En la práctica dental actual, es difícil evitar tratar pacientes con implantes dentales que además necesitan un mantenimiento a largo plazo. Sin embargo, en base a un estudio entre escuelas de Odontología de Reino Unido e Irlanda que se recoge en el British Dental Journal, existe una renuencia y falta de confianza a la hora de llevar a cabo el mantenimiento periimplantario por parte de los profesionales de la atención dental primaria.
Sin embargo, es conocido que los implantes dentales necesitan un seguimiento y un mantenimiento regulares y continuos, para así poder tener una supervivencia óptima, la cual – recuerdan en el artículo – se puede ver afectada por:
- Complicaciones biológicas como afecciones inflamatorias (mucositis periimplantaria y periimplantitis), así como lesiones de los tejidos blandos.
- Complicaciones técnicas como fractura del propio implante, del material de revestimiento, aflojamiento del pilar o tornillo, y pérdida de retención.
Precisamente para facilitar esta tarea de seguimiento y mantenimiento, el British Dental Journal, a través de Nature, propone una lista de verificación fácil de usar sobre cómo se debe examinar un implante dental y reconocer problemas potenciales en el entorno de atención dental primaria.
Puntos clave en el examen de implantes dentales para los dentistas generales
Inflamación en los tejidos circundantes
Esto puede ser indicativo de inflamación en el aspecto coronal de los tejidos gingivales o a lo largo del implante dentro del alvéolo (indicativo de mucositis o periimplantitis).
Higiene oral
La acumulación de placa en las superficies del implante resulta en mucositis periimplantaria. La evidencia retrospectiva indica que, si no se trata, la mucositis periimplantaria puede convertirse en periimplantitis.
Sangrado al sondaje
La BFJ informa que el sondaje convencional con una fuerza ligera (0,25 N) no daña los tejidos periimplantarios y se recomienda al menos una vez al año.
Supervivencia del implante
Es decir, que permanezca estable y funcional. Esto se puede evaluar mediante radiografías y examinando la movilidad del implante.
Oclusión
Esta revisión incluye la evaluación de la mordida y la distribución de la carga en los implantes y los dientes adyacentes.
Monitoreo radiográfico
La frecuencia y el tipo de radiografías deben ser evaluados en función del tiempo desde la colocación del implante y la salud del paciente.
Deep pockets
Las profundidades del bolsillo alrededor de los implantes dentales deben ser generalmente menores a 5mm. Registrar la profundidad de sondeo es vital para proporcionar un registro de línea de base que se utilizará como punto de referencia para futuras comparaciones y diagnóstico de enfermedad periimplantaria.
Movilidad
Cualquier movilidad debe ser investigada más a fondo y tratada rápidamente, ya que puede provocar inflamación, pérdida ósea crestal posterior y periimplantitis.
Puntos de contacto
La falta de puntos de contacto puede resultar en impactación de alimentos y caries subsiguientes en los dientes naturales adyacentes, así como inflamación gingival, mucositis periimplantaria y periimplantitis.
Por último, los autores del artículos indican que también es importante revisar la integridad de la prótesis dental de implante y la presencia de fracturas en el material de recubrimiento, así como la apariencia estética del implante. Sin olvidar, por supuesto, la satisfacción del paciente con la prótesis y comprobar si presenta algún síntoma o queja.
Fuente: Barrak, F., Caga, D. & Crean, S. Lo que todo odontólogo debe saber sobre cómo examinar a los pacientes con implantes dentales. Br Dent J 234 , 309–314 (2023). https://doi.org/10.1038/s41415-023-5574-6