Los Consejos Generales de estas profesiones emiten un comunicado conjunto en el que solicitan a los responsables políticos y sanitarios decisiones urgentes y efectivas ante la crisis provocada por la pandemia del COVID-19. La situación sanitaria cercana al colapso en algunas comunidades autónomas o el alto porcentaje de contagio entre los profesionales por la falta de equipos de protección preocupan especialmente. Además, destacan que es necesario decretar el cierre de las clínicas dentales, habilitando centros públicos y privados para la atención de urgencias.
Ante la actual situación de crisis sanitaria única y excepcional provocada por la pandemia del Coronavirus COVID-19, con unas cifras desorbitadas de contagio y fallecimientos, cuyas previsiones para los próximos días son aún más desalentadoras, los representantes de los Consejos Generales de Dentistas, Enfermeros, Farmacéuticos, Médicos y Veterinarios, han emitido un Comunicado conjunto.
En el mismo señalan que la situación actual «nos obliga a ser muy exigentes en solicitar a los responsables políticos y sanitarios la toma de decisiones urgentes y efectivas. La situación referida en algunas Comunidades Autónomas así nos lo demanda. Ni un minuto que perder». Respecto al importante porcentaje de profesionales sanitarios contagiados, «genera una situación de enorme preocupación desde las organizaciones colegiales que representamos, además de suponer un riesgo desde el punto de vista asistencial, ya que está provocando que el sistema sanitario nacional se encuentre en una situación cercana al colapso en algunas Comunidades Autónomas, y prácticamente al límite en su capacidad de recursos humanos, lo que está ocasionando los profesionales deban realizar un esfuerzo importante y sobreañadido a sus tareas habituales».
Como profesionales sanitarios destacan «la situación de total inseguridad y desamparo, al llevar a cabo nuestra labor asistencial y de prevención de salud pública en unas condiciones sanitarias inadecuadas y muy arriesgadas, al existir una falta de suministro del material y equipos de protección necesarios para garantizar la seguridad precisa, tanto para nosotros como para los pacientes. Por ello, solicitamos con carácter urgente, que en todos los niveles asistenciales sanitarios (Hospitales, Centros de Salud, Consultorios, Clínicas Dentales, Farmacias y Espacios Veterinarios), sin ninguna exclusión, se disponga de todas las medidas de protección sanitaria para garantizar la seguridad de cada uno de los profesionales que están en tareas de servicio permanente en la lucha contra esta pandemia».
Los Consejos firmantes del comunicado, que representan a más de 721.000 profesionales sanitarios de España, tanto del sector público como del sector privado, destacan «la labor conjunta que se está desarrollando en esta crisis contra el coronavirus, tanto a nivel preventivo como asistencial. Deseamos mostrar nuestro reconocimiento y aliento a todos ellos, independientemente del modelo y del lugar de ejercicio profesional». Asimismo, consideran que «en esta crisis ningún recurso sanitario debe ser infravalorado y subestimado, toca tener altura en las decisiones sanitarias y alejarse de debates improcedentes, innecesarios e ideológicos que solo producen parálisis y pérdida de oportunidad. No es momento de evaluaciones, de discrepancias ni de reproches, pero sí de exigencias de acciones efectivas y urgentes, de solidaridad, de vocación de servicio y de aunar esfuerzos entre todos, con convicción y contundencia».
Con el fin de evitar que la situación empeore, con el colapso en el sistema, consideran necesario «implementar una política nacional firme de los recursos humanos sanitarios existentes, además de llevarse a cabo de forma rápida y contundente, todas las acciones necesarias para dotar al personal sanitario del material y equipamiento preciso para realizar su actividad asistencial con las mayores garantías para todos». Asimismo, es vital que, a la mayor brevedad, «se disponga de las pruebas diagnósticas que permitan disminuir al máximo las posibilidades de extensión de la pandemia».
En el caso particular de las clínicas dentales, el comunicado refleja que «se ha procedido a donar todo el material de protección del que se dispone como medida de solidaridad ante la gravedad de la situación, por lo que la continuidad de la actividad clínica puede incrementar significativamente el riesgo de transmisión de la enfermedad. Por ello, salvo para situaciones de urgencia y emergencia, consideramos que es necesario decretar el cierre de las clínicas dentales durante esta situación de crisis sanitaria, habilitando centros públicos y privados para la atención de urgencias».
Los Consejos profesionales firmantes manifiestan su total compromiso con el Gobierno central y autonómicos en esta situación de emergencia sanitaria sin precedentes, solicitando, asimismo, «que se nos tenga en cuenta a la hora de tomar decisiones, como representantes de todo el colectivo de profesionales sanitarios».