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Consejos para cuidar la férula de descarga

Las férulas de descarga son unas fundas para los dientes, hechas de plástico muy duro, que evitan que rechinen y se aprieten sin querer. Es decir, se usan para combatir el bruxismo. Su uso es diario y para que no pierdan efectividad y duren mucho tiempo, vamos a hacerte una serie de recomendaciones para cuidar tu férula de descarga que se incluyen en este artículo de la Clínica Dental Galindo y que te van a resultar muy útiles.

Higiene adecuada de la férula de descarga

Es sumamente importante limpiarla cada día, ya que de lo contrario se dará una acumulación de bacterias que provocará mal olor, mal sabor y a la larga, problemas bucales.

  • Para limpiarla hay que usar un cepillo dental o si es posible, un cepillo específico de prótesis dental. En cualquier caso, se recomienda que sea un cepillo duro.
  • Se debe utilizar agua tibia y jabón neutro sin olor, aunque mejor si es un jabón antibacteriano.
  • Nunca se debe limpiar con pasta de dientes.

Obviamente, también hay que cuidar la higiene dental, ya que al fin y al cabo los dientes es con lo que está en contacto la férula. Y si los dientes están sucios, la férula también se ensuciará.

Guardarla bien seca en su caja

Tan importante como es limpiarla, es secarla correctamente. Sobre todo si se va a guardar en su caja, que es lo que se debe hacer. No debe tener ni rastro de humedad, porque la humedad favorece la aparición de las famosas bacterias. Para evitarlo, lo mejor que puedes hacer es secarla con un secador o con un papel absorbente.

Por supuesto, si la férula se tiene que mantener limpia, el estuche donde vas a guardarla también debe estar limpio. Así que por lo menos una vez cada semana debes lavar el estuche de la misma manera que la férula: con agua tibia y jabón neutro o antibacterias.

Dejarla a remojo un día entero

Es una buena manera de reforzar la limpieza de tu férula. Recomendamos hacerlo cada 15 días: cuando te quites la férula, la dejas en agua hasta el momento que te la vayas a poner de nuevo.

En este caso, no uses jabón, lo mejor es que en el agua eches pastillas como las que se usan para desinfectar prótesis dentales. Así te aseguras de una limpieza profunda de la férula. Basta con que las añadas un par de horas antes de sacarla del agua.

Y por supuesto, antes de volver a ponértela, lávala concienzudamente con agua y jabón para eliminar cualquier resto de los componentes de la pastilla desinfectante.

Colocar y quitar la férula con cuidado para que no se rompa

Muchas veces, la rotura de la férula dental se produce por causas mecánicas, simplemente por ponerla o quitarla de forma brusca o inadecuada. Por no hablar de que al romperse puede provocar heridas en las encías.

Así que para evitar cualquier tipo problema, sigue estos pasos:

  • Moja la férula antes de ponértela
  • Colócala con los dedos
  • Asegúrate que esté bien encajada antes de cerrar la boca. Primero cierra despacio y cuando estés seguro o segura, ya puedes morder con normalidad.
  • Para quitar la férula, igualmente usa los dedos, tirando con ellos desde lo más atrás posible y de ambos lados, nunca de uno solo.

Acudir a las revisiones en el dentista

Para cualquier problema que pueda surgir con la férula, ya sea porque se ha fracturado, porque no te sientes a gusto con ella, etc, es importante acudir al dentista cumpliendo el calendario pactado para tu tratamiento en particular. Además él o ella te podrán decir también si la férula está en buen estado o necesita una mejor limpieza o cualquier otra información que tu odontólogo considere pertinente.

Como se puede ver, el cuidado correcto de una férula dental no es nada complicado, si no que se trata más bien de constancia y no dejarnos vencer por la pereza de tener que limpiarla cada día.

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