InicioNewsletter«Son muchas las ventajas que nos aporta el flujo digital»

«Son muchas las ventajas que nos aporta el flujo digital»

Dr. Carlos Repullo, referente en Implantología digital

La digitalización de la Odontología está modificando los procedimientos hasta ahora utilizados tanto en las clínicas como en los laboratorios dentales, dando como resultado nuevos protocolos y procedimientos. Hablamos con el Dr. Carlos Repullo en Frankfurt (Alemania), con motivo de la presentación del escáner intraoral, Primescan, de Dentsply Sirona, acerca de lo que supone el desembarco de las últimas técnicas implementadas dentro del flujo digital, y del cambio que esto está suponiendo en el enfoque de los tratamientos y en la relación entre la clínica y el laboratorio.

—En su caso, ¿por qué tomó la decisión de apostar por lo digital?
—Tomé esta decisión hace unos años cuando pensé que la tecnología ya estaba suficientemente desarrollada para ser realmente una herramienta útil y válida en mi clínica. Me atraía, sin duda, la posibilidad de ofrecer un servicio diferenciado a mis pacientes, ya que, en ese momento, había pocas clínicas que contaban con esta tecnología y se tenía una mayor repercusión en nuestro entorno.
En definitiva, aposté por la digitalización porque me ofrecía la posibilidad de mejorar los tratamientos que venía realizando de forma convencional, controlando todo el proceso desde la planificación hasta la restauración final. Sin duda, vi claro el potencial de esta tecnología y que se estaba haciendo un hueco en nuestras clínicas para quedarse.

—¿Cómo afecta la incorporación de estas nuevas tecnologías en la clínica de cara a su flujo de tra- bajo con el laboratorio?
—La comunicación y el trabajo entre la clínica y el laboratorio están cambiando significativamente. Hasta el momento, enviábamos al laboratorio una impresión de silicona que se procesaba a continuación. Actualmente, le mandamos el trabajo más elaborado, se envía el modelo virtual con los márgenes marcados, listo para diseñar y procesar. La principal ventaja de todo este proceso es el ahorro de tiempo, la rapidez y la precisión con la que se producen los trabajos y la posibilidad de recuperar la información del trabajo de laboratorio en cualquier momento. Son muchas las ventajas que nos aporta el flujo digital.

—¿Y la evolución tecnológica se produce antes en la clínica o en el laboratorio?
—En un primer momento fueron los laboratorios quienes dieron el primer paso, ahora creo que la situación ha cambiado y es en las clínicas dentales donde se aprecia más interés por la digitalización. De todas formas, no podemos avanzar el uno sin el otro y tenemos que evolucionar juntos, lo que va a suponer un esfuerzo en inversión y en formación para ambas partes. No podemos esperar que el flujo digital llegue a nuestro día a día si nosotros no hacemos nada para estar preparados para ello.

—Aún así, ¿le pondría algún pero a la digitalización?
—El pero que yo pondría es que, aunque las nuevas tecnologías cada vez nos facilitan más su uso y tenemos que interactuar menos con el software, también es verdad que se están desarrollando más opciones y posibilidades terapeúticas, lo que por un lado se simplifica, y por otro, se vuelve más complejo y con una curva de aprendizaje mayor.
Si nosotros nos iniciamos en cualquier campo de la Odontología, esto va a requerir un esfuerzo, una dedicación, en definitiva, formación. Esto es igual, se trata de un nuevo campo, la Odontología Digital, que tiene mucha profundidad, más de la que nos imaginamos.

—Por tanto, la inversión en tecnología debe ir siempre unida a la formación…
—La formación tiene que ir de la mano de la compra, es necesaria, y sobre todo al principio, para que el inicio sea más fácil y accesible.
Cuando me inicié en el sistema Cerec había muy poca oferta de formación en España y el aprendizaje era autodidacta, por el método de ensayo-error, y así la curva de aprendizaje se hacía muy larga y complicada. Ahora la situación es muy diferente, el nuevo usuario dispone de varias academias en España y de muchos profesionales con experiencia donde recurrir para recibir formación o avanzar dentro del sistema.
Como ya he dicho anteriormente, la digitalización nos aporta nuevas posibilidades terapéuticas y la formación nos brinda la oportunidad de conocerlas, saber cómo acometerlas y sacar el máximo rendimiento del sistema.

