Según destacó el catedrático Mariano Sanz, en el Congreso SEPA Sevilla 2023, “la salud periimplantaria no se puede garantizar, sino que se debe alcanzar y mantener con una adecuada higiene y unos adecuados protocolos preventivos”.
“Aproximadamente uno de cada cinco implantes dentales (20%) que se colocan sufrirá en mayor o menor grado pérdida de hueso e inflamación periimplantaria (periimplantitis) a partir del 5º año de su función soportando un diente o una prótesis dentaria”, afirmó el profesor Mariano Sanz, catedrático de Periodoncia de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), durante el Congreso de la Periodoncia y la Salud Bucal SEPA Sevilla 2023. Además, compartió sesión con el profesor Maurizio Tonetti, el cual destacó “el desafío que suponen estos alarmantes datos epidemiológicos”.
Para ello, se planteó como indispensable conocer mejor cuáles son los factores etiológicos y de riesgo para sufrir estas enfermedades periimplantarias, “con el fin de desarrollar estrategias preventivas personalizadas que sean eficaces en la reducción de estas altas tasas de prevalencia”, destacó el profesor Sanz, quien admitió que “los pacientes frecuentemente se quejan de que no han sido adecuadamente informados sobre el riesgo de padecer estos procesos destructivos de los tejidos periimplantarios, aunque cada vez se tiene más conciencia de su importancia y trascendencia”.
En este Congreso se ha llamado la atención sobre los medios preventivos más eficaces para el control de estas enfermedades, aportándose información relevante, actualizada y plenamente contrastada con la evidencia científica. Y es que, como subrayó el catedrático de la UCM, “la salud periimplantaria no se puede garantizar, sino que se debe alcanzar y mantener con una adecuada higiene oral y unos adecuados protocolos preventivos”.
Y para que la prevención se realice de la forma más óptima posible, la información del paciente y del profesional resulta crucial. Así, entre otros conocimientos necesarios, como aconsejó el profesor Sanz, “es fundamental saber distinguir claramente entre salud periimplantaria, mucositis periimplantaria y periimplantitis, así como conocer cuál es la prevalencia relativa de estas enfermedades (tanto a nivel del número de pacientes, como del número de implantes por paciente)”.
El concepto actual de los procesos infecciosos e inflamatorios asociados a estas enfermedades se discutió en este foro científico, así como las características de los pacientes que los hacen más susceptibles; igualmente, se señaló los indicadores de riesgo asociados al implante que hacen que, incluso en la misma boca de un paciente, unos implantes sufran periimplantitis mientras que otros tengan salud periimplantaria.
Salud periimplantaria: ¿qué es y por qué es tan importante?
Actualmente, el concepto de salud periimplantaria alude al estado íntegro de los tejidos que rodean a un implante en función sin inflamación. Este estado se verifica mediante la inspección intrabucal, evaluando la mucosa periimplantaria y, mediante el sondaje de estos tejidos, verificando que no sangran al sondaje y no tienen profundidades de sondaje aumentadas. En un estado de salud periimplantaria, los niveles óseos periimplantarios que se evalúan radiográficamente deben mantenerse sin cambios desde el momento de la colocación del implante.
Las enfermedades periimplantarias son patologías inflamatorias de origen infeccioso en los tejidos que rodean un implante dental que se encuentra en función y osteointegrado. La mucositis periimplantaria es una inflamación de la mucosa que rodea al implante, sin que haya afectación del hueso en el que el implante ha sido colocado; en el caso de la periimplantitis, además de existir inflamación de los tejidos blandos periimplantarios, se produce la pérdida progresiva del hueso que aloja al implante.
