¿Alguna vez te has planteado ofrecer ciertas comodidades a los pacientes que acuden a tu consulta? En países como Canadá o Estados Unidos, algunas clínicas dentales están implementando acciones que van más allá de lo puramente odontológico y que persiguen calmar la ansiedad de quienes llaman a la puerta de su consulta. Servicios que van desde la aromaterapia o bebidas calientes, hasta instalar una pantalla de televisión sobre el sillón dental para que el paciente vea su serie favorita en Netflix mientras se somete a un tratamiento. Una delgada línea roja entre buscar el bienestar del paciente y la estrategia de marketing.
Hoy recogemos un reportaje publicado en este portal norteamericano y que recorre las acciones que están llevando a cabo algunas clínicas dentales estadounidenses y canadienses.
Según destaca la web de Vox Media, cada vez hay «un mayor número de consultas que ofrece a los pacientes comodidades como aromaterapia, mantas, sillones de masaje, auriculares con cancelación de ruido, aperitivos ligeros y bebidas de café expreso. Tienen televisores montados en el techo, donde los pacientes pueden reproducir el programa de Netflix que deseen. Al final de la visita, se reparten toallas calientes con aroma a eucalipto o lavanda para que los pacientes puedan limpiarse la suciedad de la cara».
¿Y cuál es el objetivo de todo ello? Para Wesley Smith, socio de Warmstone Family Dentistry (Ottawa), «queríamos que fuera una experiencia similar a la de un spa».
Esta clínica se construyó sobre la idea de que las prácticas dentales modernas pueden transformar el cuidado de los dientes en una «experiencia». Para ello, tal y como afirma Smith a este portal norteamericano, el equipo se fijó en los hoteles, restaurantes y spas de lujo a la hora de diseñar el enfoque de la empresa en cuanto al servicio al cliente: una sala de espera rebautizada como «sala de pacientes», una cascada y una chimenea, o música de spa y aceites esenciales difundidos en el aire. Además, sus pacientes pueden pedir un café con leche mientras seleccionan los extras en el «Menú Confort», que incluye sillones de masaje, almohadas para las rodillas y el cuello, o Netflix.
Para Wesley Smith, los servicios que ofrece Warmstone «es una de las claves de nuestro éxito». Y, a juzgar por la competitividad que hay en el mercado, es una estrategia que le funciona muy bien. Y es que, según sus declaraciones a este portal norteamericano «ahora atiende a unos 100 pacientes nuevos al mes, muy por encima del estándar del sector».
La razón primigenia para ofrecer este tipo de servicios es que minimizan la ansiedad de los pacientes cuando acuden a la consulta de un dentista. «Trabajo con los pacientes para entender sus ansiedades y miedos; y comodidades como un sillón de masaje en una consulta dental pueden calmar mucho a los pacientes que experimentan ansiedad», afirma la portavoz de ADA (American Dental Association) y dentista en ejercicio, Tricia Quartey. «Los servicios como el café expreso y las toallas calientes – continúa Quartey – pueden ayudar a que los pacientes se sientan más cómodos y a que sea más probable que vuelvan a las visitas regulares, lo que puede dar lugar a menos problemas de salud dental en el futuro».
Prueba de ello es el testimonio de Sydnie Mares, una paciente residente en Houston que no acudía de manera regular a la consulta de su dentista: «La almohada térmica para el cuello calma la tensión que siento, pero tener Netflix reproduciéndose a través de los auriculares es probablemente lo que marca la diferencia. Cuando me sacaron las muelas del juicio, pude ver ‘Friends’ y no concentrarme en los sonidos que hacían las herramientas en mi boca».
Opiniones en contra
Aunque ofrecer a los pacientes este tipo de experiencias también se convierte en una táctica comercial destinada a aumentar la retención de clientes y a atraer a nuevos pacientes.
Algunos dentistas se muestran escépticos a la hora de apostar por estas comodidades. Por ejemplo, a Justin Rashbaum, odontólogo en Fashion District Dental (Manhattan) no le convence la idea de utilizar sillones de masaje o Netflix. Rashbaum cree que «los consultorios dentales invierten demasiado en estas comodidades por miedo, cuando a los pacientes les importan tres cosas básicas: ser atendidos a tiempo, que el consultorio esté limpio y no sentir dolor mientras son tratados. El resto -afirma Rashbaum- es un ‘adorno'».
Y tú, ¿apostarías por este tipo de servicios para brindar una mejor experiencia a tus pacientes?
Fuente original:
https://www.vox.com/the-goods/2019/4/24/18508125/dental-offices-luxury-spa-dentist-netflix-aromatherapy