En este periodo se ha experimentado un fuerte aumento en las ventas de equipos de protección individual, de productos desechables, de higiene y de desinfección.
Tal y como podía imaginarse, abril ha sido un mes nefasto, también para el sector dental, debido al cierre casi total de las clínicas dentales y laboratorios protésicos. Sin embargo, ya en el mes de mayo, la mayor parte de estas estructuras abrieron sus puertas, aunque particularmente en la segunda quincena. No obstante, al margen de los EPI (Equipos de Protección Individual) y productos de desinfección, las ventas realizadas durante el mes de abril solo representaban el 6% de las registradas en el mismo mes del año anterior, mientras que en mayo dicha proporción asciende hasta el 41%.
Por fortuna, en este periodo el sistema distributivo ha contado con un fuerte aumento en las ventas de equipos de protección individual, de productos desechables, de higiene y de desinfección. No obstante, es importante tener en cuenta que son muchas las clínicas dentales que iniciaron su lenta reapertura a mediados de mayo, por lo que muy pocas de ellas empezaron a abastecerse durante el mes de abril.
En el gráfico es posible observar los resultados acumulados del peso en valor en cada periodo comparados con el mismo periodo del año anterior. Por ejemplo, en lo que respecta a productos desechables, el conjunto de los primeros cinco meses del año con respecto al mismo periodo de 2019 es de 140%, lo que equivale a afirmar que este segmento aumentó en un 40%.
Pr otro lado, siempre a título de ejemplo, el consumo para laboratorio obtuvo durante los primeros cinco meses el 62% del negocio registrado para el mismo periodo de 2019, lo cual indica una caída del 38%.
El mercado total de productos consumibles de clínica y laboratorio a finales de abril supone el 71% del mismo periodo de 2019, marcando una caída del 29% con respecto al año anterior.
El nuevo análisis coyuntural de Key-Stone, llamado “Recovery Analysis Spain”, calcula el peso de las ventas realizadas cada mes con respecto al mismo mes del año anterior. Por el momento trabaja sobre una muestra de distribuidores cuyo valor de venta en productos consumibles durante 2019 fue de casi 220 millones.
El sistema se basa también en la idea de que al monitorizar cada 30 días el peso del mes y compararlo con su homólogo del año anterior es posible realizar un modelo predictivo. Dicho modelo, gracias a una serie histórica del periodo de crisis, permitirá, no solo analizar lo que sucede cada mes, sino también realizar previsiones para el año 2021 aplicando un análisis de regresión.
Por el momento presentamos únicamente el estudio de productos consumibles, pero planeamos ampliar próximamente el informe con la información de implantes, ortodoncia, biomateriales y elaboraciones Cad-Cam.
El estudio mensual se entrega gratuitamente a todas las empresas que adquirieron el estudio Sell-out Analysis y a las que participan facilitando de forma confidencial sus propios datos de venta.
Por más información escribir a: pressoffice@key-stone.it