La brillante trayectoria académica y profesional del Dr. Victoriano Serrano –miembro del comité científico de GACETA DENTAL– le ha hecho merecedor este año de la máxima distinción científica concedida por el Colegio de Dentistas de Madrid. Orgulloso y agradecido por este reconocimento, charlamos con él sobre el pasado, presente y futuro de una profesión que le ha acompañado desde que era un niño.
—¿Qué ha supuesto para usted la concesión de la Medalla de Oro al Mérito Científico por parte del Colegio de Dentistas de Madrid?
—Un motivo de gran orgullo y satisfacción, aunque dudo que sea suficientemente merecido. El reconocimiento por parte de tu colegio profesional es muy gratificante y lo agradezco de todo corazón.
—¿Qué momentos destacaría de su carrera como los más relevantes?
—El acabar la carrera de Medicina me brindó la oportunidad de realizar la especialidad de Estomatología, que constituía mi auténtica vocación. Posteriormente, me inicié con mucha ilusión en el camino de la docencia, que culminó en la consecución de la plaza de Profesor Titular de Estomatología Médica (hoy día Medicina Oral y Periodoncia). ¡Parece increíble que hayan pasado ya tantos años como para convertirme en el Profesor Titular más antiguo no sólo de mi Facultad, sino de todo el área de conocimiento de Estomatología!
Me resultó también muy grata la realización de mi segunda tesis doctoral, esta vez en Odontología, ya que la primera fue, lógicamente, en Medicina.
—¿Quién le ha influido más a lo largo de su trayectoria profesional?
—Mi interés por la Estomatología fue muy precoz. Recuerdo que cuando mis padres me llevaban al ortodoncista, quedé fascinado por aquella profesión y enseguida tuve claro que eso era lo que quería ser de mayor. Y así fue. Ellos me apoyaron en todo.
La vocación por la enseñanza formó parte de mi vida desde mis primeros años, ya que mi padre, profesor encargado de la Cátedra de Patología General en la Universidad de Cádiz, era un docente vocacional y entusiasta, que transmitía esa pasión por la enseñanza a todos cuantos le rodeábamos.
Al llegar a Madrid, gracias a la generosidad del Prof. Jiménez Collado, que me abrió las puertas de su Departamento de Anatomía, accedí a mi primera plaza docente. Esa circunstancia fue determinante para mí, ya que ahí comenzó mi actividad en este campo en la Universidad Complutense, que en octubre cumplirá 33 años.
Cuando terminé la especialidad de Estomatología leí mi primera tesis doctoral dirigida por el Prof. Jiménez Collado junto con el Prof. Miguel Lucas. Tanto el Prof. Lucas, primero, como posteriormente el Prof. Bascones me brindaron todo tipo de ayuda en mi actividad académica e investigadora. No puedo olvidarme de todos los profesores con los que he trabajado día a día en el departamento, pues de ellos he aprendido y continúo aprendiendo. Estoy también muy orgulloso de haber sido elegido en su momento, por mis compañeros, director del Departamento de Medicina y Cirugía Bucofacial.
—Como clínico, como docente… ¿Cómo ve el presente y futuro de la Odontología española?
—Con mucha preocupación. La plétora profesional que llevamos padeciendo durante muchos años debida a la falta de un control razonable del número de estudiantes, está llevando a un deterioro de la profesión. Además esta misma circunstancia, es responsable del empeoramiento de las condiciones actuales del mercado laboral. Se habla ya de un paro del 20% de la colegiación en toda España. Me consta que la Conferencia de Decanos, los colegios profesionales y el Consejo General están realizando gestiones ante las autoridades competentes para que se llegue a una adecuación entre el número de odontólogos que salen de las facultades y las necesidades reales de la sociedad. Todo esto tenía que haberse previsto antes, por lo que en estos momentos es muy difícil vislumbrar las condiciones futuras de la profesión.
—¿Ve la misma ilusión con la que usted daba sus primeros pasos profesionales en los estudiantes de Odontología?
—Cuando yo empecé eran otros tiempos. Hablamos del año 1982, todos éramos licenciados en Medicina y teníamos una mayor edad, había trabajo y eso generaba una gran motivación. Había mucha ilusión por acabar para poder montar nuestras consultas.
Hoy día pienso que la ilusión es mucho menor. El panorama que se están encontrando los nuevos titulados no es nada halagüeño. Son profesionales jóvenes, con una gran preparación en la mayoría de los casos, que han cursado planes de estudios configurados en base a competencias, que han realizado másteres y que, en el mejor de los casos, aspiran a trabajar por cuenta ajena.