—Entonces el mayor peso formativo, en este caso, lo tiene la industria…
—Sí, porque normalmente la formación es muy específica con cada sistema, por eso va muy unida al producto. Hay pocas formaciones genéricas o abiertas en Odontología Digital, generalmente están ligadas a la casa comercial porque debes aprender un software y un procedimiento determinado.

—¿Y qué otras vías habría, a nivel formativo, para aquellos que no están tan introducidos o que no contactan tan directamente con una marca?
—Hay otras vías, como la formación universitaria. Tanto en España como en el extranjero hay postgrados que son universitarios. Se intenta dar formación en Odontología Digital con una perspectiva más amplia, no tan ligada a un producto concreto. También existen academias privadas, que generalmente están más unidas a la empresa, y, por encima de eso, algún curso y postgrado internacional.

—¿Y en la formación de Pregrado?
—En Pregrado lo tratan muy pocas universidades. Generalmente universidades extranjeras, concretamente norteamericanas, que han hecho una inversión muy fuerte digitalizando las clínicas universitarias y cuentan al frente con personal bien entrenado y capaz de liderar un departamento de Odontología Restauradora enfocado a lo digital. Ahí, sí que el alumno de Pregrado sale ya con cierta experiencia al haber utilizado diferentes sistemas, protocolos digitales y nuevos materiales; ya han realizado tratamentos en digital y, lo más importante, están predispuestos a trabajar en este campo.
En España podemos encontrar algunos departamentos que adquirieron equipos CAD/CAM o cámaras intraorales, pero a los que el alumno de Pregrado tiene un acceso muy limitado, generalmente está más enfocado al postgrado. Yo creo que el programa de formación que está más desarrollado en ese aspecto es el Máster de Odontología Restauradora basada en Nuevas Tecnologías de la Universidad Complutense en Madrid, al frente del cual está el Dr. Guillermo Pradíes. Allí sí que salen con un criterio más profundo de las diferentes opciones en Odontología Digital.

El Dr. Repullo es ponente habitual en congresos nacionales e internacionales sobre Implantología Oral Digital, Cirugía Guiada, CAD/CAM y CBCT.

—¿La tecnología no evoluciona, por tanto, en paralelo a las necesidades formativas que genera?
—Por mi propia experiencia la tecnología siempre va por delante. Cuando yo terminé la carrera la Implantologia estaba fuera del currículum de las universidades, y ya era un tratamiento común en la clínicas dentales y conocido por los pacientes. No se incluyó en la formación de Pregrado hasta que ya era un tratamiento muy extendido y demandado. Lo mismo va a pasar con la Odontología Digital. Ahora mismo tiene muy poca presencia. Los estudiantes salen sin nociones claras, y es la industria la que realiza un mayor esfuerzo en tener presencia y en organizar eventos para acercar y dar a conocer el CAD/CAM y las nuevas tecnologías.
Supongo que esta situación cambiará en los próximos años, porque el mercado demandará dentistas formados en esta materia.

—Y si tuviera que destacar alguna herramienta revolucionaria en Odontología Digital, ¿cuál sería?
—Para mí el CBCT, es el primer paso. Yo primero tengo que diagnosticar bien, necesito ver lo que hay y después una herramienta de trabajo potente como puede ser el CAD/CAM. Pero mi primer paso dentro de la digitalización sería la incorporación de un CBCT. Eso nos da una capacidad de calidad del trabajo por encima de ninguna otra cosa.
Cada vez vemos que hay mayor integración entre diferentes sistemas, por ejemplo, entre el CAD/CAM y el CBCT. Eso ya es una realidad que nos permite multiplicar la capacidad de diagnóstico y de tratamiento. Por último, la incorporación de la impresión 3D como complemento al flujo digital.

