Tratar el miedo a la atención dental en la infancia no solo es eficaz, sino que predice una mayor regularidad en las futuras revisiones dentales. Esta es la conclusión a la que ha llegado un nuevo estudio de la Universidad de Oulu (Finlandia) dirigido por la Dra. Taina Kankaala y publicado en octubre de 2021 en la revista BMC Oral Health.
Dicho estudio realizó un seguimiento durante una década a 152 pacientes tratados en la “Clinic for Fearful Dental Patients” (Clínica para pacientes que sufren miedo al dentista, CFDP) de la ciudad de Oulu. En este centro, los pacientes recibían un tratamiento integral que les proporcionaba ayuda tanto para tratar su fobia dental como para tratar sus patologías odontológicas.
La investigación de la Dra. Kankaala se basaba en estudiar los efectos a largo plazo del tratamiento de la fobia que padecían estos pacientes, estableciendo quiénes acudían posteriormente a revisiones periódicas, quiénes no lo hacían y qué pacientes acudían a la atención primaria para recibir tratamientos de urgencia.
Según el estudio, los pacientes de menor edad (de 2 a 10 años) tratados en la CFDP, asistieron posteriormente a un mayor número de revisiones dentales en comparación con los que recibieron tratamiento a una edad más avanzada.
Los beneficios de una identificación temprana de la fobia al dentista
Tal y como subraya la principal autora del trabajo, «hay que identificar a los pacientes que tienen miedo y aliviar su miedo al dentista a una edad temprana. Los pacientes temerosos pueden ser un reto, y su tratamiento puede ser una carga para los trabajadores de la salud bucodental. Si no se aborda la situación, en contra de la creencia común, el miedo grave del niño a la atención dental no suele remitir a medida que crece. Un tratamiento adecuado e individualizado del miedo al dentista beneficia no solo al paciente sino también al personal médico, además de reducir los costes del tratamiento para todas las partes a largo plazo».
Si quieres leer el estudio completo, puedes hacerlo desde este enlace.