Dr. Miguel Roig Cayón, presidente de SEPES
Continuar con el proyecto y la filosofía que Nacho Rodríguez ha imprimido los últimos seis años es la premisa con la que el Dr. Miguel Roig afronta la presidencia de la Sociedad Española de Prótesis Estomatológica y Estética, puesto desde el que seguirá apostando por su internacionalización, por dar visibilidad a los jóvenes valores y por ofrecer una formación de calidad y accesible a todos sus socios. Tres pilares que han hecho de SEPES una de las organizaciones más activas científica y socialmente del panorama odontológico nacional.
—¿Cuándo «aterrizó» en SEPES?
—La verdad que fue fruto en buena parte de la casualidad, de una casualidad que hoy agradezco porque he tenido la suerte de trabajar durante estos últimos seis años, como secretario-tesorero de la Sociedad, con gente magnífica, hoy amigos míos, con/de los que he aprendido y disfrutado muchísimo. Al frente de este equipo, el Dr. Juan Ignacio Rodríguez, Nacho, un hombre que tiene una empatía fuera de lo normal y una increíble capacidad de liderazgo ejercida desde la sencillez y la cercanía. Es una persona con un corazón enorme, extraordinariamente generosa. Y luego el resto de miembros de la junta, que son fantásticos.
—¿Y cuándo decidió dar un paso al frente?
—No me planteé nunca encabezar la candidatura a la junta de SEPES. Insistí en que Nacho siguiese tras sus primeros tres años. Entiendo que los cargos tienen que renovarse, pero en él concurrían una serie de circunstancias excepcionales que hacían razonable su presentación a la reelección. Una vez concluido su segundo mandato, creía que había otras personas que eran mejores para seguir, como por ejemplo, Loli Rodríguez, una profesional cien por cien SEPES. Pero no cuajó.
Como no queríamos que muriera el proyecto de Nacho entrando una candidatura radicalmente distinta –no porque fuese malo, sino porque queríamos una cierta continuidad–, al final decidimos presentarnos unos miembros de la junta. Al mismo tiempo, otro grupo de socios manifestó su interés por presentar una candidatura. Nos sentamos a hablar ambas partes y llegamos a la conclusión de que era mejor hacer una candidatura conjunta y, así, garantizar una transición más ordenada.
—¿Quiénes le acompañan en la Junta Directiva de la organización?
—La Junta Directiva se ha renovado en su totalidad, todos son perfiles clínicos que tienen vinculación universitaria. Están el Dr. Guillermo Pradíes, director del Departamento de Prótesis de la UCM y profesor de contrastado prestigio; el Dr. Jaime Jiménez, una persona más joven con mucha proyección nacional e internacional, que puede dar mucho empuje como secretario-tesorero; el Dr. Alfonso Arellano, como vicepresidente, que viene de Bilbao y es amigo mío desde hace muchos años; el Dr. Rafael Martínez de Fuentes, un apasionado de la tecnología y las redes sociales, y el Dr. Carlos Oteo Morillas, un tipo encantador, entusiasta, vital y extraordinariamente capaz, que dará un nuevo impulso a los «Valores SEPES». Saber buscar en la juventud es clave. Y podemos decir, con mucho orgullo, que gracias a esta iniciativa están saliendo unos profesionales brillantísimos.
Por mi experiencia en los últimos años en la junta directiva de SEPES, intentaré transmitir en el nuevo equipo la filosofía de Nacho para que la adapten a los tiempos que vienen.
—¿Y qué aportará el Dr. Miguel Roig a la presidencia de SEPES?
—Lo de Nacho ha sido algo excepcional. Pero ni mi tiempo ni mis capacidades son las mismas que las de él. Yo deberé seguir un modelo distinto. Tenemos que trabajar todos para llegar a donde una persona sola no puede.
—¿Por qué momento atraviesa la Odontología española?
—La Odontología actual tiene un problema que es la competencia, en parte porque las universidades estamos sacando demasiados dentistas a la calle. No obstante, al mismo tiempo esta competencia ha provocado que los profesionales sean mucho más competentes. La plétora obliga a muchos a buscarse la vida. Está claro que para conseguirlo hay diversas vías. Se puede hacer engañando, y lamentablemente esto en la actualidad abunda. Hemos tenido dramáticas experiencias recientemente.
Pero en la otra cara de la moneda tenemos que la Odontología española ha dado un salto espectacular. Recuerdo hace años, en mi departamento de la Universidad –es catedrático y Jefe de Área de Restauración Dental en la Universidad Internacional de Cataluña– que siempre buscábamos en el exterior. Bebíamos en fuentes exteriores. Aquí en España los grandes conferenciantes eran los ponentes internacionales. Afortunadamente este escenario es hoy radicalmente distinto. Puedes traer a un Congreso a un ponente internacional espectacular, y en la sala de al lado, tener a un español, no muy conocido, que hace unos casos espectaculares, presentaciones brillantes, con fotografías extraordinariamente cuidadas… La gente que mira tanto el detalle acaba trabajando muy bien. Una importante parte del éxito de Steve Jobs estaba en la búsqueda de la excelencia cuidando el pequeño detalle. Ahora lo estamos viendo en un montón de profesionales españoles.
