Surge de una investigación con células madre aisladas de las muelas de juicio
Con esta patente, los investigadores han logrado reducir el tiempo de espera de la fijación de los implantes de tres meses a quince días.
Investigadores del Regenerative Medicine Research Institute, de la Universitat Internacional de Catalunya (UIC Barcelona), y de la Universidad Católica de Murcia (UCAM) han patentado un líquido bioactivo, Bone Bioactive Liquid, que supone una revolución terapéutica en pacientes con piorrea. El biomaterial favorece la regeneración ósea y de la encía evitando la inexorable pérdida del diente. El líquido descubierto atrae a la zona dañada las células madre del hueso, o células osteoprogenitoras, que se adhieren, proliferan y acaban diferenciándose a matriz ósea mineralizada, o en lo que es lo mismo: hueso maduro. Esta generación de hueso provoca que la unión con los dientes sea mucho mayor y evita la caída.
El Bone Bioactive Liquid tiene una importante segunda aplicación en el tratamiento de la periimplantitis. En este caso, el líquido también actúa atrayendo a las células madre del hueso, lo que evita la inflamación de los tejidos que rodean el implante y su posible pérdida. «El rechazo es uno de los retos a los que se enfrentan todas las empresas de implantes, especialmente en pacientes con osteoporosis. Llevan años investigando cómo solventar esta pérdida de hueso», afirma el doctor Maher Atari, director del Regenerative Medicine Research Institute y descubridor de las células madre de las muelas de juicio (DPPSC).
El líquido fue primero desarrollado a partir de esta línea de investigación y de los resultados de dos tesis doctorales. Posteriormente, fue probado in vivo en modelo animal bajo la dirección del doctor José Luis Calvo Guirado, director de la Cátedra Internacional de Investigación en Odontología de la UCAM.
Los implantes son ampliamente utilizados en la cirugía ortopédica y en la Odontología. Para que su fijación ósea sea duradera, necesitan que se genere matriz ósea mineralizada. «Este proceso suele tardar entre tres y seis meses. Con la ampliación de este nuevo líquido, el tiempo se reduce a quince días, lo que elimina la incertidumbre», prosigue el Dr. Atari en la que es ya la tercera aplicación del Bone Bioactive Liquid.
«El proceso de fabricación del nuevo líquido no es complicado ni caro y su manejo en los procedimientos quirúrgicos es simple», argumenta el Dr. Atari. Tiene la capacidad de ser utilizado con cualquier tipo de superficie de titanio y su eficiencia y estabilidad han sido sobradamente analizadas, por lo que tiene las condiciones óptimas para su uso en humanos. De hecho, actualmente UIC Barcelona y la UCAM están en negociaciones con varias importantes empresas del sector para la licencia de la patente.