Un estudio publicado en Journal Of Oral Rehabilitation se enfocó en investigar la conexión existente entre las características clínicas a largo plazo y los biomarcadores hematológicos relacionados con la actividad del eje hipotálamo-pituitario-suprarrenal y la inflamación en pacientes con trastornos temporomandibulares, teniendo en cuenta la duración del sueño como factor clave.
En el proceso participaron un total de 63 pacientes femeninas diagnosticadas con TTM, a las que se tomaron muestras de sangre venosa con el fin de analizar los niveles de mediadores inflamatorios y de estrés. Además, se llevaron a cabo evaluaciones exhaustivas de diversos aspectos relacionados con la calidad del sueño, el estrés, la somatización y los síntomas autonómicos, mediante el uso de cuestionarios estructurados.
Posteriormente, las pacientes fueron divididas en grupos según la duración del sueño que presentaban:
- Sueño normal.
- Sueño corto.
- Y sueño largo.
A partir de esta clasificación, se procedió a comparar las diferencias en las características clínicas a largo plazo y las variables hematológicas, después de haber aplicado un tratamiento conservador. Paralelamente, se llevaron a cabo búsquedas de índices clínicos y hematológicos que pudieran estar relacionados con una respuesta favorable al tratamiento.
De esta manera, se logró obtener una visión más precisa y detallada de la relación entre los TTM y el sueño, así como de los posibles mecanismos inflamatorios involucrados en estos trastornos.https://gacetadental.com/2022/12/medicina-dental-del-sueno-una-ciencia-en-auge-con-vision-multidisciplinar-39280/
Los datos obtenidos en la investigación proporcionaron información para comprender mejor los TTM y avanzar hacia enfoques de tratamiento más efectivos y personalizados, siendo dichos datos los siguientes:
- Se encontró que aquellos pacientes con un sueño prolongado experimentaron una menor incidencia de dolor al realizar movimientos mandibulares voluntarios.
- Por el contrario, el grupo de pacientes con sueño breve mostró niveles significativamente más altos de depresión y somatización.
Además, se observó una diferencia en los niveles de norepinefrina entre los grupos de sueño. Concretamente, se encontró que los niveles de norepinefrina eran más bajos en el grupo de sueño prolongado en comparación con los otros grupos. Esto sugiere, según los autores, que la alteración del sueño puede influir en los niveles de esta sustancia y, por ende, en la respuesta al dolor en pacientes con trastornos temporomandibulares.
En resumen, el estudio subraya la importancia del sueño en los TTM y su estrecha relación con la inflamación sistémica. Los profesionales de la odontología deben considerar el sueño como un factor clave en la evaluación y tratamiento de los pacientes con TTM. Al enfocarse en una adecuada gestión del sueño, se puede mejorar la calidad de vida de los pacientes y lograr resultados más positivos en su tratamiento a largo plazo.
Fuente:Journal Of Oral Rehabilitation. Sleep duration and inflammatory mediator levels associated with long-term prognosis in temporomandibular disorders. Yibee Kim, Chunghwan Son, Yoon Kyung Park, Jung Hwan Jo, Ji Woon Park https://doi.org/10.1111/joor.13494
