El Colegio de Dentistas cordobés se presentó como acusación particular
La Audiencia Provincial de Córdoba ha ratificado la multa de 5.400 euros a un hombre, natural de Barcelona y de 39 años, protésico dental de profesión, por ejercer de dentista en la prisión provincial de Córdoba, sin contar con el título correspondiente para ello. De esta forma, se desestima el recurso de apelación interpuesto por el acusado al entender el juez probados los hechos de los que se le acusaba en el proceso, en el que el Colegio Oficial de Dentistas de Córdoba se presentó como acusación particular.
En su sentencia, la titular del Juzgado de Lo Penal número 1 de Córdoba consideraba probado que el acusado, con antecedentes penales vigentes pero no computables a efectos de reincidencia, posee el título de protésico dental, pero no el de dentista. Añadía que dicha titulación le habilita tan solo para ejercer su función en el ámbito del laboratorio protésico diseñando, fabricando y reparando prótesis y aparatos de ortodoncia a instancias y bajo la dirección del odontólogo o estomatólogo.
La juez relataba en su escrito que el acusado, pese a carecer de la titulación requerida que le habilite para ejercer la profesión de dentista, acudió en veinte ocasiones, entre el 5 de enero de 2011 y hasta el 16 de noviembre 2011, al centro penitenciario de Córdoba.
Entre esas fechas, y en alguna de sus dependencias, prestaba servicios bucales a algunos internos, a los que tomaba en boca los moldes precisos para obtener las medidas de las prótesis que les confeccionaba en su laboratorio.
Posteriormente, en sus visitas a la prisión se las probaba e instalaba en la boca, todo ello sin que el acusado contara ni con la titulación de dentista ni con la prescripción y supervisión para esas actuaciones en boca de paciente de un odontólogo o estomatólogo.