Tan solo un tercio de los pacientes cumplen estrictamente con la terapia periodontal de mantenimiento
Una vez controlada la enfermedad periodontal, para evitar que se reproduzca, es imprescindible acudir a la consulta para que el odontólogo/periodoncista o higienista revise las encías y realice la terapia periodontal de mantenimiento. Este tratamiento es una “puesta a punto” de las encías, donde se limpian los restos de placa bacteriana que existan sobre y debajo de la encía, con el objetivo de evitar que la enfermedad progrese. También tiene como objeto detectar zonas de riesgo y la aparición de otras enfermedades bucodentales. En definitiva, se trata de evitar en lo posible o reducir la pérdida de dientes.
“Es importantísimo que todas las personas tratadas de periodontitis acudan a todas sus visitas de mantenimiento”, afirmó la Dra. Ana Echeverría, Máster en Periodoncia e Implantes (Universidad Complutense de Madrid) y que participó como ponente en una sesión del Congreso de la Periodoncia y la Salud Bucal. Sin embargo, “se estima que tan sólo un tercio de los pacientes que inician tratamiento periodontal serán perfectos cumplidores, una cuarta parte lo dejará durante el primer año y el resto serán pacientes que acudirán de forma errática”.
Importantes consecuencias
Esta falta de adherencia al tratamiento, según destacó la Sociedad Española
de Periodoncia (SEPA), puede acarrear importantes consecuencias negativas. “Al ser una enfermedad crónica, no cumplir con los requisitos necesarios para estabilizar y controlar la enfermedad terminará provocando una recaída”, indicó la Dr. Echeverría.
Las variables que es necesario cubrir con el fin de mantener la estabilidad periodontal son cuatro: finalizar el tratamiento básico con el menor número de bolsas residuales, tener un buen control de placa bacteriana, ser no fumador y ser cumplidor.
“Los estudios apuntan a que los pacientes muy cumplidores compensan parcialmente las carencias en las otras variables, de manera que pierden menos dientes que los no cumplidores en igualdad de condiciones”, aseguró la periodoncista Ana Echeverría.
Básicamente, con el mantenimiento periodontal se satisfacen cuatro necesidades básicas: 1) Control de la salud periodontal y general; 2) Refuerzo de las instrucciones de higiene oral; 3) Motivación del paciente para el control de factores de riesgo; 4) Eliminación profesional de placa/cálculo subgingival de bolsas residuales.
La motivación del paciente, fundamental
Partiendo de esta realidad, se considera que motivar al paciente es un elemento determinante para aumentar el cumplimiento de la terapia periodontal de mantenimiento. La adherencia al tratamiento es una dimensión multifactorial difícil de gestionar adecuadamente. Sin embargo, atendiendo a su experiencia, la Dra. Echeverría señaló tres aproximaciones que ayudan mucho a ganar la fidelidad del paciente: “1) ofrecerle suficiente información y de forma comprensible durante las dos o tres primeras visitas; 2) ver al paciente varias veces durante el primer año; 3) generar una experiencia en la clínica que motive al paciente a seguir viniendo”.
Como recomendaciones prácticas, esta experta apuntó algunos mensajes que deben ofrecerse en la primera vista:
- La periodontitis es una enfermedad crónica, lo que significa que el abandono de las vistas de mantenimiento supone perder el equilibrio alcanzado y se deberá volver a empezar. En este caso, se trata de convencer al paciente que “no vale la pena, teniendo en cuenta que venir dos veces al año asegura mantener los resultados o, como mínimo, identificar rápido las recaídas”, declaró la especialista de SEPA.
- Si por alguna razón el paciente no puede o quiere acudir a su consulta clínica habitual, se le aconseja buscar otro periodoncista, facilitándose toda la información necesaria y su historial odontológico.
- La higiene dental en casa es fundamental. Si el paciente no es capaz de llevarla a cabo adecuadamente, el equipo odontológico le ayudará, acortando el intervalo entre vistas hasta que mejore su destreza en la higiene oral.
- La clínica dental está para ayudar al paciente a mantenerse sano y el principal recurso es la limpieza dental, que es una herramienta fundamental de prevención de enfermedad bucal y de promoción de la salud general.
