Dra. Marcela Bisheimer, presidenta de SELO (Sociedad Española de Láser y Fototerapia en Odontología)
¿Cómo se está viviendo en SELO la actual crisis sanitaria?
La estamos viviendo, creo, que de igual forma que el resto de las sociedades científicas; con un primer momento de confusión profesional por la excepcionalidad de la situación de pandemia. Se paralizó de repente toda la organización de las actividades presenciales como nuestro próximo Ier Congreso Ibérico de Láser Oral, que estaba previsto en junio en Oporto, con el que dábamos soporte científico al I Congreso de la Sociedad Portuguesa de Aplicaciones de Láser Oral SPALO, postergado ahora hasta el año próximo.
En contrapartida, durante este tiempo de confinamiento, en SELO hemos sacado adelante un proyecto, con implicación personal y profesional de toda la Junta Directiva quienes han compartido su larga experiencia a través de este material didáctico: la edición del compendio de láser en Odontología SELO, que recopila conferencias cortas, fáciles de ver, en formato vídeo y donde se resume la tecnología láser de la A a la Z, es decir, desde la física del láser hasta las diferentes aplicaciones y protocolos actualizados.
La intención de SELO ha sido la de poder participar y aportar nuestro granito de arena a todo el proyecto global de formación on-line para llegar a todos nuestros compañeros dentistas.
¿Aprenderemos de esta situación tan complicada?
Personalmente creo que aprenderemos poco, pero espero equivocarme. Los seres humanos somos muy especiales, solemos tropezar muchas veces con la misma piedra.
Lo positivo, la introducción forzosa que hemos tenido que hacer todos hacia las plataformas on-line en las que hemos constatado que podemos recibir u ofertar formación, participar de foros de debates o realizar interconsultas multidisciplinares entre profesionales y mucho más.
El Consejo General de Dentistas, ante esta situación extraordinaria que motivó la suspensión de los cursos presenciales, invitó a las Sociedades Científicas y a la Academias de Formación para que unidos se ofrecieran diversas acciones formativas que se pudieran seguir de manera gratuita a través de sus portales de Internet.
Al fin y al cabo, está resultando ser una muy buena experiencia para todos, para los más mayores y para quienes nos resistíamos a dar el salto a la tecnología, tan solo por encontrarnos en nuestra zona de confort, defendiendo lo presencial al 100%.
¿Qué cambios experimentará la práctica odontológica a raíz de esta pandemia?
La garantía de seguridad es más una preocupación por parte de público paciente que de nuestros clínicos. A pesar de que somos un grupo con un alto riego, que trabajamos en la cavidad oral y que producimos aerosoles, siempre hemos cuidado nuestras cadenas de esterilización, asepsia y equipos de protección personal (EPI). Desde luego que estamos ahora frente a una nueva situación con nuevas vías de transmisión, a través del aire, por lo que debemos controlar además la sanidad de nuestro ambiente de trabajo, controlar las corrientes de aire que se generan con los aspiradores y compresores y gestionarlo para que no contaminen ni se recicle el aire.
Para la tecnología láser es una oportunidad de ser considerada e incorporada, a muchos de los protocolos clínicos, en la práctica diaria, dado que una de las cualidades más importantes de la radiación láser es su poder de descontaminación, implementándose, por ello, a los diferentes tratamientos en Periodoncia, Endodoncia, Cirugía e implantes.
Además, los láseres de Erbio indicados para tejidos duros, se pueden utilizar como herramienta sustitutiva a los instrumentos rotatorios convencionales, pudiendo graduarse su concentración de agua y aire en las piezas de mano, generando menor cantidad de aerosoles y reduciendo el riesgo de transmisión.
¿Qué mensaje quiere transmitir a sus socios y al resto de colegas de profesión?
Estamos en una desescalada en la que nos hablan de entrar a una “nueva normalidad” que de normal tendrá muy poco. En nuestro futuro más a corto plazo comenzamos a transitar hacia una nueva era, una nueva forma de actuar, de socializarnos y de tratar a nuestros pacientes. Con protocolos cuidados en donde se implementan forzosamente las nuevas tecnologías para la comunicación y atención odontológica, haciendo triajes, screenings y diagnósticos presuntivos on-line, intentando solventar las necesidades de los pacientes, más o menos urgentes de forma virtual, para posteriormente hacer citaciones con el concepto de concentración de tratamientos.
Para afrontar esta nueva situación los clínicos hemos investigado una gran cantidad de máquinas y unidades nuevas para nuestra profesión y hemos recibido mucha y variada información sobre nuevos productos y nuevas formas de desinfección. En nuestras clínicas se han reforzado e implementado protocolos de esterilización recomendados por entidades sanitarias, el Consejo de Dentistas y por los Colegios Oficiales.
Desde SELO, y con la experiencia de los años como usuarios de la tecnología láser, animamos a todos los compañeros a ir implementando también la tecnología láser a su práctica, algo que les aportará destacados beneficios.
Nuestras clínicas seguirán siendo muy seguras y ahora más que nunca. Nuestros pacientes deben saberlo.