El sheriff dental. En los foros dentales ha surgido un personaje misterioso al que ya se conoce como «el sheriff», pero del que no ha trascendido nombre, filiación, vestimenta ni descripción física alguna. ¿A quién se aplica ese apodo o alias? ¿Quién se ha convertido en representante de la justicia dental y se prepara para hacer cumplir la ley? Por deducción lógica todo hace sospechar que se trata de un personaje llegado para imponer la ley en el salvaje oeste dental. Si fuera así, trabajo no le iba a faltar, desde luego, porque, como es sabido, en este «far west» hay suficientes temas a los que hincarles el diente: plétora profesional favorecida por la irrazonable saturación de las aulas universitarias; intrusismo ilegal; competencia desleal tirando a ilegal; publicidad engañosa tirando, también, a ilegal; sobretratamientos tirando, asimismo, a ilegales… Hay mucho presunto forajido al que desenmascarar ante el resto de la profesión. O sea que el individuo justiciero va a tener que hacer más horas extras que un astronauta solitario en la Estación Espacial Internacional. Habrá que esperar acontecimientos para confirmar si se trata de un auténtico «solo ante el peligro» o si formará una cuadrilla de fieles e insobornables brigadistas. Claro que, sea lo uno o lo otro, no le vendrá del todo mal que la prendida a su pecho sea una buena estrella.
Crece la solidaridad dental. Los proyectos y acciones solidarios llevados a cabo por profesionales del sector dental español viven un buen momento. Cada vez son más los higienistas, protésicos y dentistas que se suman a los planes que tienen por objetivo prestar atención dental a los más necesitados, que, por desgracia, son muchos. Por ejemplo la asociación Dentalcoop, en colaboración con la ONG Sahara 4×4 Solidario, ha centrado su último viaje africano en los campamentos de refugiados saharahuis en Tindourf, para asistir a más de 250 adultos y 40 niños y actualizar la formación de los dentistas saharauis. Y sin ir tan lejos, pocos días antes de que diese comienzo el verano se inauguró un gabinete dental en una zona deprimida de Madrid, la Cañada Real, proyecto apadrinado por el Colegio de la Primera Región (COEM). En ambos casos, dicen, se ha contado con la ayuda de la firma Henry Schein, que incluye en su programa de responsabilidad social el acceso de los desfavorecidos a la atención sanitaria. Y estas cosas hay que contarlas.
¿Director médico o director dentista? No son pocos los médicos estomatólogos que cuestionan cada vez más la proliferación de directores médicos que no lo son al frente de clínicas dentales. Aseguran que el odontólogo que no ha cursado los estudios de Medicina y Cirugía no puede utilizar el título de médico para dirigir un centro dental y argumentan que, al igual que psicólogos y podólogos, los odontólogos son profesionales sanitarios no médicos si carecen del título de médico cirujano. Por lo mismo, critican que se pueda generar una duda deliberada, incluso con repercusiones legales –puntualizan–, cuando se utilizan los términos director médico, cirujano doctor o médico oral por parte de odontólogos que quieren aparentar ser médicos cuando no lo son, y lo califican de intrusismo y/o publicidad engañosa. Por eso abogan para que en las clínicas dentales en que figuran como directores los odontólogos sin titulación médica utilicen el término Director dental o Director odontológico. Es una queja que va en aumento y que tiene diversas vertientes por lo que no sería extraño que aparecieran otros pormenores sobre el tema en esta sección. Al menos mientras siga corriendo de boca en boca.