Más del 40% de los pacientes con COVID-19 experimentaron sequedad de boca, según una revisión publicada en el Journal of Dental Research que analizó la prevalencia de los síntomas orales asociados a la infección por SARS-CoV-2. Los trastornos del gusto y las lesiones orales también fueron frecuentes en los pacientes infectados.
La revisión fue una actualización de la investigación publicada anteriormente sobre la prevalencia de los síntomas orales en los casos de COVID-19. En el análisis, de unos 65.000 pacientes con COVID-19, la xerostomía, los trastornos del gusto y la presencia de lesiones orales apuntaban a menudo a una infección por SARS-CoV-2.
«La prevalencia de los signos y síntomas orales y el hecho de que sean consecuencia de una infección directa por el SARS-CoV-2 o simplemente representen manifestaciones secundarias son fundamentales», afirmaban los autores del estudio, dirigidos por la Dra. Juliana Amorim dos Santos, del Departamento de Odontología de la Universidad de Brasilia (Journal of Dental Research, 29 de julio de 2021).
Estudios adicionales y aumento del número de pacientes
El nuevo informe, al igual que la primera revisión sistemática realizada en junio de 2020, analizó las manifestaciones orales relacionadas con el COVID-19. La actualización evaluó los 40 estudios primarios originales incluidos en la primera revisión. Además, incluyó 143 nuevos estudios adicionales publicados en el primer semestre de 2021. El número de pacientes también aumentó de 10.228 a 64.876.
La xerostomía fue el síntoma oral más prevalente identificado en los pacientes de COVID-19, y se presentó en el 43% de los pacientes. Fue un nuevo síntoma identificado por los autores y sustituyó a la alteración del gusto como el síntoma oral más reportado de COVID-19. Según los autores, «la inclusión de estudios de muchos países podría haber contribuido a este ajuste».
Aunque los trastornos del gusto ya no eran el principal síntoma oral de la COVID-19, seguían siendo frecuentes en la población. Un 38% de los pacientes experimentaron un trastorno del gusto, y los autores encontraron una asociación significativa entre los trastornos del gusto y una prueba positiva del SARS-CoV-2. También hubo una asociación significativa entre los trastornos del gusto y la experimentación de un caso leve o moderado de COVID-19 para los pacientes femeninos, pero los autores afirmaron que esos resultados «presentaban una baja certeza de evidencia».
Prevalencia variable
La prevalencia de los trastornos del gusto varió en función de la ubicación, oscilando entre el 14% en África y el 49% en Europa. Para los autores, los efectos de los fármacos, el sistema nervioso periférico y la respuesta inflamatoria local podrían ser las razones de esta diferencia.
Entre los trastornos del gusto, el más común fue la hipogeusia (capacidad reducida para saborear alimentos) afectando al 34% de los pacientes. Le siguió de cerca la disgeusia, o la percepción de un sabor alterado, que afectó al 33% de los pacientes. Otro 26% de los pacientes experimentó ageusia (pérdida completa del gusto).
Muchos de los pacientes con COVID-19 presentaban a menudo lesiones en la mucosa oral, aunque la presencia de lesiones puede sugerir un deterioro de la inmunidad o la presencia de coinfecciones, más que un resultado directo de la infección por SARS-CoV-2. Las lesiones con un patrón clínico aftoso fueron las más prevalentes, seguidas de las lesiones herpéticas, la candidiasis oral, la lengua geográfica, la parotitis y la queilitis angular. La lengua, los labios y el paladar fueron las localizaciones afectadas más frecuentes.
«El análisis de las pruebas actuales sugiere que la tríada xerostomía, disfunción del gusto y lesiones de la mucosa oral son manifestaciones comunes en los pacientes con COVID-19», argumentaron los autores.
Deficiencias en el estudio
El informe incluyó un gran número de pacientes y estudios primarios, pero no estuvo exento de deficiencias. Los autores no examinaron la asociación entre los trastornos del gusto y los grupos de edad. Además, les resultó difícil comparar las manifestaciones orales y analizar las de la mucosa.
Basándose en sus hallazgos, los autores plantearon la hipótesis de que el SARS-CoV-2 afecta a las glándulas salivales, lo que provoca trastornos del gusto, xerostomía y la llamada halitosis o mal aliento. Por ello, solicitaron más estudios para investigar los mecanismos fisiológicos entre los síntomas orales más comunes y el COVID-19.
La conclusión de los autores del estudio es que «estos resultados están en discusión, y serán necesarios más estudios para confirmar su asociación con la infección directa por SARS-CoV-2 en la cavidad oral».
Fuente: DrBicuspid.com