Según los últimos datos del COEM, alrededor de un 40% de los licenciados entre 2010 y 2012 son asalariados, sin contar aproximadamente un 5% que no tienen contrato. El desempleo en estos mismos años alcanza el 22% y casi un 10% realizan trabajos distintos a la Odontología. Esta situación es un auténtico disparate, porque a los españoles, la formación de los universitarios nos supone una gran inversión económica, y éstos empiezan a tener que emigrar a otros países, que rentabilizan un esfuerzo económico que no se ha realizado allí.
Los que se quedan, en muchos casos, están sometidos a las contrataciones realizadas por determinadas franquicias, que llegan a ser humillantes.
No obstante, quiero darles un mensaje positivo a los jóvenes odontólogos. Que no desesperen, que con formación, humanidad, perseverancia y compromiso con los pacientes, saldrán adelante.
—Desde que usted se inició en la profesión, ésta ha evolucionado mucho. Si tuviera que señalar alguno de los principales logros, ¿cuáles serían?
—La evolución ha sido enorme: la Tomografía Computerizada de haz cónico para la planificación de ortodoncia, implantes, cirugía oral, periodoncia, etc., que nos permite una reconstrucción real en 3D de la anatomía del paciente, es actualmente una herramienta de inestimable ayuda.
También los nuevos materiales odontológicos han cambiado nuestra filosofía de trabajo. Las técnicas de implantología, en constante evolución, se han beneficiado de la cirugía guiada en donde confluye la más alta tecnología radiológica, informática y quirúrgica. La tecnología CAD-CAM es una técnica innovadora en la fabricación de prótesis. La Odontología mínimamente invasiva permite actuaciones más beneficiosas para el paciente. Los importantes cambios en la endodoncia, tanto en la instrumentación de los conductos como en los localizadores de ápice y técnicas de relleno, han supuesto un avance considerable en este campo. Asimismo, las nuevas técnicas de ortodoncia lingual y ortodoncia invisible, junto con la evolución de los brackets de autoligado aportan un abanico mucho más amplio que satisface las necesidades y expectativas propias de cada paciente.
Hoy día también la terapeútica con láser es otro de los avances a destacar.
—¿Cómo calificaría el nivel científico a nivel nacional de la Odontología? ¿Qué países son los referentes?
—España tiene un nivel científico altísimo. Me enorgullece poder afirmar que nos podemos codear con cualquier país del mundo. El nivel de los profesionales españoles está reconocido internacionalmente, y somos una referencia tanto a nivel docente, como investigador y clínico. De hecho en España hay grupos de investigadores que están realizando proyectos a nivel internacional. Sus trabajos, fruto de importantes líneas de investigación, son publicados en las revistas de más alto impacto. Esto sucede en prácticamente todas las áreas de la Odontología. Tenemos muy poco que envidiar a países como Estados Unidos, Inglaterra, Francia, Suiza… que tradicionalmente han ostentado el liderazgo en nuestra profesión.
—El campo en el que usted es especialista, la medicina oral y la periodoncia, ¿cómo está evolucionando? ¿Cuáles son los retos más importantes a los que se enfrentan estas áreas en concreto?
—Las alteraciones inmunológicas de numerosos procesos que acontecen en la cavidad oral son actualmente una de las principales áreas en las que se focaliza la investigación en medicina oral. Asimismo, el estudio de los oncogenes toma protagonismo en el precáncer y cáncer oral. La detección precoz del cáncer oral es un reto importante.
A nivel periodontal es importante la investigación sobre las repercusiones sistémicas de las enfermedades periodontales (diabetes, enfermedad cardiovascular y complicaciones del embarazo). Igualmente me gustaría destacar el potencial que presenta la ingeniería tisular aplicada a la regeneración ósea y periodontal. El empleo de células madre adultas obtenidas del ligamento periodontal constituye una investigación puntera en la que están implicadas diversas instituciones españolas, entre ellas nuestra Facultad de Odontología con un grupo de profesores de periodoncia a la cabeza, que desarrolla un trabajo al nivel que se realiza en otras partes del mundo. En un tiempo no muy lejano, los odontólogos estarán capacitados para manejar los tejidos de ingeniería obtenidos en el laboratorio.
Más personal |
• Nacido en… Cádiz. • Estado civil… Casado, cuatro hijos. • Aficiones… Navegar, pescar y viajar. • Deportes… Tenis y pádel. • Un libro… La sombra del viento, de C. Ruiz Zafón. • Música preferida… Clásica. • Viajes en cartera… Budapest. |