Dra. Milagros Díaz Rodríguez, presidenta de la Sociedad Española de Odontología y Cine (SEOCI)
Fomentar el conocimiento de la Odontología y difundir el desarrollo de la profesión entre el público general son los principales objetivos que se ha marcado la Dra. Milagros Díaz Rodríguez como presidenta de la Sociedad Española de Odontología y Cine (SEOCI), una joven organización que pretende demostrar que las ciencias y el arte no son conceptos reñidos.
—¿Cuándo nace la SEOCI y quiénes sois sus impulsores?
—La SEOCI se constituye a finales de marzo de 2013, aunque ya estaba en mente desde varios años atrás, tras identificar cómo se iban plasmando los cambios de nuestra realidad odontológica en el mundo cinematográfico. En estos años se ha realizado un trabajo de investigación que ha ido analizando las diferentes especialidades odontológicas en la cinematografía; los cambios que se han ido produciendo en los profesionales, en función de edad y sexo; las complicaciones más frecuentes o las urgencias odontológicas, y cómo se han ido plasmando en los diferentes largometrajes. Nos pareció un área tan interesante que, tras reunir y exponer los argumentos que apoyan la creación de dicha Sociedad, se realizó la petición para constituirla.
Los impulsores iniciales son los mismos que forman parte de la junta directiva: la Dra. María Luisa Somacarrera Pérez, la Dra. Carmen Martín Carreras-Presas y yo misma. Tenemos en común que trabajamos en Odontología, que somos docentes universitarios y, por ello, con interés en difundir y dar a conocer otras formas de mirar la realidad que nos rodea, así como un gran interés por el mundo cinematográfico. Tras constituir la Sociedad, presentamos los estatutos.
—¿Cómo surgió la idea de crearla?
—Con la defensa de mi tesis doctoral sobre la aportación del cine en relación con la enseñanza de la Odontología en los estudios de Grado, fuimos pioneros en relacionar estas dos disciplinas. A partir de aquí, decidimos abrir un nuevo camino dentro de las sociedades científicas en nuestro país.
Actualmente, estas organizaciones carecen de contenido que pueda relacionarse con otras disciplinas. Son muchas las reuniones científicas y congresos en los que todo es ciencia y a veces se echa de menos un área social y humanitaria. En áreas como la Medicina existen proyectos que se relacionan con el cine, incluso en el ámbito universitario. La Universidad de Salamanca cuenta con una revista de Medicina y cine en la que, de forma trimestral, se publican contenidos que relacionan ambas disciplinas.
—¿Qué objetivos tiene esta Sociedad?
—Fomentar el estudio y el conocimiento de las Ciencias Odontológicas; promover y difundir el desarrollo de la profesión odontológica entre el público general; promocionar y difundir el cine con fines didácticos en relación con las Ciencias Odontológicas; y crear una base de datos específica de películas relacionadas con la Odontología son los objetivos que nos hemos marcado.
—¿Es realista la interpretación del cine de la profesión odontológica?
—Es realista hasta cierto punto. Es cierto que el cine permite ver la evolución que ha experimentado la profesión odontológica durante los últimos 100 años.
Es muy interesante ver la evolución que han experimentado los sillones dentales, los gabinetes, el mobiliario, las medidas de protección, el uso de anestesia, etc.
A veces tópicos como el dolor o el sufrimiento en el dentista también son relevantes, aunque cada vez menos.
—¿Creéis que se cumplen las medidas higiénicas de seguridad y protección en las películas que muestran a dentistas ejerciendo su profesión?
—Este aspecto es muy importante, ya que es a partir de finales de los años 80 cuando empezamos a ver en la filmografía el uso de medidas de protección universal como guantes desechables, gafas y mascarillas.
Un aspecto a destacar es que fue en 1987 cuando el Center for Disease Control and Prevention (CDC) propuso estas medidas de protección. Así que podemos decir que la filmografía se ajusta bastante a los criterios actuales.
—Recientemente habéis firmado un acuerdo de colaboración con el COEM. ¿Cuáles son los términos de esta alianza?
—Somos una Sociedad joven y la verdad es que el COEM nos ha apoyado desde el inicio. El presidente, Dr. Ramón Soto-Yarritu, nos ha apoyado y ofrecido cooperación en la realización de actividades formativas, divulgativas, etc.
—¿Qué quiere decir la SEOCI a la profesión?
—Queremos aportar algo diferente en el panorama odontológico español. Aunar la ciencia con el séptimo arte y ser una Sociedad innovadora que llegue a toda la población.
—¿Y a la sociedad en general?
—Que las ciencias y las artes no están reñidas. Que es importante que, con propuestas innovadoras como ésta, podemos informar y entretener.
—¿Qué títulos de la historia de la cinematografía no debería perderse un dentista?
—Actualmente estoy escribiendo un libro que recopila toda la filmografía que un dentista está «obligado» a ver. Algunas son «Avaricia», «Sonrisas de New Jersey», «Flor de Cactus», «Cautivos» o «La vida secreta de un dentista», por destacar algunas.
Éstas son consideradas imprescindibles, ya que puede observarse la evolución que ha experimentado la Odontología desde principios del siglo XX, tratando temas que van desde el intrusismo hasta el papel de la mujer en la profesión odontológica, entre otros.
En nuestros perfiles en redes sociales –Facebook y Twitter–siempre hacemos recomendaciones sobre películas interesantes que no hay que perderse.
—Ahora la Sociedad está dando sus primeros pasos, pero ¿qué espera conseguir a medio plazo?
—Queremos que los odontólogos y estudiantes de Odontología, así como el público en general se involucren en el proyecto que tenemos en marcha.
Pretendemos organizar reuniones científicas combinadas con cine fórum sobre temas de actualidad, de manera que, además del interés científico para odontólogos y estudiantes, el público general tenga acceso a información de calidad.
También nos planteamos a medio plazo la realización de un festival de cortometrajes relacionado con la Odontología. •