comunicación valiosísima con nuestros pacientes (Fig 14-15). Sin embargo, la mayor fuente de inexactitud es el algoritmo de registro y medición para combinar los dos escaneos tomados en momentos separados y analizarlos. Cuanto más importante es el desgaste, menor superficie de referencia para poder comparar los registros y menor precisión vamos a tener.

Figura 14-15: Comparativa entre dos archivos STL del mismo paciente, tomados con 6 meses de diferencia, en el que se puede observar detalle del desgaste oclusal en la cara oclusal del segundo molar inferior.

Conclusiones

  • La detección activa y el seguimiento del desgaste dental deben formar parte del examen clínico de cada nuevo paciente. Las ventanas de diagnóstico para detectar cambios cualitativos en modelos de estudio, índices clínicos, fotografías clínicas y exploraciones intraorales varían de 18 meses a 24 meses.
  • Actualmente existen diferentes softwares para la medición cuantitativa del desgaste dental, con escaneos intraorales con potencial para diagnosticar el desgaste activo en 6 meses. Por tanto, es recomendable escanear a todos nuestros pacientes para poder monitorizar, de forma cualitativa y cuantitativa, el grado de desgaste dental de sus dientes. Especialmente en aquellos pacientes en los que detectemos hábitos de riesgo o conductas relacionadas con un desgaste dental prematuro.

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Autores

Especialista en Odontologia integrada y Ortodoncia invisible Invisalign. Es profesor asociado en la Universitat de Barcelona.

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