¿Qué es una limpieza dental y en qué consiste?

La limpieza dental o profilaxis dental o periodontal tiene como objetivo primordial prevenir la aparición de la enfermedad periodontal en los adultos. Para conseguirlo, hay que eliminar la placa dental que se acumula alrededor de los dientes.

La placa dental es una materia blanco-amarillenta, blanda, que se forma por la acumulación de restos de alimentos, componentes de la saliva, bacterias y células muertas provenientes de la propia cavidad oral. Si, además, tras producirse esta acumulación, se depositan en la placa sales cálcicas de la saliva y la mineralizan pasará a ser sarro.

Una vez formado, el sarro se debe eliminar con una limpieza dental profesional o detartraje para evitar que las bacterias que viven en él puedan desarrollar una periodontitis, donde el hueso de soporte de los dientes, el ligamento periodontal y las encías se ven afectadas. Esto puede provocar sangrado, mal aliento, movilidad dental, y en los casos más graves, desembocar en la pérdida de dientes.

¿Cómo se realiza una limpieza dental?

• Lo primero es realizar una exploración previa para comprobar que no haya algún tipo de patología como una enfermedad periodontal ya desarrollada y no controlada, o caries, entre otras.
• A continuación, la profilaxis periodontal se suele realizar con unos aparatos llamados ultrasonidos, que emiten unas vibraciones capaces de desprender el sarro de la superficie de los dientes.
• También es posible utilizar curetas, que sirven para eliminar el sarro que se adhiere por encima y por debajo de la encía.

NOTA: No hay que confundir este paso con un tratamiento llamado curetaje o raspado y alisado radicular, uno de los tratamientos para la enfermedad periodontal leve o moderada.

• Otras veces, se pueden utilizar también instrumentos que pulen la superficie del diente, eliminando así rugosidades que, de lo contrario, podrían facilitar que la placa se adhiera de nuevo.
• Si es necesario, se eliminan manchas superficiales del esmalte debido al consumo de tabaco, té, etc., con unos cepillos especiales o pasando un chorro de agua a presión mezclada con un bicarbonato especial.
• También es importante limpiar correctamente los puntos de contacto entre los dientes. Para ello se usan unas tiras de pulido o tiras interproximales que se pasan entre los dientes, similar a cuando pasamos el hilo dental.

A tener en cuenta

El proceso de la limpieza dental suele llevar entre 30-45 minutos, dependiendo mucho del estado de la boca del paciente.

En casos, por ejemplo, de pacientes con mucha hipersensibilidad dental o donde existe mucho acúmulo de sarro, es posible que este proceso se realice con anestesia local.

Es importante destacar, que si la encía estaba muy inflamada, debido a una enfermedad periodontal, puede ser que al desinflamarse, la encía se retraiga, pudiendo afectar a la estética general.

Y ya para terminar, una vez realizada la profilaxis dental, lo mejor es continuar manteniendo una buena higiene dental, para evitar que el sarro y placa se vuelvan a acumular. Lo recomendable es cepillarse los dientes al menos dos veces al día, usar hilo dental, cepillos interdentales o, incluso, irrigadores en los casos indicados.

¿Duele hacerse una limpieza?

No, que te hagan una limpieza dental no duele. Consiste en eliminar restos de placa -o sarro, o manchas- de la superficie dental. Puedes notar algo en uno de estos casos:

• Si la limpieza se hace a través de las vibraciones de los aparatos de ultrasonidos mencionados antes, puedes notar vibraciones en la superficie del diente. Pero no causan dolor.
• Y si tienes sensibilidad dental, sobre todo a cosas frías, el agua que se usa para refrigerar la punta del aparato de ultrasonidos podría generar ciertas molestias. Pero, para evitarlo, se puede aplicar anestesia local en la zona. Por lo que, igualmente, no notarías molestia ni mucho menos dolor.

Sí es normal que después de una limpieza dental, especialmente si existía mucho sarro acumulado, se puedan notar los dientes y encías más sensibles (sobre todo a cosas frías) durante unos días. Pero nada más.

¿La limpieza dental daña los dientes?

Es otra pregunta habitual, y la respuesta es, nuevamente, no. Si bien los dientes pueden sentirse más sensibles tras la limpieza, esto no quiere decir que se hayan estropeado ni que se les haya rayado el esmalte, siempre y cuando la limpieza se haya hecho de manera correcta y por un profesional cualificado.

Volviendo al ejemplo de limpieza con ultrasonidos, en este vídeo puedes ver cómo funciona el método y los dientes no son dañados en absoluto.

¿Cada cuánto tiempo hay que hacer una limpieza dental?

No hay una respuesta exacta o única para esta pregunta, ya que depende mucho de cada caso.

• Algunas personas, incluso, ni requieren realizarse ninguna, ya que su higiene es exquisita.
• Y otras en cambio, pueden necesitar hacerse una cada 2-3 meses, debido a que tienen algún tipo de afección bucal, o problemas de movilidad o psicológicos que les impiden llevar una buena higiene.

Así que para tener una respuesta real a esta pregunta, lo adecuado es consultar con un profesional cualificado que pueda estudiar la situación y determinar la necesidad de llevar a cabo tratamientos preventivos.