La investigación ha sido publicada en la revista científica JAMA Pediatrics y se basa en la evaluación de 601 parejas de madres e hijos de Canadá. Las puntuaciones de cociente intelectual más bajo en menores de 3 a 4 años se han relacionado con la exposición materna al flúor.
Los autores de la investigación han encontrado que por 1 miligramo adicional por litro en la concentración de fluoruro en la orina de la madre, los pequeños varones sufrían una reducción de 4,5 puntos en su coeficiente intelectual. En el caso de las niñas la asociación no ha sido tan significativa.
Más investigación
Al respecto, la Dra. Aparna Bole, presidenta del Consejo de Salud Ambiental de la Academia Estadounidense de Pediatría, ha hecho hincapié en que las diferencias de género en los resultados hace más compleja la interpretación del estudio. «La diferencia de género en los resultados dificulta la interpretación. En este punto, la diferencia de género es problemática», comenta.
De este modo, los expertos apuestan por la necesidad de más investigaciones de este tipo. Todas ellas serían necesarias para asegurar y relacionar el consumo de flúor en el agua y los efectos que pueda o no causar entre los más pequeños.