—Ya ha mencionado la iniciativa SEPES Valores, totalmente consolidada dentro de la Sociedad. Por supuesto, que seguirá siendo una línea de trabajo prioritaria de cara a los próximos tres años.
—La iniciativa de Nacho SEPES Valores ha sido brutal. Hemos descubierto un montón de gente brillante. Cuando una persona trabaja muy bien detrás hay mucho conocimiento. No puede ser fruto de la casualidad, ni de la habilidad. Es producto del estudio, de saberse la literatura muy bien, de conocer todas las opciones y herramientas, y de tener la genialidad de saber utilizar todo ese conocimiento de la forma adecuada y en el momento idóneo. Hay gente que es capaz de saber llegar a ese nivel de excelencia tan grande.
Por tanto, no tiene ningún sentido renunciar a la riqueza de la aportación de la juventud. Esto no puede ser un cementerio de elefantes. El mundo es de los jóvenes.
—Además, su faceta como profesor le permite estar en contacto con los profesionales del futuro.
—Aunque soy dentista de clínica durante 35 horas semanales, tengo la suerte de trabajar en la universidad. Estar tantas horas relacionándote con jóvenes es extraordinariamente enriquecedor desde el punto de vista profesional porque es un desafío constante estar respondiendo a sus preguntas e inquietudes. Los alumnos te obligan a mantenerte ágil y documentado y te enseñan cada día. El mundo está cambiando aceleradamente y esto es una escuela de innovación. Todo lo que son las aplicaciones informáticas, las nuevas formas de comunicación, las redes sociales… Aprendes que tenemos que explorar nuevas vías para acercarnos a ellos, también en la docencia. Tratar de enseñar en la universidad de otra manera y en las sociedades científicas adaptar los formatos a los que los milenialls demandan. Ahora no son significativos en la Sociedad, ni en número ni en economía, pero en diez años van a ser los que lideren estos proyectos. Es lógico, por tanto, que tengamos que abrirnos en este sentido.
—Otra de las líneas estratégicas en los últimos años de SEPES ha sido la formación on line. ¿Cómo valora estos cursos que se ofrecen a los socios?
—Es una herramienta muy útil y en los cursos se han registrado unas cifras de seguimiento muy altas. En todas las conferencias on line impartidas han participado de media ciento y pico profesionales. Y que a las diez de la noche, después de la jornada laboral, alcances estas cifras es todo un éxito. Las doctoras Ana Mellado y Loli Rodríguez han hecho una tarea excepcional estos últimos años. Es un formato en el que hay que seguir trabajando. Es una formación muy buena y, al mismo tiempo, un medio para que personas jóvenes compartan su forma de trabajar y tengan visibilidad.
—Jóvenes Valores, Formación on line y nos queda analizar el tercer pilar prioritario para SEPES: la internacionalización. ¿Cómo se traduce esto en el día a día?
—Aunque se va a mantener la filosofía, no podemos olvidar que el modelo ha cambiado. Nos interesa la internacionalidad no como receptores de conocimiento sino como interlocutores, para entre todos intercambiar conocimientos y experiencias con el propósito de conseguir los mejores tratamientos a nuestros pacientes.
Somos actores que queremos jugar un papel importante. Hay en nuestra Sociedad gente con grandes ideas y es bueno que los demás las conozcan, así como nuestra idiosincrasia, nuestra forma de entender la comunicación: cómo desde el buen rollo puedes crecer. Hay que saber conjugar la seriedad y el orden con disfrutar. Creo que tenemos mucho que aportar.
Llevo invitando muchos años a la gente de la universidad y puedo presumir de tener buenos amigos fuera. Y me dicen: Qué Odontología tan buena hay en España. Es un orgullo. Esto en lo que se traduce es en mejor salud oral para la población, precisamente por lo que tenemos que trabajar: por ofrecer mejores tratamientos y dar mejor servicio. Este es el mejor antídoto contra los estafadores.
—En los últimos años SEPES ha celebrado congresos conjuntos con la EAO (European Association for Osseintegration), EPA (European Prosthodontics Association) y en 2019 la cita conjunta será con la IFED (International Federation of Esthetic Dentistry), en Barcelona. ¿Cómo será este congreso del que será anfitrión absoluto?
—No será un congreso tan multitudinario como el de EAO. La finalidad en este caso consiste en que los representantes de muchas sociedades de muy diversos países tengan la oportunidad de ver el perfil de la Odontología española, contribuyendo a que ésta tenga un valor relevante en el mundo.
Perfil Profesional
- Licenciado en Medicina y Cirugía. Universidad de Barcelona (UB).
- Médico Estomatólogo (UB).
- Doctor en Medicina y Cirugía (UB).
- Ejercicio privado de la Odontoestomatología.
- Catedrático y Jefe de Área de Restauración Dental. Universidad Internacional de Catalunya (UIC).