—En alguna ocasión ha declarado que ya es posible realizar tratamientos cien por cien digitales, ¿pero echaría algo de menos del procedimiento tradicional?
—En mi experiencia, aplicando el flujo 100% digital, que prácticamente es el tratamiento del implante unitario, todo son ventajas con respecto al flujo de trabajo convencional. Podemos realizar la planificación, el tratamiento quirúrgico y el tratamiento restaurador bajo un flujo de trabajo digital, sin radiografías impresas, sin materiales de impresión, sin modelos de escayola, sin encerados diagnósticos, sin férulas radiológicas… y lo más importante, lo podemos realizar en una sola cita. Así, el paciente acude con una urgencia a nuestra clínica y en una sola cita podemos solucionar su problema.
Ahora estamos trabajando para ampliar las indicaciones de este flujo de trabajo para tratamientos más extensos y con ello podremos cerrar el círculo dentro de la Implantología digital.
La única duda que se puede plantear es cuál será el límite de trabajar en una sola cita. Probablemente seguirá limitado a la restauración individual o a pequeños tramos edéntulos, aunque, de cualquier manera, se verán simplificados los protocolos y los tiempos de tratamientos más extensos. Esto tendrá una repercusión muy positiva en nuestra práctica clínica, pero, sin duda alguna, el principal beneficiado será el paciente.
Por todo ello, creo que no podría volver al flujo tradicional, no veo qué ventajas me podría aportar en mi trabajo clínico con respecto al flujo digital.

El Dr. Repullo asegura que gracias a lo digital «podemos dar una solución inmediata a nuestros pacientes, que son los principales beneficiarios».

—¿Y en ese proceso, cree que llegaremos a ver al clínico y al protésico trabajar juntos en la clínica?
—Desde luego sería lo más deseable. En España tenemos una ley muy antigua que no permite al protésico entrar en la clínica y colaborar con el dentista. Las condiciones actuales son completamente diferentes a las que teníamos hace veinte años, no podemos seguir con las mismas normas cuando la realidad ha cambiado tanto, cuando actualmente tenemos equipos y medios que integrarían perfectamente la figura del técnico dental en la clínica.
El grueso de la producción se mantendría en el laboratorio, pero una parte del trabajo se podría realizar dentro de la clínica, lo que aportaría agilidad y una perfecta comunicación entre ambas partes. Se podría entender mejor si se planteara como una extensión del laboratorio dentro de la clínica dental.
Creo que el papel que debería jugar la tecnología en esta relación es la de acercamiento y no distanciamiento, ahora más que nunca necesitamos una colaboración más estrecha con el técnico dental.

—¿Ve a España muy a remolque en esta carrera hacia lo digital con respecto a otros países?
—No. Nosotros nos guiamos por el índice de penetración que tiene un producto en las clínicas dentales, principalmente los sistemas CAD/CAM e impresión digital. Hay países que, evidentemente, van más adelantados porque tienen un mayor porcentaje de clínicas digitalizadas, pero en nuestro país hay un movimiento fuerte, hay mucho interés por parte del dentista y desde luego un gran número de clínicas que han invertido y apostado por la digitalización en los últimos años. Obviamente hay un freno, que es la necesidad de una inversión importante, pero creo que todo el mundo ya es consciente de que hay que entrar en este nuevo campo de la Odontología. Lo que no está tan claro es cuándo y cómo, cuál será el momento adecuado y cuál será el equipamiento correcto.


Perfil profesional

• Licenciado en Odontología ISCS-SUL, (Lisboa, Portugal).
• Diploma in Implant Dentistry, Royal College of Surgeons of England (London, UK).
• Advance Certificate in Implant Dentistry, Royal College of Surgeons of England (London, UK).
• Certified Cerec Traning, ISCD (Austria).
• Miembro de la Academy of Digital Dentistry (UK).
• Fundador de la Academia CADDENTAL.
• Práctica privada en Sevilla.


Más personal…

• Nacido en… Sevilla, el 4 de marzo de 1973.
• Aficiones… el cine.
• De no haber elegido esta profesión… Cirujano cardiovascular.
• Un lugar… Bled (Eslovenia).
• Una película… Bailar en la oscuridad.
• Música preferida… Björk.
• Viajes en cartera… Singapur.

artículos relacionados